Lady Estelar [EN EDICIÓN][ZoRobin]

Broma o traición

__ Silencio- Zoro volvió a correr la cortina ocultando a Robin de cualquiera que pudiera introducirse en la estancia.

El pesado cortinaje ocultó la luz que provenía de único aplique de la pared. Robin quedó sumergida en la oscuridad. A tientas avanzó para encontrar la puerta y se tropezó con un pedestal. Tragó saliva para no gritar por el dolor que sintió.

__ ¡Maldita seas Roronoa!- la voz del extraño estaba cargada de furia- Es usted. No lo creí cuando recibí la nota. Me dije que se trataba de una broma terrible. Pero parece que no he sido un tonto sino también un cornudo.

__ Buenas noches, Vinsmoke- el tono de voz de Zoro era frío hasta rozar la indiferencia- No me di cuenta de que alguien más tenía una cita aquí con el doctor Clown. Yo requerí un tratamiento privado.

Robin se dio cuenta que el hombre que había entrado a la estancia era el esposo de la misteriosa lady Nami.

__ ¿Dónde está mi esposa, maldito bastardo?

__ No tengo ni idea- dijo tranquilamente Zoro- Como puede ver me encuentro solo. Confieso que me encuentro desilusionado por ese hecho. Había albergado la esperanza de lograr ver más de la famosa terapia del doctor Clown que unas pocas pinturas de mala calidad, además de unas estatuas tan deficientes.

__ Arreglaste una cita aquí para encontrarse con Nami. ¿No es así?- le preguntó Sanji con una voz que bullía de rabia- Eso es lo que la nota decía.

__ ¿La nota?

__ Alguien sabe de qué se trata, Roronoa. Está noche me dejaron una nota en mi carruaje en donde me decían que si deseaba descubrir el lugar donde usted y mi esposa se encontraban, debería venir al número diecinueve de Lamb Lane.

__ Alguien le jugó una broma desagradable, Vinsmoke. Quién quiera que sea sin duda sabía que yo tenía una cita aquí está noche.

__ Una cita con mi esposa, maldita sea.

__ No.

Robin se sobresaltó cuando la puerta lateral se abrió. Miró ansiosa las sombras y vio una figura que salía al oscuro pasillo. La mujer llevaba una vela en la mano. La llama iluminaba sus bonitas facciones, su cabello oscuro brillaba y un vestido muy fino de escote muy pronunciado.

La mujer se detuvo bruscamente cuando vio a Robin. Después se puso las manos en las caderas y la miró con disgusto.

__ ¿Qué cree que está haciendo aquí?- le exigió en tono alto- Está es mi noche para ser la diosa clásica del vigor masculino.

Se produjo un repentino silencio al otro lado de la cortina. Robin miró a la mujer y desesperada trató de pensar en que hacer.

__ Lo siento- dijo en un susurro- Ha habido un error.

__ ¿Qué es lo que sucede ahí atrás?- preguntó exigente Sanji. Se oyeron pasos resonar en el suelo según se dirigía hacia la cortina roja.

__ Creo que va a comenzar la función- dijo secamente Zoro.

La mujer dejó escapar una protesta aguda y fue hacia la cortina.

__ ¿Qué es esto? ¿Hay dos hombre ahí afuera?

__ Sí- murmuró Robin.

__ ¡NO TE ATREVAS A TOCAR LA CORTINA!- gritó la mujer. Se volvió hacia Robin.- Clown no me dijo nada de que habría dos hombres para el tratamiento clásico. ¿Quién se cree que soy? ¿Una diosa verdadera?

__ Si yo fuera usted- habló tranquilamente Zoro- No interferiría.

__ ¿Qué demonios sucede aquí?- Sanji se mostraba confundido.