Leyendo "La Heredera de Merlín"

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Maratón 2/2.

"Posión multijugos y celos"

Luego de dos días de descansar y acumular información, se sentaron en  el Gran Comedor bien cómodos.

A la mañana siguiente me levanté temprano, me vestí y ante las caras pálidas de mis compañeras y la de confusión de Hermione, dejé a Hades acostada en mi cuello.

-Sin miedo a la muere perra -le gritó Afrodita a la pantalla perdiendo su imagen de diosa serena.

Al salir al pasillo los rumores de lo que había pasado con Justin y Nick se oían en todos lados, todos parecían más preocupados sobre cómo a un fantasma le podía pasar eso, sin embargo al verme y más con Hades se callaban y palidecían, cosa que me hacía gracia.

-A todos querida, a todos -dijo Loki sonriendo en grande.

Me senté en el comedor bajo la mirada de todos, pero me daba igual, a fin de cuentas, seguirían hablando de mi.

Sentí dos presencias a mis lados, y me giré para ver a un gemelo Weasley a cada lado, ambos sonriéndome, les devolví la sonrisa y hablé.

-Ohhhh salimos nosotros -dijeron ambos hermanos.

-¿Que pasa? -les dije.

-Eres atrevida -empezó Fred.

-Muy valiente -siguió George.

-Para venir -siguió.

-Con una serpiente -continuó.

-Al Comedor -Fred.

-Con todo lo que se dice de ti -George.

-Nos gustas, toda una Gryffindor -dijeron a la vez.

-¿Que dijeron? -habló Klaus como quien no quiere la cosa y ambos pelirrojos miraron lo bonito que estaba el cielo.

-Bueno, pues muchas gracias, pues les diré que me da igual lo que digan los demás, además tengo a Hades desde primer año y ya estaba aburrida de estar encerrada -les dije y abrieron los ojos.

-¿Como nunca nos enteramos de eso? -dijeron a la vez.

-Siempre estaba en mi cuarto o debajo de mi túnica, no quería que nadie se asustara por ella, pero ya da igual, así que decidí no dejarla más encerrada -les dije.

-Genial -volvieron a hablar.

-Me encanta como hablan a la vez -murmuró Enid.

Terminé de desayunar y salí de allí, se que Harry, Ron y Herms están sospechando de Draco debido a que no irá en Navidades, pero no pienso meterme en nada de eso, tengo cosas más importantes que hacer.

Algo bueno, era que los gemelos Weasley se tomaban esto a juego, me parecía gracioso como Percy los regañaba y a ellos les importaba aún comino, la que me ponía más era Ginny, así que decidí hablar con ella de vez en cuando para que se tranquilizara.

-¿Porque con mini-Weasley? -preguntó Blaise.

-Nada -respondieron en trío de oro a la vez.

Los días pasaron hasta que llegó Navidad, Hermione nos despertó, por lo menos a mí, luego de ir a ver la posión y me puse a observar mi regalo, dulces de Harry (sobre todo chocolate), libros muggles de Herms, suéter de la señora Weasley, artículos de broma de los gemelos y tres con cajas muy especiales.

-Grrrr maldito día -gruñó Harry y Hermione lo miró.

-Pareces perro Harry -dijo ella y Ron se río de este al ver la mirada ofendida que tenía.