Fanboy Draco Malfoy Convinces Harry Potter to Marry Him

Capítulo 84: Buitres y caramelos: Harry ya está amenazando a la gente

Draco esquivó a un lado mientras Sirius le lanzaba una maldición aplastante.
"¡Oi! Eso casi me golpea la pierna". El hombre mayor se rió y dijo: "¡Qué bueno que tienes otro!" Draco se concentró en el duelo para dejar de pensar en Harry. Su querido novio había pasado el verano en Francia con los Delacour. Sus dos familias solo se habían acercado a lo largo de los años. Fleur tenía una pasantía con los goblins para poder ver a Ron los fines de semana. La última carta de Harry había hablado sobre los dragones que los goblins mantenían bajo tierra. Una venda de pierna lo golpeó directamente en el pecho y se desplomó en el suelo.
"Concéntrate, Draco". Sirius dijo firmemente antes de soltar el hechizo. Daco se quedó donde estaba mientras miraba al techo.
"Ugh, extraño a Harry". Se quejó y Sirius cayó a su lado.
"Yo también lo extraño, chico. Al menos estará en casa pronto". Comenzarían su séptimo año en una semana y Draco no podía creer lo rápido que habían pasado sus años escolares. Tonks y Diggory se habían mudado juntos tan pronto como se graduaron de Hogwarts. Tonks estaba trabajando para convertirse en un Auror mientras Diggory era dueño de la tienda de bromas con los gemelos. Habían comenzado a vender suministros de broma debajo de la mesa en su sexto año, para gran frustración de Herm. Diggory había ayudado a financiar sus experimentos y el resto era historia. Draco todavía pensaba que el chico bonito Diggory tenía algo por Harry, pero generalmente dejaba solo al chico Hufflepuff. Lo más sorprendente fue Marcy. Percy Weasley se casó con Marcus Flint durante su ceremonia de graduación. La directora McGonagall tuvo que detener su discurso porque todos habían estado muy concentrados en sus votos. Molly Weasley se había desmayado cuando su hijo deslizó un anillo en el dedo de Flint. Ha sido divertidísimo. Stomping llamó su atención mientras Snappy entraba en la cámara de duelo. Su hijo ahora medía veinte pies de largo. Harry había quedado devastado cuando ya no podía cargarlo. Snappy le siseó antes de acurrucarse a su lado.
"Mamá volverá pronto". Lo tranquilizó antes de suspirar. No podía recordar la última vez que habían estado separados durante tanto tiempo. La puerta se abrió de golpe y su padre entró corriendo.
"¿Qué estás haciendo? ¡Levántate! ¡Harry llega temprano a casa!" Gritó antes de irse. Podían oírlo gritarle por el pasillo a Severo. El corazón de Draco se aceleraba cuando saltó.
"¡No dijo nada en su última carta!" Rápidamente se duchó antes de correr por las escaleras para unirse a todos frente al floo.
"¡Oh, no puedo esperar a tener a Harry en casa! ¡Se jactaba de un crecimiento acelerado, así que tendremos que ir de compras!" Su madre chilló mientras se alisaba el cabello antes de gritar "¡Ministerio de Magia!" Empujó a su Padre fuera del camino antes de seguirla. Salió del suelo y se dirigió directamente a los ascensores. De repente fue arrojado de sus pies cuando Sirius pasó corriendo en su forma de perro con su Padre agarrándose fuertemente a su pelaje. Draco se apresuró a perseguirlos. Convirtió el suelo en hielo y les dio una sonrisa engreída mientras volaban hacia la fuente. De repente estaba colgando boca abajo por el tobillo. Su padre estaba empapado mientras se
deslizaba con Sirius justo detrás de él. Draco entrecerró los ojos. ¡Tenía que ser el primero en saludar a Harry!
"¿Ahora a alguien le gustaría explicar qué está pasando en nombre de Merlín?" El ojo mágico de Alastor Moody estaba girando en su cuenca y Draco no podía dejar de mirarlo. Tonks les sonreía desde su lado.
»¡Sirio y mi padre lo comenzaron! Mi prometido viene a casa de Francia hoy y vine a saludarlo, ¡pero comenzaron a lanzarme hechizos!" Declaró y Sirius extendió la mano para torcer su oreja.
"¡Cállate, mocoso! Tú eres quien lo comenzó". Cuando estallaron en una discusión, vio a su padre tratar de alejarse lentamente.
"Siéntate, Lord Malfoy". Moody estalló y su padre se dejó caer en su asiento con un rasguño.
"¡Moody, mi dulce hijo viene a casa! ¡Tengo que ir a saludarlo! No puedo imaginar lo desconsolado que estará si no estamos allí para recogerlo". Draco le dio a Tonks una mirada suplicante.
"¡Bueno, tal vez deberías haber pensado en eso antes de comenzar a lanzar hechizos en el Ministerio! Derribaste la estatua en la fuente-" "Pensé que era una mejora", murmuró Sirius en voz baja. "-hirió a quince personas y deletreó el pelo de la cabeza del Ministro!" Miraron a Moody antes de que Draco preguntara: "Entonces, ¿podemos pagar la multa e irnos? ¡Harry va a estar aquí en cualquier momento!" Sirius ya tenía su chequera. Draco asintió con la cabeza con aprobación mientras le entregaba a Moody un cheque en blanco.
"¡Eso debería cubrir el daño!" Esperaron a que Moody los liberara.
"Oh, por el bien de Merlín, sal de aquí. Tonks, por favor acompaña a estos idiotas al departamento de transporte". Draco saltó rápidamente y siguió a su primo fuera de la celda de detención. Tan pronto como estuvieron fuera del alcance de la oreja, ella aulló de risa.
"¡Cedric no creerá esto! Cuando vi la cabeza calva del ministro, pensé que me iba a orinar en los pantalones". Ella cacareó en voz alta. Draco la empujó y finalmente estaban en el área de recogida. Vio a su madre y a su tío esperando pacientemente y se unió a ellos.
"¡Mira quién es, Severus! Nuestros criminales finalmente se unieron a nosotros". Ella bromeó y él les dirigió una mirada desagradable.
"Ustedes tres estarán limpiando calderos cuando lleguemos a casa. No puedo creer la escena que causaste". Él les siseó y Draco vio a Sirius darle una mirada devastada.
"¡Bebé! ¡Odio limpiar calderos!" Gritó y Severo lo fulminó con la mirada.
"¡Las acciones tienen consecuencias!" Vislumbró el cabello negro y agarró a su padre cuando Harry apareció a la vista. Su dulce esposo tuvo un crecimiento acelerado. Su cabello estaba en dos bollos en la parte superior de su cabeza y llevaba una de las camisas viejas de Draco. Su rostro era todo ángulos y sus ojos se destacaban como dos joyas brillantes. Draco estaba acostumbrado a sus hemorragias nasales, por lo que las ignoró mientras veía que los ojos de Harry se iluminaban una vez que los veía.
"¡Draco!" Gritó y ambos se echaron a correr al mismo tiempo. Mientras abrazaba a Harry con fuerza, susurró "bienvenido a casa, mi corazón".