Chantaje Y Mentiras

vivir el momento...

-- ... y yo le dije al inútil  ese ...oye yo soy mucha pieza para ti, ¿ sabes?...-- Anie detuvo su relato al darse cuenta que Yingji estaba en su mundo puesto que no le prestaba atención en lo más mínimo -- ...hey Yingji amiga... ¡despierta! -   a lo que con un pequeño sobresalto la chica le puso atención  a su rubia amiga

-- ¿Si, decías? -- la miró

-- ¡Oye!, tengo un rato hablándote y no me haces caso.... ¿Que sucede contigo?-- la miró con curiosidad .

-- Chunseng me invitó a salir -- estaba contenta,  aunque  sabía  que lo que  hacía estaba mal.

La rubia abrió la boca por la sorpresa. -- ¿el chico que te gusta? -- Yingji asintió. -- amiga.... ¿estás segura? -- la miró a los ojos.

-- no...si...¡No lo sé! -- estaba confundida -  solo  se que quiero estar con él y olvidarme de todo,  de mi compromiso, de lo que significa está horrible boda...  de mis padres.... -- sonrio con amargura.

--  ¿el ya lo sabe amiga?, ¿sabe que te casarás muy pronto...? -   negó con la cabeza. --  ¡Yingji...! -- le reprochó.

-- ¡No se lo he dicho, porque... porque pronto me uniré a la persona más fría e indiferente que  además no siente nada por mi  y tendré que soportarlo!, porque mi madre mucho menos mi padre me dejaran romper este compromiso! -- dijo frustrada  -- ¡Quiero  vivir está pequeña aventura con Chunseng! , ¡ no se en que terminara, pero ... se que valdrá la pena! --  miró  desidida a su amiga

-  amiga  ¡Eso es cruel y egoísta! ¡cuando el se entere,  lo va a tomar muy mal!, -- miro asustada a su amiga.

Yingji la miró...-- si me odia cuando lo sepa...me quedara el recuerdo al menos de esta salida...-- tomo sus cosas y se dirigió a la puerta de su salón.

Chunseng esperaba ansioso a Yingji, por su mente pasaban cosas como que la chica se arrepintiera o algo más...la miró acercarse y sonrió de oreja a oreja.

-- ¡hola! --  la miró feliz -- ¿Lista? -- chica asintió -- ¡pues vámonos, te encantará ya verás! -- dijo Chunseng emocionado, caminaron un poco para tomar un taxi.

-- ¿Y a dónde iremos? -- pregunto curiosa.

-- es una sorpresa...-- sonrió el chico.

Después de 15 minutos de viaje, llegaron a un enorme edificio.

"Acuario de la ciudad"

La chica lo miro perpleja -- ¿Acuario? -- sonrió.

-- ¡si, hay pingüinos, medusas, peces de colores!, -- la chica escuchaba a Chunseng hablar como si fuera un niño pequeño, estaba tan entusiasmado, así que, decidió divertirse tan bien.

-- ok, pues entremos -- metió las manos a la bolsas de su torera y lo siguió al interior del lugar.

Al entrar debieron bajar dos pisos abajo en un ascensor,  apenas salieron de el entraron a una enorme habitación que tenía cristales de piso a techo y a ambos lados, había un pequeño corredor para mirar a los peces que nadaban, incluso en el techo, pudieron mirar  tiburones enormes, peces de todos colores y tamaños, peceras con caballitos de mar, o estanques con mantarrayas, tortugarios, había también  un stand donde había pingüinos en su hábitat simulado.

Los dos chicos se divirtieron mucho, incluso se tomaron infinidad de fotografías al lado de los estanques y peceras, en el área de interacción con los cangrejos, yingji persiguió a chunseng con uno, en venganza el muchacho le puso una pequeña tortuga en la cabeza, a lo que la chica al verla moría de ternura.

A terminar el recorrido,  el chico  le compro en la tienda de regalos un pingüino de peluche.

-- quieres tomar un refresco o café o comer algo... ¿que te parece una hamburguesa con papas fritas? -- miro con duda a la chica -- aunque como luces no creo tu comas ese tipo de cosas,  se mofo.

La chica entre cerro los ojos -- ¿Crees que no me puedo comer dos hamburguesas? -- lo miro retandolo.

-- ¿dos?-- chunseng abrió los ojos sorprendido, la chica lo tomó de la mano y lo arrastro hacia un local de hamburguesas,  ocuparon una mesa vacía, el muchacho miro su mano, es cuando  yingji se da cuenta que aún no lo había soltado, tímidos sonrieron, pidieron cada uno su hamburguesa.

-- ¿de verdad te comerías dos hamburguesas? --

-- nunca lo he hecho..-- sonrió la chica divertida, dándole una pequeña mordida, lo cual dejo un poco de catsup en la orilla de su labio

Chunsheng la miro, amaba verla reír -- tienes una sonrisa muy bella -- acerco su pulgar para limpiarle, lo que sorprendió a la chica, mirándola fijamente,  chunseng fue acercándose lentamente como si los labios de yingji lo hubieran hipnotizado, la chica no retrocedió, al contrario cerro los ojos.

Fue un beso leve apenas rozándose, al ver que la chica no lo rechazó, chunseng la beso de nuevo, está vez un poco más profundo, saborearon el sabor de cada uno, se separaron mirándose a los ojos, ninguno decía nada,  aunque fueron un par de minutos solamente.

Chunseng le tomo la mano -- yingji... te gustaría ---

--- no lo digas -- lo interrumpió la chica

-- ¿Que?-- chunseng la miro confundido

La chica quito su mano, se puso de pie, se acomodo el bolso en su hombro.

-- perdóname, por favor... no debí..-- dijo chunseng levantándose también.

--  tengo que irme...-- chunseng la tomo por el brazo para no dejarla ir

-- yingji,  lo siento, me gustas mucho, y pensé que podríamos tener una relación... -- 

-- déjame ir..-- rogaba la chica.

-- no... mírame a los ojos ... dime qué no sientes nada por mi y te dejare ir -- la encaró.

De los ojos de Jingyi empezaron a salir lágrimas, chunseng creyó que había hecho mal al besarla y declararse, -- se que no pertenezco a tu nivel social, no tengo millones como tu familia, ahora solo soy un estudiante de universidad con un empleo de medio tiempo, pero mi corazón y mi vida entera te pertenecen -- la miro con tristeza.

La chica nego con la cabeza, lo miro a los ojos fijamente--- estoy comprometida -- chunseng sintió un balde de agua fría caer en su cuerpo. -- me voy a casar en dos semanas --  dijo casi en un susurro. El chico la soltó dejando caer sus brazos a los lados, algo que aprovecho yingji para salir de ahí, dejando clavado en el piso a chunseng, que no atinó a mover ni un músculo, no supo cuánto tiempo se quedó ahí parado, hasta que llegó el mesero a preguntarle si necesitaba algo más, a lo que el muchacho nego y pagó, tomó el pingüino  y se fue de ahí.

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