Love in the bloody madness (Alucard y tu).

Capítulo 10.

"Descuida pequeña flor... Tu lugar seguro está aquí...".

*¿Eso lo soñé o fue real?*.

Fue lo primero que se me vino a la cabeza cuando me desperté, sabía que la voz era de Alucard, pero no lograba distinguir si era real o no, aún tenía los ojos cerrados... Aunque una leve respiración en mi cara hizo que los abriera, dándome cuenta de que estaba escondida bajo unas sábanas en una cama que no era la mía, podía notar que hasta el colchón era diferente y que el que respiraba frente a mi era Thinny, el cual también se encontraba durmiendo.

Traté de destaparme un poco e incorporarme, pero eso bastó para despertar al pequeño fantasma, el pobrecito lloró en mis brazos y salió volando gritando que ya estaba despierta para buscar a los demás. Eso enterneció mi corazón y después revisé con la mirada el lugar donde me encontraba, parecía ser la habitación de Seras, bajo tierra... Y llevaba puesto uno de sus pijamas.

"No se separó de ti ni un momento...".

La voz de la vampiresa hizo que me girara para encontrarle sentada en una silla al otro lado de la cama, con una sonrisa maternal, lo cual hizo que me tranquilizara un poco, pero eso no evitaba que me sintiera mal.

Seras: No fue tu culpa, ninguno de nosotros se dio cuenta...- Dijo mientras se sentaba en la cama para estar más cerca de mi y acunar mi rostro con una de sus manos, notando el frio de ésta a través de la tela de su guante.- Veo que los nervios impiden que puedas controlar tus pensamientos, aunque gracias a eso... Mi amo fue capaz de encontrarte y llegar justo a tiempo.-

Diane: Lo siento... Lo siento mucho...- Dije mientras agachaba la cabeza, las lágrimas salían sin mi permiso, cayendo sobre las finas sábanas, sólo podía ver como apretaba éstas con las manos.- Si no hubiera sido tan estúpida e ingenua, podría haberlo evitado...- Mi voz comenzaba a quebrarse.-

Las imágenes de todo lo sucedido con Noah estaban provocando que hiperventilara, sin poder controlar los sentimientos de culpa, miedo, ira e incertidumbre que tenía mezclados en mi interior, haciendo que me diera un ataque de ansiedad. Mi cuerpo temblaba y entonces Seras me abrazó para consolarme.

Pip: Rayon de soleil...- Susurró mientras salía de las tinieblas del brazo de la vampiresa, uniéndose al abrazo para que me sintiera arropada por ambos.- No pasa nada...

En realidad ambos estaban muy tensos por la rabia que sentían, rabia al no poder haber hecho algo en su momento para poder evitar que me hicieran tanto daño, rabia por no poder hacer nada más que abracarme mientras lloraba, rabia por todo... Seras luchaba por mantener la compostura, mi tío se dio cuenta y lo que hizo fue apretar mas el abrazo para que reaccionara y pudiera sobrellevar el escuchar mi llanto, pero no pude percatarme de esas cosas, estaba llorando como una niña indefensa, acurrucada y asustada hasta casi ser un ovillo, hacía años que no me ponía así.

Entonces noté que alguien limpiaba mis lágrimas, tras abrir los ojos pude darme cuenta de que se trataba de Integra, la cual estaba siendo acompañada de Thinny, tratando de ayudarme al igual que los otros dos presentes.

Diane: Mi Lady...- Logré decir entre sollozos, acto seguido le abracé con todas mis fuerzas.- Lo siento... No pude llegar para ayudarte...- Mi voz se quebró más ante el sentimiento de culpa, ella me sobaba la espalda.- 

Integra: Tranquila, estoy bien...- Logra hacer que me separe un poco de ella para mirarme bien a los ojos y agarrar mis manos, acariciándolas.- Ahora lo más importante eres tu... ¿De acuerdo?- Asentí antes su pregunta.- Pero necesito que te calmes para que podamos hablar de lo que pasó anoche... Lo siento.-

Diane: S-si...- Dije mientras trataba de respirar con normalidad, cosa que se me dificultaba bastante.-

Me ayudaron a controlar la respiración para poder tranquilizarme con más facilidad, pasados unos 15 minutos, pudimos hablar de lo sucedido, pero todo eran conjeturas sin respuestas, estaba más que claro que Noah traicionó a la Organización Hellsing para poder estar conmigo en contra de mi voluntad, pero... ¿Con quién hizo el trato?... Entonces un recuerdo fugaz me mostró lo que vi cuando fui reflejada por la luz de la explosión en el agua de la fuente.