Fengqing. Modern AU. Enemies to Lovers. Mafia AU. Empresarios AU.
¿Era posible odiar al contrario más de lo que ya lo hacía?
La pistola en la mandíbula de ambos hablaba de la situación, si los dos eran honestos, no sabían bien como habían terminado...
¿Alguien dudaba cómo es que, tanto Feng Xin, como Mu Qing se habían roto la ceja?
Nadie. Sus conocidos sabían que había sido mutuo el golpe.
Ambos llegaron juntos a la fiesta de cumpleaños de Xie Lian, literalmente, caminando lado a lado, pero sin siquiera darse una mirada de reojo, con su respectivo regalo de cumpleaños entre sus manos que se habían ayudado mutuamente a escoger, pero, con la cara algo hinchada de algunos lados, por los golpes que se habían regalado entre ellos.
Mu Qing pasó primero, ignorando completamente a todos los presentes que se dedicaron a mirarle, e inconscientemente o no, Feng Xin derrepente, miró mal a las curiosas miradas sobre el platinado.
Xie Lian solo sonrió al verles, recibiendo su regalo, y ahorrándose la curiosidad por preguntar que les había ocurrido.
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La fiesta de cumpleaños de Xie Lian había sido cinco meses atrás, cuatro meses después de su cumpleaños en realidad, él la había pospuesto para que Hua Cheng estuviera presente.
Había pasado casi medio año desde aquello, medio año donde su relación no cambió, incluso los golpes se habían vuelto más continuos, pero, ellos mismos se habían acostumbrado más al contrario, lo conocían casi, como la palma de su mano. Y, aunque los dos viajaban seguido por sus trabajos, por alguna u otra razón, los dos terminaban juntos, ya fuera en una reunión o por Xie Lian, qué estaba a tres meses de casarse.
En esta ocasión, sus mejores amigos se encontraban comprando regalos de nuevo, solo que esta vez para el tío y el padre del platinado.
Feng Xin le había llamado esa mañana, preguntándole si estaba ocupado, y a decir verdad, Mu Qing lo estaba, pero no veía al castaño mucho desde la semana anterior, los dos habían estado ocupados, el platinado aceptó, las fiestas de navidad y fin de año estaban próximas, así que era época de comprar regalos.
Aunque, había una interrogante qué les molestaba con cada paso que daban, ¿Tendrían que comprarle regalo a su acompañante/enemigo?
Por su puesto que no querían, la idea era desagradable, o los nervios en sí, ¿Qué demonios podrían regalarle al otro? Tal ves conocían sus gustos, pero no había nada que el otro necesitara. Aunque, tampoco llegarían con las manos vacías, al final, sería irrespetuoso por la cercanía hacia Xie Lian, y, por que al final, hacia negocios juntos, así ninguno de los dos quisiera.
Pese a eso, los dos tuvieron la misma idea, comprar un regalo horrible, y después darle uno decente que solo fuera por cortesía, después de esa semana, llamarían a Xie Lian para preguntar que seria apropiado de regalo.
Las fechas siempre eran animadas, los Mu solían hacer un baile de invierno, una semana previa a navidad, y este año era el primer año que Feng Xin era invitado, el castaño no negaría que estaba algo nervioso, por lo que Xie Lian le había explicado, era el baile más importante en su círculo social al parecer, los Mu eran más refinados que la mayoría.
