Promiscuo K.M

50

Dos días después del audiencia decidi hacerme la bendita prueba, no tenía dudas de quien era el padre de mis cachorros pero solo quería que este trago amargo pasara rápido, por fortuna la prueba no lastimaria a mis bebés que era lo que más nervioso me tenía.

-Kim SeokJin por favor dirigirse al modulo 3- escuche mi llamado en el parlante

Apreté la mano de Azu, y me levante de mi lugar llegando a donde me habían llamado, una ves aclare el procedimiento con el médico, tome lugar en la camilla, estaba nervioso realmente nervioso, y por más que Azu intentaba transmitirme calma no podía. Cerré mis ojos y sentí calma por un momento, algo de inmediato me relajo, sentí un pequeño punzon en mi vientre y luego oí al médico decir que habíamos acabado y los resultados saldrían en la tarde, me levante aún un poco desorientado, salí lentamente del consultorio y lo primero que vi fue a Jimin y jungkook ambos estaban aferrados uno al otro mientras repetían  una y otra ves un mantra.

-Solo ten calma Jin, solo ten calma Jin

Se me hizo un poco extraño pero quede en shock viendo a Jimin brillar de un tono violeta y jungkook de un tono naranja, estaba acaso soñando, la luz poco a poco fue desvaneciéndose hasta llegar a sus torsos, abrí mis ojos de par en par, no podía creer lo que habia pasado y entonces mi mente se ilumino, cuando era niño había oído las leyendas de los hijos de la Luna, aquellos que tenían el poder de encontrarse, de ser una pareja destinada superior, de poder viajar a vidas pasadas y futuras y sobre todo tenían el poder de calmar a su manada, pero por que había funcionado conmigo, yo no era parte de la familia de Jimin o de Jungkook.

Carraspee llamando su atención- Chicos!- salude alegre esperando no ser tan boquifloja y exigir una explicación

-Hola Jinnie- Minnie

-Hola Jin- kook

Ambos se miraron y me miraron, sonrieron para ambos decir al tiempo

-Funciono- Ahora debemos decirle algo importante

Salimos a comer algo, Azu se había ido así que tenia todo el tiempo para oír lo que me tenían que decir.

-Jinnie, creo que comenzare con el principio, como ya sabes kook y yo somos destinados

Asenti

-Pero no somos como las parejas comunes de destinados, nosotros somos hijos de la Luna....

Después de quizá unas 3 horas de charla donde me había contado todo lo que habían podido hacer y descubrir siendo hijos de la Luna y confirmar que ellos habían tenido que ver con mi paz interior mientras estaba en el consultorio me surgía solo una duda.

-¿Como es que pudieron hacer algo en mi?- pregunté

-No lo sabemos con certeza, pero tenemos 2 posibles opciones

-dos....

.-Así es Jinnie, la primera es que para mi lobo, Rj es su alma gemela, eres mi hermano quizá no de sangre pero siempre te he considerado así, mi lobo me ha asegurado que tu lobo y mi lobo fueron en el pasado hermanos, quizá no tengas el mismo poder que mi lobo, pero aún así eres de mi manada

-y la segunda?

-Bueno esa quizá es un poco más descabellada, tu llevas los hijos de Nam, Nam es mi sangre, cuando te emparejarse con él mi lobo te tomó como parte de su manada, y quizá es loco pero al llevar sus hijos también tendrán un poco de mi sangre así que bueno podemos darle el beneficio de la duda a las 2 opciones.

-woahh, esto es un poco loco, pero me alegra que los 3 no estaremos solos- mencioné acariciando mi vientre

-Eso jamas -dijeron al unisonido y algo que me dejó pensando es que estaban más unidos