Año 2.030, ya han pasado 30 años en total desde la "muerte" de Alucard y 14 desde que Diane entró por primera vez en la Mansión Hellsing.
Era una noche un poco fría, dando a entender que el invierno llegaría pronto. Estaba terminando una misión que se nos encomendó a Seras y a mi, la vampiresa estaba en otro lugar cercano peleando con el vampiro madre que creó a los Ghouls contra los que en ese momento me encontraba peleando dentro de un edificio aparentemente "abandonado".
Diane: Y que Dios se apiade de vuestras almas... Amén.- Terminé de recitar mientras cerraba la pequeña biblia que traía conmigo, creando una barrera espiritual para que ninguno de esos seres escapase del lugar.- Vamos Thinny, terminemos esto de una vez.-
Thinny: ¡Si señora!.- Gritó con entusiasmo el pequeño espectro flotante, mientras hacía una pose militar solo con sus bracitos, porque al ser un fantasmita, sus piernas fueron reemplazadas por una colita espectral (imagen).-
Thinny era el espíritu de un niño que murió más o menos en los años de la Revolución Industrial, en una de mis primeras misiones, cuando tenía 15 años, le salvé de ser devorado por un demonio que tuve que exorcizar con la ayuda de Heinkel. Desde ese entonces, decidió pegarse a mi como una lapa y acompañarme a todas partes, el es mi mejor amigo y su presencia me vino muy bien porque la verdad es que me sentía bastante sola.
(Éste personajito tan adorable era de una historia de "Aluvard y tu" que creé hace años, pero era de otra cuenta que acabé borrando junto con otras historias que ya tenía, la protagonista se llamaba Diana, de ahí que la de ésta se llame Diane, la trama es totalmente diferente, pero daré mi mejor esfuerzo para que guste tanto o más que la que empecé en su día).
Diane: Comencemos...- Dije mientras una sonrisa maliciosa adornaba mi rostro.-
Habían un montón de Ghouls, cada vez aparecían más y más y casi todos se estaban concentrando en el amplio pasillo en el cual nos encontrábamos el pequeño espectro y yo, desenvainé ambas bayonetas y corrí hacia éstos con muchísimas ganas de hacerles pedazos, las cabezas no tardaron en rodar poco a poco y los cadáveres andantes se hacían cenizas a mi paso. Rápidamente subía un piso tras otro sembrando al caos y cuando llegué al último, me encontré a una draculina, la cual intentaba salir por una ventana, pero la barrera espiritual que creé anteriormente le impedía salir del edificio.
Diane: Oh... A si que tu eres su juguetito...- Dije llamando su atención.- Por fin un poco más de diversión, me estaba comenzando a aburrir con tantos Ghouls... Se me estaba haciendo un poco monótono.-
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Love in the bloody madness (Alucard y tu).
Fanfic"Cuando tengas miedo, imagina un lugar en el que te gustaría estar, uno muy seguro, uno donde nadie puede hacerte daño, no hay gritos, solo hay calma... ¿Cuál sería?" "Uno junto a ti, no me importa donde, como si pasan siglos hasta estar de nuevo a...