Nerd. -Jenlisa.

20.

N/A: Bro, 1.5k de lecturas. Es el número más grande al que he llegado muchas gracias <3.

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Jennie sentía sus músculos arder, sobretodo sus piernas. Los movimientos que su cuerpo dibujaba en aquel tubo eran bastante forzosos aunque ya estaba acostumbrada.

Luego de dejar el almuerzo de Lisa, volvió a su casa y se cambió para practicar un poco de Pole Dance. A pesar del cansancio, se sentía en su elemento cuando estaba bailando. La música resonaba en la habitación mientras ella se movía con gracia y fuerza alrededor del tubo. Cada giro, cada movimiento, era una expresión de su pasión y determinación.

De repente escuchó como el timbre de su casa sonaba, sintió el alma salir de su cuerpo. Salió corriendo a su habitación para ponerse una camisa larga y delgada, no tuvo tiempo de ponerse pantalones más largos. 

Tenía una expresión malhumorada ¿Quien diablos podía ser?.

Al abrir la puerta se llevó una gran sorpresa.

—¿Lili?. —la mayor miró boquiabierta a Jennie, la menor tenía una camisa blanca pegada a su cuerpo gracias al sudor y no sabía si tenía pantalones. 

—Hola, Nini. —saludó Lisa nerviosa, la menor se veía increíblemente sexy y eso dejó a Lisa sin palabras por un momento.

Jennie se mordió el labio inferior, sintiéndose repentinamente consciente de su propia apariencia y del hecho de que estaba practicando Pole Dance.

—Dios, es cierto, te dije que podías venir más tarde. —tocó su cabeza.— Disculpa, estaba entrenando. —rió nerviosa.

Lalisa sintió su imaginación volar.

—No pasa nada, quería venir a verte porque estaba algo aburrida en casa pero si quieres me puedo ir. —Jennie negó repetidas veces.

—¡No, no! No quiero que te vayas. —acomodó sus lentes los cuales se deslizaron un poco gracias al sudor. —Ven, entra, si quieres puedes esperarme yo voy a ducharme. —Lisa asintió.—¿Quieres algo de tomar?.

—No, gracias comí algo antes de venir aquí.—dijo Lalisa aún con nervios.

—Está bien, entonces ¿Puedes esperarme mientras...—Lisa asintió repetidas veces.

—Claro, claro ve a ducharte. No hay problema Nini. —le dijo cariñosamente a su pareja, era gracioso que ambas ya se habían visto en su momento más íntimo pero aún los nervios permanecían entre ellas. 

—Gracias, Lili. No tardaré mucho. Siéntete como en casa. —dijo Jennie con una sonrisa agradecida antes de entrar rápidamente a la ducha.

Mientras Jennie se duchaba, Lisa se paseó por la sala de estar, admirando las decoraciones y las fotos en las paredes. Se sintió un poco nerviosa, pero también emocionada de estar en la casa de Jennie. Quería conocer más sobre la vida de su novia, quería entenderla mejor y compartir más momentos juntas.

Luego de unos minutos Jennie salió del baño, tenía ropa limpia y seca además de su cabello algo húmedo. Se acercó a Lisa 

—Lili, ¿encontraste algo interesante? —preguntó Jennie, curiosa por ver qué foto había captado la atención de su novia.

Lisa levantó la vista y sonriendo.

—Sí, esta foto tuya de cuando eras pequeña es adorable. —dijo Lisa, mostrándole la foto en la que Jennie estaba sonriendo ampliamente, sosteniendo un gato en brazos. —Tu mamá no me la mostró, pero personalmente creo que soy fan de ti, pequeña nerd. Sobretodo cuando eras una niña.