Capítulo 13 - PopCorn

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Cada vez faltaba menos para que llegara el día en que debía soltarlo.

Pero ese día puntualmente, luego de la rutina de los grilletes, Adriana había entrado con un Bowl lleno de popcorn en la habitación.

Ese día él había comido y tomado, así que no sabía cuáles eran las intenciones de Adriana.

—Por favor, dime que no te pondrás eso en la vagina...

Adriana rió, con una risa sincera..Llevaba puesta una camiseta varios talles más grande que se dió cuenta que era de él.

—¿Esa camiseta es mía??? — estaba en su bolso, dentro de su portaequipaje.

—Perdón, es que son cómodas y tienen tu olor...me gusta usarlas...

A esa altura, con todo lo que le había hecho que le sacara un par de camisetas no era nada.

—¿Y que tortura sexual tienes preparada para hoy?

La realidad era que Adriana estaba triste, más de dos meses juntos y no había podido hacer que él la quisiera.

Se encogió de hombros y se sentó a su lado.

—¿Quieres? — le dijo. Él la miró con desconfianza.

—No están envenenados y te los daré con mi mano, te lo prometo...¿ves? — dijo y comió un puñado —No hay veneno.

—¿Son dulces o salados???

—Dulces...y tienen caramelo...

—Bueno, está bien...— los dulces eran la pequeña debilidad de Dante, y por supuesto que ella lo sabía.

La joven le dió un puñado en la boca y él lo comió gustoso.

—¿Qué hay en la televisión?

Ella tomó el control remoto hasta encontrar 'Duro de matar 1' en uno de los canales.

—Me gusta esta película...

—A mi también — dijo él.

Ella dejó la película y se acomodó a su lado. Le siguió dando popcorn, un poco para él y otro para ella y cuando terminó dejó el bowl en el piso y se acomodó en su pecho.

Luego de un rato, Adriana se había quedado dormida. Podía sentir su respiración acompasada. Tenía las piernas de ella desnudas sobre su cuerpo y su aroma a fresias, mezclado con el caramelo, le hacían recordar a su infancia. Su cuerpo desnudo reaccionó a la cercanía de la joven muy a su pesar y agradeció que estuviera dormida para que no se regocijara por ello.

Cuando dormía parecía tan joven e inocente..Se dió cuenta observandola de que tenía unas pequeñas pecas desparramadas por sus mejillas redondeadas y que aún sin maquillaje sus pestañas eran increíblemente largas.

—Dante...— pronunció ella entre sueños y se abrazó más fuerte a él, como si no quisiera soltarlo jamás.

LOCA POR MI PADRASTRO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora