Fanboy Draco Malfoy Convinces Harry Potter to Marry Him

Capítulo 93: Chistes sagrados y MHU-Lucius es un creador de tendencias

Draco suspiró mientras empujaba su comida.
"Esto es tu propia culpa, querida. Ya sabes cómo se pone Sirius". Su madre se rió entre dientes mientras cortaba su cena. Sabía que no debería haber empujado a Sirius, ¡pero el hombre hizo que fuera tan fácil molestarlo!
"Sin embargo, no esperaba que Harry se enojara". Dijo mientras apartaba su plato. Sirius lo había expulsado de la casa durante tres días. Draco ya estaba pasando por retiros mientras anhelaba a su esposo.
"Algunas cosas deberían permanecer entre amantes. ¿Crees que se lo dije a alguien cuando afeité a tu Padre por primera vez?" Él hizo una mueca de disgusto, pero no se atrevió a interrumpirla.
"Por supuesto, quería gritarlo desde los tejados, pero tu Padre es una flor delicada. Habría estado tan avergonzado". Draco había visto una vez a su padre salir en público con su túnica metida en la parte posterior de sus calzoncillos. Cuando alguien lo señaló, de alguna manera logró convencerlos de que era intencional. Le dio a su madre una mirada llena de incredulidad.
"¡Es verdad! Cometí un error similar cuando éramos jóvenes. Escribí todos los nombres de bebés que amaba y los envié a todos en nuestra Cámara para que los criticaran constructivamente. ¡Tu Padre no me habló durante una semana! Había sido horrible". ¡Draco rezó para que Harry no lo ignorara durante toda una semana! Simplemente moriría. Empujó su silla hacia atrás antes de anunciar: "Gracias por la charla de ánimo, madre. Voy a ir a escribir mi obituario. Si no salgo de mi habitación, por favor haz que Herm lo lea en mi funeral". Su madre asintió solemnemente antes de responder.
"Entiendo, hijo mío. Honraré tus deseos". Compartieron una mirada llena de comprensión antes de que se fuera. Su padre siempre se quejaba de que era un clon de su madre y ambos sabían que era verdad. Se acostó en su cama y miró al techo. ¿Quizás podría escabullirse? Sirius no podía estar tan enojado, ¿verdad? Un búho se abalanzó sobre su habitación y un sobre rojo cayó de sus pies. El aullador se sacudió antes de gritar "¡Mini Malfoy! Supongo que a estas alturas has logrado convencerte de que es seguro para ti venir a olfatear alrededor de mi ahijado. Me gustaría recordarles que me duelo para matar. Ya he estado en prisión y no me importa volver. Si pones un pie en mi propiedad antes de que termine tu destierro de tres días, montaré tu cabeza en la pared". Dio un graznido antes de que la voz de su tío llegara: "No te preocupes, Draco. Solo está bromeando parcialmente. Nos vemos en un par de días". Estalló en llamas y gritó en su almohada. ¡La vida no era justa! Respiró hondo antes de alcanzar un pergamino.
"Hola. Me gustaría agradecer a mis amigos y familiares por venir hoy. Si estás leyendo esto, he muerto por perder mi corazón. Lord Black es el culpable. Él me ha desterrado del lado de mi amada. Sé que mi vicepresidente buscará venganza en mi nombre. Harry, mi amor, te estaré esperando al otro lado. Por favor, mantenme siempre en tu corazón. Eternamente tuyo, Draco". Pensó que era corto y dulce. Dejó la carta en su escritorio antes de recostarse en su cama. Un golpeteo vino de su ventana y abrió las cortinas para encontrar a Harry mirándolo. Abrió la ventana y Harry se cayó, su escoba lo golpeó en el hombro.
"¿Harry?" Jadeó y su querida sacudió la cabeza, su cabello volando por todas partes.
"¡Hola nena!" Él sonrió y Draco lo recogió antes de envolverlo en su manta.
"¿Qué estás haciendo aquí?" Solo la cabeza de Harry se asomó mientras le daba una sonrisa.
"Papá dijo que no podías venir, no dijo nada acerca de que me sacaran de tu casa". Draco extendió la mano hacia adelante y besó su nariz.
"¡Brillante, mi amor!" Mientras lo abrazaba, quemó casualmente su carta. Ya no lo necesitaba ya que su querida estaba de vuelta en sus brazos.

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Neville bostezó mientras se apoyaba contra Herm, tratando de robar algo de su calor corporal. Habían estado sentados en este árbol durante tres horas mientras observaban la casa al otro lado de la calle. Herm estaba convencido de que se estaban acercando a la ubicación de Dumbledore y Neville no tenía nada mejor que hacer. Luna se había ido con su papá esa mañana. Iban a ir a buscar a Bigfoot. Al parecer, la señora Tonks la había convencido de que era real.
"¡Nev, mira!" Herm golpeó su brazo y entrecerró los ojos a través de la oscuridad. ¡Parecía que alguien se estaba colando en la casa! Compartieron una mirada antes de que Herm saliera del árbol, aterrizando con gracia en el suelo. Neville respiró hondo antes de seguirla. Ella lo atrapó y lo dejó con cuidado.
"¡Gracias, Herm!" Él susurró y ella le sonrió, sus ojos brillaban de emoción.
"¡Vamos a patear un trasero!" Se escabulleron lentamente detrás de la casa y Herm envolvió su chaqueta alrededor de su puño antes de golpear a través de la ventana. Metió la mano y la desbloqueó antes de abrirla. Ella tiró su pierna y silenciosamente lo ayudó a pasar. Podían escuchar a alguien en la habitación contigua y ella movió sus manos mientras él la miraba fijamente. Ella puso los ojos en blanco antes de murmurar "¡sigue mi ejemplo!" Sacó el bate de béisbol de su bolso y se puso en posición. El sonido se acercó y ella se balanceó, el murciélago haciendo contacto con algo. Dio un fuerte gemido y ella se balanceó de nuevo. Neville encendió la luz muggle y miraron hacia abajo para encontrar a uno de los gemelos acurrucado en una bola.
"¿Fred?" Herm preguntó en estado de shock y los miró.
"¡Bueno mira aquí! Pensé que era extraño que me sintiera excitado por alguien que me golpeaba la mierda. Resulta que fue porque mi querida niña me estaba golpeando. ¿Quieres darle otra oportunidad?" Preguntó mientras se extendía, con las piernas abiertas de par en par. Neville rápidamente se cubrió los ojos mientras se daba la vuelta.
"¡Fred, levántate! ¿Qué estás haciendo aquí?" Ella preguntó, apoyando el bate en su hombro. Se rió pero se puso de pie.
"George y yo escuchamos que el viejo Bagshot podría estar escondiendo a Dumbledore en su armario de escobas, así que pensamos en echar un vistazo". George entró caminando en la habitación y les sonrió.
"¡Oi! No sabía que nos reuniríamos con Herm aquí". Se inclinó y besó su mejilla. Ella los fulminó con la mirada antes de colocar sus manos sobre sus caderas.
"¡Ambos están arruinando mi operación! Neville, sabes qué hacer". Se congeló cuando ella se volvió para mirarlo, con su queso colgando de su boca.
"¡Neville!" Ella gritó y él pisoteó su pie.
"¡Herm, hemos estado sentados en ese árbol destruido para siempre! Me muero de hambre, déjame comer". Él se quejó y ella se pellizcó la nariz antes de respirar profundamente.
"Tienes razón. Lo siento". Él le entregó un queso en tiras y ella lo desenvolvió y le dio un mordisco.
"No eres tú cuando tienes hambre, Herm". Él dijo y ella se rió.
"Gracias, Nev. ¿Ahora has encontrado algo?" Ella preguntó y ambos sacudieron la cabeza.
"Parece los recortes de periódicos de la horda Bagshot, pero nada demasiado incriminatorio". Ella suspiró y dijo: "Probablemente deberíamos irnos. La reunión de la junta escolar terminará pronto". Se volvieron para irse y todos se detuvieron cuando Dumbledore salió del armario, con su varita en la mano.
"¿Irse tan pronto, niños?"