18:35
Me encontraba en mi habitación, tumbada boca arriba y con Michelle en la llamada de fondo. Hablábamos de cosas banales y también de lo que podría pasar en las próximas dos semanas, era cierto que la situación era un tanto caótica.
—No te pongas nerviosa. Tu trata de evitarlo si crees que no puedes aguantar con ese bellezón.
—No es eso. Es que me va a estar ordenando cosas todo el día. No soy cenicienta. —Suspiré.
—Mmmh entiendo. Bueno puedes excusarte de que tienes muchos trabajos, al fin y al cabo es verdad.
Hice una mueca dándole la razón, podría ser una buena idea.
—Solo es salir y encontrártelo para comer. Si además tienes baño en tu habitación.
Michelle encendió un cigarro y vi el humo salir de su boca. Al igual que ella yo también fumaba, pero lo dejé cuando a mi tío le diagnosticaron cáncer de pulmón al ser fumador compulsivo. Desde entonces busco relajarme de otras maneras, entre ellas con alcohol de vez en cuando.
—¿A dónde vas?
Michelle me preguntó. Me levanté para buscar entre las botellas de alcohol que había en uno de los armarios de casa y volví con una de vodka bebiendo a palo seco, necesitaba desahogar toda la presión.
—Bueno, bueno, ¿hay fiesta y no me he enterado?
Hice una mueca frente al amargo sabor de la bebida y la mezclé con algo de fanta que pillé en la cocina al bajar.
—Tú a tu manera y yo a la mía.
—Sería gracioso que te emborrachases y luego te pillase tu niñero. —Rio.
—Calma, solo es un vaso.
[...]
—Yo opino que te va a matar.
Había pasado algo más de una hora y perdí la cuenta de cuántos vasos llevaba. Michelle no paraba de reírse cuando trataba de hacer algo tan simple como ponerme de pie y no podía. Sin embargo, no me frustraba, al contrario, me reía junto a ella.
—Voy a morir Michelle, recuerda que te quiero. —Hice un intento de corazón coreano muy mal hecho.
—Te va a matar a orgasmos. Has dado un glow up impresionante en estos últimos días va no me jodas, estás buenísima a ojos de cualquiera.
—Lo sé, en verdad me encanta mi estilo ahora. —Dije con una mala pronunciación en mi estado sonriendo.
—Oye, aprovecha la situación y tíratelo, al igual como estás borracha y no sabes lo que haces te sigue.
—Pf, a ver eso estaría un poco feo por su parte. Y que conste que voy bien.
—Ya me has entendido, cuando te baje y habléis me refiero.
Respiré hondo, las cosas en ese momento las veía de otra forma. Su mirada lasciva volvió a mi mente acompañada de aquella sonrisa que se podía describir como perversa en muchas situaciones. No lo pensé más, no creía aguantarlo durante tantos días encerrada con él.
—¡Cuando entre por esa puerta me lanzo!
—¡Dios sí!
Vi a Michelle muy entusiasmada. Su plan me había convencido, mejor ebria que sobria para ello.
Me reía por lo bajo al ver a mi amiga tan loca, parecía incluso que lo gritaría por la ventana, pero todo se paró cuando escuché a lo lejos una puerta cerrarse.
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Con mi niñero en cuarentena [Quackity y tú]
Fanfiction¿Qué hubiese pasado si hubieses estado con tu niñero en casa sin poder salir por tanto tiempo? El niñero con el que te dejan a cargo es tan atractivo como intimidante. Tú sólo quieres recuperar esa libertad que no tienes por culpa de tus estrictos p...