Cumpleaños (Día 588)

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2 de Abril 2020

El siguiente fin de semana al llegar el viernes tío Miguel me envío un mensaje invitándome a ir a su casa desde ese día ya que no me encontraba asistiendo a clases así que preparé una mochila llena de ropa y cosas necesarias para pasar el fin de semana en casa de mis tíos a quienes estaba a punto de pedirles un favor ya que sé el cumpleaños de Gerry se encontraba a menos de una semana de llegar y sabía que era una fecha que no lo emocionaba pues lo llenaba de nostalgia ya que sus mejores cumpleaños los pasó en su amado pueblo con su familia adoptiva aún así quería hacer mi mejor intento y organizar una pequeña pero significativa celebración en casa de mis tíos.
Salí de casa con la mochila llena como si me dirigía era a un campamento y tomé el transporte público hasta que después de veinte minutos llegue a mi destino, saludé a todos los integrantes de la familia y tía Lupe me invitó a subir mis cosas en la segunda planta específicamente en la habitación de Anita que es en donde dormía cuando me quedaba con ellos, así lo hice y a los pocos minutos regrese a donde se encontraban todos y me acerqué a tía Lupe para platicarle acerca de mis planes para el cumpleaños de Gerry, ella acepto sin ningún problema ya que para estas alturas consideraban a Gerry como parte de la familia e incluso era muy querido.
Le resumí a mi tía un poco de la historia del porque a Gerry no le gustaban sus cumpleaños y le expliqué que por ello yo quería hacer que este año la pasara diferente y estuviera en el lugar en donde es feliz y ella colaboró con ideas acerca de que preparar de comida para ese día e incluso me platico una pequeña historia acerca de tío Miguel
— Cuando Miguel y yo comenzamos a ser novios hace algunos años a él tampoco le gustaba su cumpleaños, casi por motivos similares que a Gerry pero con él pasó del tiempo comencé a celebrar sus cumpleaños aquí en casa de mis papás y a medida de qué pasó el tiempo comenzó a gustarle y emocionarle cada fiesta que se le organiza, por ello es que entiendo la intención que tienes con él y te apoyo completamente e incluso sé que mis papás también.
Me sentí feliz ante dichas palabras
— Su cumpleaños es en jueves y es complicado que sea ese día ya que todos trabajamos y el día sábado tu tía nos invito a él cúmplelos doble de su hijo Ramiro quien cumple un día antes que Gerry y de su esposo Richard que cumple un día después así que podemos festejarlo el domingo que se aproxima ¿Te parece?
— Me parece un excelente día el domingo y también me parece curioso que los tres cumplen en días consecutivos es decir mi primo Ramiro el día 1, Gerry el 2 y el señor Richard el día 3.
— Ya se, es mucha casualidad pero nuestros planes ya han quedado hechos.
Al día siguiente por la mañana en la hora del desayuno tía Lupe me despertó, sin muchas ganas baje y desayuné ya que no estaba acostumbrada a hacerlo pero en esa casa todos los días lo hacían en familia, al finalizar de comer pude percibir a tía Lupe más sería de lo normal así que me acerqué a ella y le pregunté si todo se encontraba en orden a lo cual ella me pidió platicáramos más tarde pues en ese momento estaba a punto de ayudarle a doña Esperanza con las labores del hogar. Más tarde se acercó nuevamente a mi y me platico lo que estaba sucediendo ya que debido a su embarazo y la contingencia sanitaria que estábamos viviendo había quedado sin empleo ya que como lo e mencionado con anterioridad ella es doctora y al ser personal de la salud y trabajar constantemente con personas enfermas desde una sencilla tos hasta una grave enfermedad podrías traerle complicaciones en el embarazo así que lo más saludable para ella fue quedarse en casa y no exponer al bebé que venía en camino, eso la tenía preocupada pues nunca había estado sin empleo y menos ahora que recién habían comprado su camioneta nueva y los gastos de un bebé siempre son fuertes. No tuve las palabras exactas para ella en ese momento así que solo le di un abrazo y agregué
— Tranquila yo sé que todo estará bien para ustedes y piensa que este bebé te salvo la vida ya que la enfermedad que se está viviendo es muy fuerte y si él no hubiera llegado ahora tú seguirías trabajando y no sabemos a lo que te estarías exponiendo.
Ella acepto mis palabras con toda tranquilidad ya que si algo tiene tía Lupe es que siempre tiene respuestas y soluciones para todo.
Algunos días antes del cumpleaños de Gerry tomé algunos de mis ahorros que aún me quedaban y fui en busca de un lugar en donde vendieran ropa ya que como no asistía a clases de manera presencial tenia el día entero libre así que mi búsqueda se alargó un poco ya que no encontraba el regalo ideal hasta que encontré una bonita camisa de vestir ya que últimamente había cambiado mucho su forma de vestir y ahora era más formal lo cual debo admitir me enloquecía ya que se veía demasiado bien, aparte de la camisa compré varios tipos de dulces de sus favoritos y algunos materiales de papelería para hacer mis acostumbrados manualidades y mis inspiradoras y cursis cartas como las que le regalaba cada que tenía la oportunidad, llegue a casa y puse manos a la obra pues en el trayecto había tenido una buena idea que era llegar a su casa antes de que él llegara de su trabajo y que encontrara sus regalos en su habitación sobre su cama, sabía que su mamá no tomaría en cuenta su cumpleaños así que también tenía planeado llevar un pequeño pastel de fresas con crema que era su preferido, todo mi plan estaba perfectamente armado pues llegaría de sorpresa a su casa mintiéndole un poco acerca de que no podría verlo ese día pero para mí sorpresa su hermano Lucia me envío un mensaje de texto haciéndome saber que había platicado con su mamá y pensaban organizarle algo por el día de su cumpleaños y yo estaba completamente invitada, acepte la invitación pues aún así planeaba asistir aunque no se hiciera nada pues en otro momento si su hermana no hubiera estado de visita no habría fiesta de cumpleaños.
Llego el gran día y desde muy temprano me aliste, cuando dio la tarde comenzó a llover así que pedí a mi tío Efraín a quien llamaba papá desde hace muchos años que me acompañará a la parada de autobuses a tomar uno que me llevará hasta el lugar en donde Gerry vive, él por supuesto acepto y salimos juntos de la casa con un paraguas color negro que nos protegió de la lluvia, cuando llegamos se encontraba un autobús color rojo así que bese la mejilla de mi tío, le agradecí por acompañarme y salí corriendo hasta subir en el transporte, me senté aún lado de la ventana y pude observar que mi tío se quedó parado hasta que me fui, llegue a su casa y saludé a su mamá, a su hermana Lucia y a sus hermanos menores, no había invitados solo ellos, coloque mi bolso y su regalo sobre el sillón y ofrecí mi ayuda para lo que se necesitara a lo cual su hermana me respondió que estaba a punto de salir a comprar un pastel y me pidió acompañarla a lo cual acepte y ambas salimos de casa en dirección a la pastelería más cercana, cuando estábamos ahí ella observó una gran variedad de pasteles en los cuales se veía dudosa acerca de cual comprar así que me pidió mi opinión
— ¿Cual crees que pueda gustarle a mi hermano? Pregunto mirándome a los ojos
— El que sea, solo que sea sabor fresas con crema, es su favorito.
De inmediato pregunto al hombre que nos atendía por ese sabor y tristemente no tenían así que nuevamente pregunto ¿Algún otro sabor que le guste a mi hermano?
— Gansito o chocolate
El hombre nuevamente respondió que no había pastel de gansito así que elegimos un pastel de chocolate que tenía como decoración tres tiendas y pequeños ratoncitos color gris claro.
Llegamos a casa con el pastel y esperamos el momento en que él llegara del trabajo, en ese momento revise mi celular y tenía algunos mensajes del cumpleañero avisándome que había salido del trabajo hace algunos minutos, me comentó que por ser su cumpleaños su amigo del trabajo lo había invitado a comer algo y como en su casa nunca hacían una celebración había aceptado su invitación, en ese momento la preocupación llegó a mi pues los planes se habían echado a perder ya que por mentirle acerca de que no lo vería él no planeaba llegar a casa hasta más tarde así que no me quedo otra opción más que llamarlo y confesarle la verdad que me encontraba en su casa, no respondió la primera llamada pues me había platicado que su amigo tenía una moto y seguramente venía en ella y no podía responde mi llamada así que me preocupe aún más, a los pocos minutos mi celular sonó, era el que estaba regresándome la llamada, le platiqué lo que estaba pasando y se emocionó al saber que era mentira y si lo visitaría en su cumpleaños
— Que bueno que me dices preciosa, así llévate a mi amigo y te lo presento ¿De acuerdo?
— Claro que si cumpleañero guapo, aquí te espero.
Esperamos por varios minutos hasta que se pudo percibir el motor de una moto entrar así que imaginé que ya había llegado, cuando el entró la mesa se encontraba colocada, un pastel sobre ella y algunos platos de comida, él se acercó a mi acompañado de un hombre de gran estatura igual que el
— Ella es mi novia, Gema
— El es mi amigo, Hugo
Tomé la mano del sujeto que acompañaba a mi novio y nos saludamos, enseguida tomamos asiento y comenzamos a comer, mientras eso sucedía comenzaron a surgir algunos comentarios no tan apropiados de la señora Graciela a los cuales quise no tomarles importancia pues todo parecía marchar bastante bien pero en ese momento pude sentir por debajo de la mesa como Gerry tomó mi mano y la apretó con fuerza, giré la mirada hacia él y su rostro se encontraba rojo así que acaricié su espalda y le sonreí,
Al día finalizar la comida, el acompañante de mi novio tenía que irse pues según lo mencionó su casa no se encontraba nada cerca y viajar en moto de noche después de una fuerte lluvia no era completamente seguro así que se levantó de la mesa y educadamente se despidió de todos para enseguida salir por la puerta principal acompañado de Gerry quien le abriría el zaguán para que su moto lograra salir, pocos segundo después Gerry volvió a la mesa y tomó mi mano, me acerqué a su oído y le susurré "Feliz cumpleaños mi amor, vamos a tu habitación, ahí deje tu regalo" el sonrío después de ello y nos dirigimos para poder ver su regalo, él lo abrió con la emoción de un niño de cinco años, al parecer si le había gustado lo suficiente, cuando vio la carta le pedí la leyera a lo cual me detuvo y propuso algo
— Quiero que tú me la leas como lo has hecho con la mayoría de cartas que me has dado
Justo cuando comencé a afinar mi voz para léela me interrumpió
— Pero no ahora...
— ¿Entonces? Pregunté confundida
— Después del pastel te llevare a tu casa y me la lees allá pues debo serte sincero no me siento cómodo aquí, Graciela nunca me a hecho un cumpleaños, si lo hizo ahora es porque mi hermana está aquí y quiere fingir que ya cambio pero estoy seguro que cuando estemos solos me lo echara en cara y seguramente me dirá lo de siempre que estaba mejor cuando estaba lejos de ella, tú la viste hace un rato en la comida y sus comentarios mal intencionados.
No supe que decir ante tales palabras así que le di un abrazo y agregué — Tú disfruta este día, disfruta tu cumpleaños y aunque no es aquí en donde quisieras estar agradece este año más de vida.
— Gracias por estar aquí y gracias por todo.
Le sonreí y lo invité a salir de la habitación pues seguramente su mamá y hermanos ya querrían partir el pastel.
Al salir tomamos asiento y de inmediato su hermana colocó la vela sobre el pastel, todos cantamos la tradicional canción de cumpleaños y él mordió un poco al pastel, todos comimos un poco hasta que llegó la hora de ir a casa, Gerry aviso a su familia que me iría a dejar, me despedí y salimos para tomar el taxi que ya nos esperaba en la puerta.
Durante todo el trayecto Gerry fue callado y con su cabeza recargada en mi hombro mientras yo acariciaba su cabello, al llegar bajamos y fuimos en dirección a mi casa, antes de entrar Gerry me detuvo del brazo
— Espera Gema, no entremos aún.
Me detuve y le pregunté el motivo
— ¡Abrázame! Me pidió mientras se acercaba a mi y por su puesto lo abracé con todas mis fuerzas, al separarnos saco de su bolsillo mi carta escrita el papel color azul y me pidió leerla, yo le sonreí y afine la voz para comenzar la lectura, mientras lo hacía él me miraba detenida y fijamente, al terminar se alojó entre mis brazos con los ojos conteniendo algunas lagrimas que no dejó escapar y me agradeció por estar ahí, me separé de él y acaricié su mejilla
— Yo solo quiero que disfrutes este día, quiero verte bien y mientras tu me lo permitas yo voy a compartir contigo todos los cumpleaños que sean posibles.
Después de una plática bastante sincera en la que me expreso sus sentimientos sentados sobre el pavimento con la luna como única luz miramos el reloj y ya era bastante tarde así que llamó un taxi que lo llevará nuevamente a casa.
Cuando subió al auto bajo el vidrio y se despidió haciendo una seña de adiós con la mano a lo cual correspondí de la misma manera, entré a mi casa y le pedí me enviara un mensaje cuando llegara a casa el cual recibí algunos minutos después.
— Gema ya llegue a mi casa, debo dormir para mañana ir a trabajar, gracias por el regalo y por escucharme.
Dos días más tarde llegó el fin de semana y nuevamente llegue a casa de mis tíos desde el día viernes debido a que ya no tenía que asistir a la escuela, al día siguiente sábado por la tarde Gerry llego a casa de mis tíos mientras que nosotros ya nos encontrábamos listos y sólo esperándolo para asistir al cumpleaños doble al que una tía hermana de mi abuela Mirian nos había invitado, subimos a la camioneta y fuimos en dirección a casa de mi tía, cuando llegamos la mesa se encontraba llena de familiares a los cuales saludamos y como no había espacio para sentarnos nos dirigimos a la sala a tomar asiento en los sillones, mientras manteníamos una conversación loa cuatro, mientras Gerry observaba la panza de embarazo de tía Lupe que aún no se le notaba se le ocurrió hacer una pregunta
  — ¿Y como le van a poner?
  — Pues ya le pusimos, por eso estoy embarazada dijo tía Lupe en forma de broma, broma que por supuesto su inocente ser de Gerry no comprendió así que mientras tío Miguel, tía Lupe y yo reíamos por aquel comentario tan gracioso Gerry nos observaba con cara de desconcertado sin entender la respuesta esta que mi tía le había dado segundos antes.
Tío Miguel le explico detalladamente a que se refería con la respuesta y Gerry se puso rojo, achicó los ojos y agregó de manera sarcástica "Que chistosos"
  — Yo me refiero que como le van a poner de nombre, no de otras cosas que no quiero saber.
Volvimos a reír un poco por su inocencia y de inmediato mis tíos respondieron que aún no habían pensado en posibles nombres para el bebé.
  — Ya vengan a comer sobrino escuchamos que mencionó a lo lejos mi tía mientras algunos integrantes de la familia desocupaban lugares en la mesa, así que nos acercamos los cuatro
  — Siéntate Güero le dijo mi tía a Gerry pues no recordaba su nombre así que desde ese momento para mi tía, Gerry era "Güero" por su evidente color claro de piel.
Nos sentamos y comenzamos a comer, cuando terminamos llegó mi tía de la cocina con un enorme pastel de chocolate que colocó sobre la mesa frente a los dos cumpleañeros y alguien de la familia cometo
  — Que casualidad, tú hijo es del día 1 y tu esposo del día 3
A lo que tío Miguel agregó mientras señalaba a Gerry         — Y él es del día 2
Cuando tío Miguel dijo eso de inmediato mi tía miro a Gerry y le dijo — Entonces igual tú siéntate con los cumpleañeros y muerde el pastel Güero a lo cual Gerry se puso con el rostro totalmente rojo de la pena
  — No señora, cómo cree, el pastel es de ellos no mío. 
  — Pero también es tu cumpleaños así que anda no tengas pena y pasa
Gerry apenado se negaba a pasar hasta que tío Miguel lo miro y le dijo — No te dejaran de insistir hasta que pases así que no tengas pena y acércate, no pasa nada
A Gerry se le dibujó una enorme sonrisa en el rostro y se acercó al pastel, se sentó junto a mi primo y el esposo de mi tía para morder el pastel y enseguida cantar la canción de cumpleaños a los tres hombres que se encontraban sentados.
Mi tía tomó un par de fotos y al terminar de repartir el pastel Gerry volvió a su lugar junto a mis tíos y hacía mi y me susurró feliz en el oído "el pastel está muy rico"
Lo mire y le sonreí —Y tú no querías pasar
  — Me daba mucha pena pero si me gusto hacerlo.
Mas tarde llegó el momento de irnos así que salimos de casa de mi tía y subimos a la camioneta en dirección a casa de Gerry
  — Su tía me agrado mucho, aunque no se aprenda mi nombre comentó Gerry en el transcurso del camino.
  — Si, cuando sea así como lo que sucedió hoy del pastel tú acepta, no tengas pena agregó tío Miguel.
Al llegar a casa de Gerry el bajo de la camioneta y se acercó al vidrio  — Nos vemos mañana chicos agregó desde la ventana del conductor
   — Pero si nosotros ya no te queremos ver agregó tía Lupe en forma de broma
   — Aunque no me quieran ver yo mañana llego, de mi no se desasen tan fácil respondió Gerry siguiendo la broma.
Lo vimos entrar a casa y comenzó nuestro viaje de regreso a descansar pues ya era demasiado tarde.
A la mañana siguiente cuando baje para desayunar después de que tía Lupe me había despertado me había llegado un mensaje de Gerry quien ya se encontraba afuera de la casa así que salí a abrir la puerta y entró para desayunar con nosotros, más tarde nos dirigimos a comprar lo que se necesitaría para la comida sin que Gerry sospechara nada y al finalizar la comida tío Miguel se acercó hacia mi y me hizo una seña indicándome que saliéramos un momento así que deje a Gerry solo y salí con mi tío quien me comentó que estaba a punto de ir a comprar el pastel y me pregunto el sabor preferido de Gerry, le indiqué que fresas con crema y efectivamente logro conseguirlo pues una hora más tarde aproximadamente lo vi entrar por la puerta de la cocina con un pastel que metió en el refrigerador.
Cuando estaba por caer la noche mientras nos encontrábamos jugando nuestro juego de las canicas como siempre mi tío me llamó desde la cocina así que fui hasta donde estaba y me comentó que era momento de salir con el pastel sorpresa, todo estaba perfectamente planeado pues mientras encendíamos las velas del pastel en la cocina, Mariand que se encontraba traba cerca de apagador apago las luces y mientras tanto mi tío Miguel y yo manteníamos un debate pues ambos queríamos salir con el pastel hasta que llegó tía Lupe a mediar el asunto
   — Miguel, deja que Gema lleve el pastel, es novio de ella no tuyo, tu mejor lleva su regalo.
Tío Miguel no muy conforme dejo que yo sostuviera el pastel y salí de la cocina con él en mis manos, cuando la familia de tía Lupe me vio salir con él todos comenzaron  a cantar al mismo tiempo la canción de complétanos, a Gerry se le iluminaron de felicidad los ojos y su sonrisa creció al ver esa escena, coloque el pastel sobre la mesa y al finalizar de cantar comenzamos a pedirle que mordiera el pastel y soplara las velas
  — Por la enfermedad y contingencia no puede soplar ni morder el pastel porque si está enfermo nos va a contagiar a todos dijo Mariand riendo
  — No importa, yo lo quiero empujar al pastel agregó tío Miguel
Así que Gerry sopló sus velas, como si todos nos hubiéramos puesto de acuerdo muchos de los que nos encontrábamos ahí lo empujamos hacia el pastel, levantó el rostro y se encontraba totalmente embarrado de pastel y sonriendo.
Corto su pastel de cumpleaños y nos compartió a todos, tíos Miguel le dio un abrazo y le entrego una bolsa de regalo.
Más tarde cuando fuimos a dejarlo a su casa, antes de bajar de la camioneta agradeció por el festejo, expreso lo mucho que le había gustado.
  — ¡Muchas gracias! Tuve dos pasteles de cumpleaños, ayer por casualidad con su tía y hoy con ustedes, me gusto mucho.

1460 días junto a él Donde viven las historias. Descúbrelo ahora