Limerencia. [Vkook] Omegaverse.

Quince

Bu!

Kim Taehyung estaba tendido en la tienda que por fortuna no alcanzó a desarmar, ¿Podía tener una suerte más mala? Su celo se presentó en el peor de los momentos, deteniendo el avance de su unidad. Lo más llamativo era la intensidad de los síntomas que estaban alejándolo de su cordura, tenía presente que estaba cerca de experimentarlo, quizá se adelantó un par de días pero eso no explicaba la fuerza de los síntomas, se sentía tan agobiado como si no hubiera ingerido ningún supresor. Apenas hizo su solicitud, la bebida fue preparada en menos de treinta minutos, estaba dentro de los protocolos para lidiar las situaciones que se podían presentar en una avanzada. El alfa bebió dos vasos enormes de la preparación pero se sentía igual, la erección que se izaba por encima de la tela con la que le cubrieron el cuerpo le dolía de forma tortuosa.

Pero nada era más tormentoso que el ver los ojos de Jungkook detrás de sus párpados cada que los cerraba, se le hacía agua la boca y las yemas de los dedos le dolían por deslizarse en la cremosa piel del omega.

Jungkook...

¿Era porque lo reconocía como su omega que su alfa lo estaba llamando con tanta fuerza para que lo ayudara con su celo? Taehyung tenía claro que nunca en toda su vida experimentó un celo de esa intensidad, como tampoco deseó el cuerpo de alguien tan específico con esa fuerza. Comenzó a quitarse las prendas que le cubrían el cuerpo buscando un poco de alivio, sentía que cada centímetro de la piel le ardía y se iba a deshacer ahí mismo, iba a sacarse el baji cuando Hoseok ingresó a su tienda, sin poderlo evitar le gruñó, la esencia de un alfa era lo menos que quería percibir en ese momento, casi que le producía arcadas.

—¿Estás seguro que no eres un alfa puro o algo así?—la mirada encendida en jade del alfa al que iba dirigida la pregunta era con franqueza intimidante, Hoseok se llevó la mano a la nariz para tratar de evadir las invasivas feromonas que soltaba el alfa y prefirió mantener distancia.

—Jamás me había sentido así—alcanzó a decir.

—¿Cuánto dura tu celo?

—Un día.

Hoseok hizo un gesto afirmativo con la cabeza—Seo-el líder de brigada Kim dice que va a esperar a que mejoren tus síntomas para avanzar.

—No hay necesidad, pueden ir avanzando, él conoce el camino—Taehyung tenía que tomar pausas mientras hablaba porque su respiración era tan agitada como si se encontrara corriendo—no hay porque retrasar toda la operación solo por mi celo.

—El líder de brigada dice que el clima aporta poca visibilidad por lo que sirve esperar, lo que no tiene que ver con recoger el campamento esta mañana, pero ¿qué puede opinar un insulso soldado?

Taehyung llevó su cuerpo hacia adelante, la tortura de su pasión insatisfecha lo estaba enloqueciendo y no podía sostener esa conversación con Hoseok.

—Te voy a dejar solo.

El alfa comandante lo agradeció, no sin antes pedir que dejaran el área despejada, porque para el momento no podía tener una conversación coordinada y se iba a resentir más si tenía que convivir con aromas indeseados, lo máximo que llegaba a hacer era retorcerse en la agonía de su pasión insatisfecha que no pareció ceder ni ante su intento por aliviarse por cuenta propia en más de una ocasión pensando eso sí, en la humanidad de quien clamaba como su omega.

—No parece que haya mejorado nada comandante Kim—quizá debido a su estado de frustración remarcada, la voz de ese alfa se escuchó en extremo irritante a los oídos de Taehyung—Ya han pasado ocho horas, ¿no le gustaría pasar su celo con un omega?