13 de Febrero 2021
Durante la semana mientras yo trabajaba Gerry hacía lo mismo, en mis horarios de comida me platicó que estaba en espera de recibir su licencia de conducir que había tramitado por requerimiento de su nuevo trabajo el cual parecía gustarle mucho.
Llegó el fin de semana días en que nos veíamos, salí de trabajar, él ya me esperaba frente a mi trabajo, corrí a sus brazos y caminamos hacia mi casa, en el camino pasamos a una nevería por un rico helado mientras conversábamos acerca de nuestra semana, también me mostró con mucha emoción su licencia de conducir que recién le habían entregado.
Al llegar a mi casa me di un baño exprés mientras él me ayudaba a planchar la ropa que me pondría, salimos de casa hacia el lugar en donde mis tíos viven, al llegar se sirvió la comida pero antes de comer fuimos a la tienda por el refresco como lo hacíamos cada semana, el pequeño Raul nos acompañó a la tienda, entre nuestra distracción de comprar el refresco y algo de botana para compartir no notamos lo que el menor que nos acompañaba hacía, cuando lo miramos la vergüenza nos comía pues había mordido alguna de la fruta que estaba en venta así que no nos quedó otra opción que comprar los frutos que ya habían pasado por la boca del niño, pagamos y salimos avergonzados de la tienda, regresamos a casa a comer, al finalizar la comida como cada semana se colocó sobre la mesa el tablero de canicas y las apuestas comenzaron, como es de esperarse no ganamos pero que divertido es compartir dicho juego, regularmente Gerry y yo tenemos muchos debates al jugar pues yo siempre intento ganar mientras que él hace todo lo contrario no le importa ganar y solo busca eliminar y molestar a sus oponentes sin importarle poner en riesgo su juego
— Gerry no puedes mover esa canica ¡Perderás si lo haces! — Mencione en todo mandón
— Aquí no hay miedo — Respondió ignorando mi comentario.
En uno de nuestros debates nuestras canicas color blanca cayeron al suelo, ambos intentamos levantarlas al mismo tiempo y chocamos nuestras cabezas lo cual llenó de risas a todos
— Son tal para cual — Bromeó Aarón
— Porque crees que están juntos — Añadió otro integrante riendo.
— Imagínate conocer a alguien igual de torpe que uno, una meta desbloqueada— Mencione riendo
Continuamos jugando y como era de esperarse no ganamos ni un solo peso, esta ocasión solo jugamos un par de veces pues teníamos una salida pendiente así que el juego se guardó y cada integrante se alistó para salir en dirección a una fiesta en casa de Emily.
Antes de salir don Lucio quito la música que sonaba de un foco que iluminaba la casa de diferentes colores con el cual yo quedé impresionada.
— Woow yo quiero un foco así, el mío solo enciende en blanco y no tiene música — Agregué emocionada
— En tu cumpleaños señorita ahora vámonos — Respondió Gerry
— ¡Grosero! — Hice un puchero — mi cumpleaños fue hace un mes
— Bueno solo faltan 11 meses para que llegue tu foco — Respondió burlón obteniendo una mirada de odio de mi parte.
Llegamos a casa de Emily, ya comenzaba a anochecer pero se nos habían pasado rápido las horas jugando, lo primero que ocurrió al llegar fue que nos invitaron a pasar a comer, realmente no teníamos mucha hambre pues hace pocas horas habíamos comido, pero quienes somos nosotros para decirle que no a un segundo plato de comida.
Después de la comida como en toda fiesta comenzaron a ofrecer cerveza y de todo tipo de bebidas alcohólicas a lo cual yo solo acepte agua de jamaica pero todos los demás con cerveza en mano.
Cerca de la media noche mis tíos me dijeron que tenían una buena noticia por compartir conmigo, no sabía de que trataba así que insistí para que le dijeran.
— ¡Ya tengo trabajo! — Agregó mi tía feliz
Me alegro bastante esa noticia pues sabía que ella amaba lo que hacía y tener trabajo era una buena noticia
— Eso significa que nuevamente te ayudaremos con tus colegiaturas — Mencionó mi tío
En ese momento ya no me sentí tan feliz pues debido a mi trabajo durante casi todo el día había descuidado algunas asistencias de clase y ello me llevó a bajar un poco mis calificaciones así que les tuve que confesar aquello a mis tíos, esperaba un regalo de su parte por lo estrictos que son pero no fue así, al contrario recibí palabras de motivación.
— Prefiero que continuemos así, Gerry y yo nos hemos apoyado ambos para pagar nuestra escuela y aún así ahorrar un poco para comprarnos un auto, no es que no quiera su apoyo per por ahora que estamos trabajando hemos aprendido a administrarnos.
— ¿Estás segura? — Preguntaron mis tíos
— Si, ustedes no se preocupen, cuando necesite ayuda yo sé los dire, por ahora los dos hemos podido solventar nuestros gastos.
Gerry se unió a nuestra plática después de haber chocado su bebida alcohólica con la de mi tío y ambos darle un gran sorbo
— También tu amigo si algún día necesitas apoyo sabes que puedes contar con nosotros — Mencionó mi tío dirigiéndose a Gerry
— Muchas gracias, yo lo sé y significa mucho para mi.
— ¿Te podemos dar un mal consejo? — Dijo mi tía
— Si...
— Piensa en ti, aveces es bueno ser un poco egoísta y pensar en uno mismo, claro no siempre pero tú eres muy noble y aveces necesitas pensar en ti y en tus necesidades antes que en las de otros, trabaja duro por ti y para ti porque solo tú sabes lo que te está costando, ambos están trabajando para mantener su escuela y eso es de admirarse, también tienes que tener cuidado y aprender a que no todos piensan como tú, hemos notado que eres muy inocente en varios aspectos y debes tener cuidado con ello porque ahora que estás en él área laboral te puedes encontrar con todo tipo de personas y debes ser cuidadoso en ello.
— Gracias por todo, la verdad siempre les voy a agradecer sus consejos y que así como han estado para Gema que es su sobrina también lo han estado para mi, yo aquí con ustedes me siento como en familia, no soy bueno con las palabras pero gracias de verdad. El festejo continuó con cerveza, comida y música, al llegar la madrugada pude notar que Gerry ya no se encontraba en sus cinco sentidos pues comenzaba a caminar y a hablar extraño, no era común verlo así pues a pesar de que en todas las fiestas con mi familia bebía un para de cervezas siempre sabía en que momento dejar de hacerlo y continuaba normal esta ocasión se le podía ver alcoholizado cantando con mucha emoción canciones de todo tipo de género
— Déjalo, está feliz y está con nosotros, no pasa nada — Mencionó mi tío
— Si, su estado de ánimo desde que se salió de con su mamá no ha sido el mejor y eso también tiene que ver que esta ocasión el alcohol si le hizo efecto — Respondí y me levante de mi asiento pues mucha agua de jamaica había hecho efecto y necesitaba con urgencia ir al baño
— Yo también necesito ir — Respondió mi tía y ambas nos dirigimos al sanitario en donde hacía una larga fila en la cual se encontraba Sara una de las hermanas de Emily
— Así que él es tu novio Gema... — Mencionó Sara mientras esperábamos en la fila
Le respondí con un seco "Si"
— ¿Y para cuando los hijos? — Pregunto de manera imprudente lo cual me incomodó demasiado
— Aún no, apenas tengo 20 años y no deseo hijos por el momento — Me límite a responder pues no es algo que se debe preguntar la primera vez que conoces a la pareja de alguien
— Bueno, es solo una pregunta, digo... quizá sería guapo un hijo de ustedes
— Ellos que estudien primero — Intervino mi tía y enseguida la fila avanzó lo cual me salvó de más preguntas incómodas.
Al volver del sanitario note que Gerry verdaderamente ya no se encontraba tan consciente así que mi tío le pregunto si quería que ya nos fuéramos y el solo respondió que esperaría hasta que todos decidieran irse
— Creo que deberías ir a la camioneta, podrías recostarte un rato antes de irnos — Mencionó mi tía
Ambos nos fuimos a la camioneta, él para recostarse un rato y yo para cerciorarme que todo estuviera en orden, me senté en el asiento de atrás y él se recostó sobre mis piernas, creo que por algunos minutos se quedó dormido hasta que inevitablemente su estómago quizo vaciar todo su contenido y salió corriendo de la camioneta
— ¿Estás bien? — Pregunte un metro detrás de él
— Si preciosa, ya sabes, solo cosas de borrachos pero estoy bien.
Volvió a subir a la camioneta y nuevamente durmió recargado en mis piernas, pasaron pocos minutos cuando a lo lejos y entré el frió de la madrugada vi volver a mis tíos, ellos subieron a la camioneta hasta llegar a casa, cada quien durmió en su respectivo lugar. A la mañana siguiente mientras dormía plácidamente comencé a sentir frío de pronto así que no me quedo otra opción más que abrir los ojos, frente a mí se encontraba Gerry que había jalado cada una de las peludas y calientes cobijas
— Ya despierte señorita, vamos a desayunar — Dijo sonriente.
— ¿Que haces aquí? — Pregunté apenada
— Ya fuimos a comprar para preparar el desayuno, ya barrí el patio y la señorita sigue dormida, me mandaron a despertarte.
— ¿Que tal la resaca? — Pregunté
— ¿Que? ¿De que hablas? Yo estoy fresco como una lechuga — Mencionó riendo
— Ajaaaa pero anoche...
— Me confunde señorita, ahora levántate que el desayuno está en la mesa
Coloque las cobijas sobre mi cara y di un grito —¡No me quiero levantaaaar!
Gerry quito cada una de las cobijas y no tuve otra alternativa más que levantarme de la cama, ambos nos dirigimos al comedor a desayunar.
Más tarde llegó la hora de la comida y después de ello el Yam esperado juego de canicas, por primera vez estuvimos a punto de ganar pero como siempre mi compañero de juego se preocupó más en atacar a los oponentes que en resguardar su juego así que perdimos
— ¿Alguien quiere botana? — Pregunto Gerry a lo que todos respondimos que si
— Vamos Gema, vallamos a comparar algo para disfrutar de estos juegos
Salimos de casa y fuimos a una dulcería, llegamos y elegimos un par de enormes bolsas de chicharrones, Gerry saco un billete de su cartera y lo entrego a la señorita, ella saco algo de monedas de cambio y las entrego
— Te regaló un dulce — Añadió la chica de la dulcería y entregó un dulce a Gerry
Salimos de la dulcería y mis comentarios burlones no pudieron esperar
— Uhhh le gustaste a la muchacha — Dije burlonamente
— Solo me regaló un dulce, eso no significa nada.
— Claro que significa algo, significa que tendremos dulces gratis si tú vienes por ellos — Dije seguido de una risa — Yo vi como te miraba con ojos de amor, ni siquiera le importo mi presencia — Continué jugando
— Debió pensar que eras mi hermana menor — Agregó con risas — Que bueno que no eres celosa Gema.
— No tendría porque ponerme celosa
— Yo si me hubiera puesto celoso si algún hombre te regalara algo frente a mi, obvio no te reclamaría no haría nada porque tú no tienes la culpa pero si sentiría celos dentro de mi, no comprendo porque nunca sientes celos de nada...
— No lo se, simplemente no los siento, sé que no harías nada para faltarme al respeto así que simplemente no siento nada.
— Ay eso me gusta de ti, la verdad si fueras una persona tóxica ya te hubiera terminado, eres súper comprensiva — Comentó en tono serio.
— Obvio soy la mejor novia del mundo — Dije enarcando una ceja
— Jaja nada modesta la señorita...
Llegamos a casa y por supuesto platicamos la historia de los dulces y todos concordamos que Gerry sería el encargado de obtener dulces gratis, bromeamos un poco con ello y continuamos con los juegos.
Cuando llegó la noche cada quien debía volver a casa así que subimos al auto para salir
— Chicos ¿Y si vamos por un postre? Hace mucho que no vamos a los postres — Propuso Gerry
A mis tíos y a mi nos pareció una excelente propuesta y desviamos nuestro camino hacia los postres que antes de la contingencia sanitaria asistíamos con frecuencia, como casi siempre mi tía y yo elegimos unos plátanos fritos, mi tío unas papas y Gerry un chicharrón preparado, todos nuestros alimentos los compartimos entre los cuatro mientras conversábamos, tocamos el tema del auto que estábamos por comprar pues hacíamos investigado en la agencia donde mis tíos habían comprado su camioneta y ahí encontramos algunos autos más económicos.
— Me da gusto que hayas cambiado de opinión respecto a una moto y elegiste mejor un auto — Agregó mi tía
— Solo hay un problema, en la compra de un auto de ese lugar necesito un comprobante de ingresos y me pide ganar cierta cantidad para comprar y en este trabajo no la gano ¿Podría sacarlo a su nombre?
— Claro, sabes que en lo que te podamos ayudar, puedes sacarlo a mi nombre sin problema — Respondió mi tío.
— Si y cómo está a tu nombre cuando lo termine de pagar se lo quitamos Jajaja — Dijo mi tía como broma y todos reímos.
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1460 días junto a él
RomanceDía 1: Adiós chico del poema, un placer imaginar mil escenarios maravillosos a tu lado. Día 1460: Adiós chico del poema, un placer vivir mil escenarios maravillosos a tu lado... Un libro que no surgió de mi imaginación, surgió de mis recuerdos. Pa...