Promiscuo K.M

24

NARRADORA

Jungkook se encontraba en la cocina después de haber dejado sus sábanas en el cuarto de lavado, decidio ir por algo de comer y beber aún en la oscuridad, por evitar despertar a un pelirubio que convivía junto a él, a penas probo el primer bocado de su comida escucho la puerta de la casa ser abierta, por la oscuridad de la noche podía asegurar que era de madrugada, se quedo en silencio esperando el siguiente movimiento, luego vio la silueta de Jimin sentándose en el sofá que daba la espalda al lugar donde estaba él, se quedo en silencio intentando comer sin hacer mayor ruido, quería ser invisible en ese momento y más cuando escucho al menor hablar por teléfono.

- Jinnie, acabo de llegar a casa estaba con Yoongi

Jungkook se quedo en silencio sintiendo su corazón doler, el amor de su vida estaba con ese alfa pero siguió inmóvil

- Jinnie hicimos el amor, fue tan maravilloso Yoongi a cambiado mucho, lo amo lo amooo tanto, estoy muy enamorado de él, me hace muy feliz

Jungkook por su parte sentía sus mejillas húmedas no sabia en que momento pero sus lágrimas salían sin parar mientras su pecho dolía más y más sentía un nudo en su garganta y su corazón ser fragmentado en mil pedazos

- Jinnie, tengo algo más que decirte, mmm Jungkook estaba en celo, chimmy me llevo a Jungkook y antes de estar con Yoongi estuve con Jungkook y fue raro, me sentí bien pero no dejaba de pensar en Yoongi

Y si fue el momento en que Jungkook deseo estar muerto y no sentir tanto dolor, se escabuyo y se fue a la parte trasera de la casa donde estaba el patio, tenía una silla de playa donde se recostó y mirando a la luna se preguntaba que habia echo mal para estar recibiendo tanto dolor.

Dentro de la casa un Omega sentía el dolor de su alfa, Jimin sentía su pecho pesado podía sentir una gran tristeza dentro de si pero no le hallaba explicación, no se percato en ningun momento que el alfa estaba ahí escuchando cada palabra que el decía, haciendo que el alfa que habitaba en esa linda casa que sentía en ese momento muy acogedora estaba con su corazón hecho trizas.

Al día siguiente

Jungkook no pudo dormir el resto de la noche por lo cual a las 5 de la mañana salió de la casa sintiendo que se asfixiaba , llegó a casa de Nam pues necesitaba un abrazo del que era su mejor amigo, su primo, su hermano.

Pov Nam

Desperté por el sonido del timbre maldición aún estaba el cielo más oscuro que claro, juraría que alguien estaría a punto de morir me levante enojado de la cama y baje a abrir pero grande fue mi sorpresa cuando vi a kook parado allí con cara de zombie.

- Kook que haces aquí tan temprano- pregunté

-Ne-necesito hablar contigo

- no podías esperar a llegar a la oficina - me miró con esos grandes ojos y con mirada de cachorro que no me pude negar

- sigue, dije mientras dejaba abierta la puerta para que pasara y yo siguiera a la cocina ahora necesitaba un café

- Nam- kook entró a la cocina me abrazo por detrás dejando su rostro en mi espalda, me recordó a cuando estábamos más pequeños y cuando se sentía triste hacia eso, necesitaba sentir que alguien sanaba su dolor, que alguien estaba con él, pero se sentía tímido que lo vieran tan vulnerable podía sentir sus hipidos y me empece a preocupar hace muchos años no veía así a kook.

Me gire y lo tome del mentón haciendo que me mirara, vi sus ojitos cristalizados y su nariz roja era visible que estaba mal, lo abrace intentando transmitirle calma lo lleve al sofá y nos sentamos juntos me sente y el acomodo su cabeza en mis piernas, era tan tierno me recordaba a ese pequeño niño que llegó a mi casa luego del accidente de sus padres. Lo deje que se deshagora pronto me diría que pasaba.