Fanboy Draco Malfoy Convinces Harry Potter to Marry Him

Capítulo 62: Peleas de bolas de nieve y Yule-Harry es una madre ahora

Fleur se pavoneó por el pasillo, todos los estudiantes se bajaron a un lado. ¡Iban a Harry's para Yule y ella no podía esperar!
"Fleur, ¿crees que Harry estará emocionado de vernos?" Gabrielle preguntó y alimentó a MH con un ratón. Ella había convencido a los otros estudiantes de que era el próximo Señor Oscuro y se dirigieron a ella como tal.
"¡Por supuesto! ¡Ron dijo que Harry se dio flequillo! ¿Te imaginas lo lindo que se ve?" Ella suspiró feliz. Harry era como el hermano pequeño que nunca tuvo.
"¿Oh, sí? ¿Ron te dijo eso?" Se sonrojó ante la mirada que su hermana le dio y le arrojó una almohada a la cara.
"Cállate, Gabrielle". Estaba agradecida de que su hermana aún no hubiera descubierto cómo romper la cerradura de su diario. Nunca la dejaría vivir la Fleur Weasley garabateada en todas las páginas. Ella había decidido que el chico pelirrojo era suyo. Le había llevado algún tiempo acostumbrarse a la idea, pero cuanto más pensaba en ello, más le gustaba. Ron fue divertido y amable. Defendió lo que creía y trató de ayudar a sus amigos. No le dolía que fuera tan alto o que sus pecas le recordaran las constelaciones.
"¡Fleur, tu pater está aquí!" Uno de sus secuaces gritó y se estremeció cuando vieron a Gabrielle en la habitación. El cuerpo estudiantil le había dado una calurosa bienvenida después de la última vez que dejó a Gabrielle a cargo. Era obvio que el hermano mayor de Delacour era el más estable.
"¡Vamos! ¡Vamos, Gabi!" Ella saltó hacia su pater y lo abrazó con fuerza. Los otros estudiantes gritaron adiós y ella los saludó con la mano.
"Vamos chicas, tus padres están esperando". Se presentaron en Delacour Villa y ella abrazó a su mamá. Papá ya había enviado sus regalos con anticipación para que no tuvieran que hacer varios viajes.
"¡Ahora chicas, deben tener su mejor comportamiento! Prométeme". Se lo prometieron y pronto estaban en camino.

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Lucius se derrumbó dramáticamente en el sofá de Sirius y suspiró.
"Lucius, ¿qué estás haciendo aquí?" Severus preguntó mientras marcaba ensayos, su tinta roja cortando las respuestas incorrectas.
"Cissy me echó por el día. Ella dijo que yo estaba "interponiéndome en el camino". Él hizo un puchero y Severo lo ignoró.
"Es extraño, ¿no?" Severus ladeó la cabeza hacia un lado.
"¿Hm?" Se quitó las botas antes de continuar.
"¿Te imaginas nuestras vidas así hace diez años?" Hace diez años había estado hasta las rodillas en cadáveres y magia oscura, rezando para que el Señor Oscuro no lo matara. Había sido un desastre nervioso, su cabello había comenzado a caerse en mechones. Había estado convencido de que el Señor Oscuro lo había maldecido porque estaba celoso de sus hermosos mechones. Nunca lo diría en voz alta, apenas se había atrevido a pensarlo. Había sido un momento horrible en su vida y nunca había estado más agradecido de que Harry hubiera destruido al hombre enloquecido esa noche hace tanto tiempo.
"¿Te imaginas decirle al joven Severus que estaría encadenado con Black? Te habría crucificado". Compartieron una risa.
"No puedo creer que se me permita ser tan feliz en mi vida". Lucius estuvo de acuerdo con el hombre adusto. La mayoría de la gente no podía entender por qué él y Severo eran tan cercanos, pero la verdadera razón era porque eran tan parecidos. Se preocupaban tan profundamente, que era una debilidad que tenían que hacer cualquier cosa para proteger. Lucius había matado a otros magos para proteger a su familia y no se arrepintió. Algunos lo llamarían malvado, pero no le importaba. Haría cualquier cosa para proteger a su familia y Severus era de la misma manera.
"¡Todavía no puedo creer que te hayas tirado por la ventana en el baile! ¡Podrías haberte roto el cuello!" Discutían de un lado a otro, disfrutando del fuego crepitante.
Tal vez merecían ser felices.

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Tonks se rió mientras Cedric luchaba por envolver sus regalos. El niño no pudo envolver nada para salvar su vida. ¡Había usado un rollo entero de cinta adhesiva en un regalo!
"¿Estás seguro de que no quieres ayuda?" Él la fulminó con la mirada antes de bajar los hombros.
"¡Por favor, ayúdame, oh grandes y poderosos Tonks!" Ella resopló ante su drama antes de terminar rápidamente los otros regalos. Un estallido los hizo mirar a ambos hacia arriba. Dobby llevaba calcetines navideños que no coincidían y una corona en la cabeza.
"¡Hola! ¡El Maestro Draco está teniendo una pelea de bolas de nieve e invitó a sus amigos! El señor Diggory será eliminado si intenta algún negocio divertido". La voz aguda de Dobby resonó en la habitación.
"¿Una pelea de bolas de nieve? ¡Inscríbeme!" Tonks corrió por la habitación, poniéndose las capas y apretándose las botas. Siendo hija única, nunca tuvo hermanos que jugaran con ella en la nieve. ¡El invierno pasado había sido muy divertido con sus primos!
"¡Cedric, vámonos!" Dobby tomó sus manos y aparecieron en los terrenos de Malfoy Manor.
"¡Viniste!" Harry corrió y los abrazó con fuerza, su bufanda de Slytherin sobresaliendo contra la nieve blanca. Todo el HFC estaba allí, incluidas las chicas francesas, Luna, Percy y su novio pegajoso.
"¡Muy bien, nos dividiremos en equipos y los últimos en pie ganarán!" Ella dio un grito cuando se unió al equipo de Herm. La chica era un monstruo cuando se trataba de ganar. Tonks la había visto quedarse sin tinta durante un examen y usar su propia sangre para terminar. Ella era hardcore. Por supuesto, había sido detenida por "interrumpir la clase de otra persona. Usted es un cuarto año, señorita Tonks. Actúa como tal". McGonagall era un palo en el barro. Tal vez podría convencer a Cedric de que deberían mover todos los muebles de su oficina dos pulgadas a la derecha. Estaba segura de que volvería loco al estricto profesor. Percy rápidamente hizo una pared de nieve gigante frente a ellos y comenzaron a elaborar estrategias. Media hora después, ella era de alguna manera la última en pie. Habían perdido a Percy ante el enemigo y Fleur se había tropezado viendo a Ron inclinarse causando que la chica generalmente elegante fuera golpeada por los gemelos. Ron había sacado a los gemelos después de eso, a pesar de que estaban en su equipo.
"¡Eso es por golpear a alguien cuando está abajo!" Él había gritado y ella juró que la chica francesa se había desmayado. Nevile había sido quien atrapó a Herm. En su defensa, tampoco sabían cómo el tímido niño se había quedado atascado en el árbol. Se había caído de la rama tratando de bajar y había sorprendido a Herm lo suficiente como para que sus bolas de nieve explotaran sobre ellas. Caminó lentamente y se congeló cuando su pie pisó algo swishy. Cedric estalló debajo de la nieve y la agarró. Ella dio un grito y le dio un puñetazo en la nariz. Cayeron al suelo y ella se llevó la mano al corazón.
"¡Cedric! ¡Pensé que eras un monstruo de nieve!" Él le dio una sonrisa descarada y un guiño.
"¡Seré lo que quieras que sea!"

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Harry enderezó sus astas de ciervo y se coló en la habitación de sus padres. Draco le dijo que despertaría a sus padres y que podrían reunirse en la sala de estar. Encontró a Papa Sirius acurrucado en una bola en el borde de la cama y al Padre Severus estaba tendido. Harry respiró hondo y se lanzó sobre la cama. Dudley solía hacer esto y su tía le sonreía tan brillantemente. Harry tenía curiosidad por saber cómo reaccionarían sus padres. El padre Severo se sentó y lo atrapó, sus ojos lo miraban fijamente. Papa Sirius se disparó y gritó "Soy alérgico a los mariscos" antes de caerse de la cama. Harry metió la mano en su bolsillo y arrojó el confeti que había escondido.
"¡Feliz Yule!" Después de los abrazos de sus dos padres, finalmente llegó el momento de abrir los regalos.
"Esto es para ti, padre". Lo observó como un halcón mientras abría su regalo para revelar cinco frascos de vidrio.
"Es veneno de basilisco. Las burbujas me permiten ordeñarlo". El padre Severo lo vitoreó y lo hizo girar.
"Esto no tiene precio, mi querido niño. Muchas gracias." Le había dado a mamá Malfoy una espada hecha por enanos y papá Malfoy recibió una impresionante pinza para el cabello en forma de serpiente alada.
"Esto es para ti, papá". Era un libro titulado "¡Cómo convencer a tu pareja de que se case contigo!"
"¡Oh, wow, muchas gracias cachorro!" Se rió y dijo "¡ábrelo!" Dentro había dos entradas para un concierto de rock del que Sirius siempre hablaba. Fue abrazado por su padrino emocionado y tuvo que arreglar su diadema.
"Aquí tienes, Draco. Espero que te gusten". Vio a Draco abrir su primer regalo. Se puso el chaleco de basilisco y dio un giro.
"¡Soy invencible!" Gritó y todos se rieron mientras se dejaba caer. Harry lo vio abrir su segundo regalo nerviosamente. Esperaba que le gustara.
Draco lo sostuvo con fuerza contra su pecho y le dirigió una mirada de adoración.
"¿Qué es, cachorro?"
"Le compré a Draco una estrella y le puse su nombre. Ahora, cada vez que mire al cielo, pensará en mí". Papá Malfoy se rió a carcajadas mientras papá Sirius suspiraba.
"Está bien cachorro, ¡es tu turno!" Su padrino y padre Severus le habían conseguido un kit para hacer pociones. Le prometió 101 combinaciones de pociones diferentes. ¡Los Malfoy le habían conseguido un nuevo vestuario y un boleto para la reserva de dragones nuevamente!
"Aquí tienes, mi amor. Espero que te guste". Abrió su regalo para encontrar un reptil bebé.
"¡Es un cocodrilo! Al parecer, uno de los cocodrilos de Neville que viven en su foso es un niño y me dejaron tener uno de los huevos". El cocodrilo bebé gruñó "mamá" y se acurrucó en su regazo. Harry besó la parte superior de su cabeza y sonrió a su amada.
"¡Su nombre es Snappy!"