El ambiente se formó tenso, muy tenso, el hombre te tenía sostenida del cabello, pero al ver que eras una mujer, rapidamente te soltó arrepentido.
Todos entraron en pánico al igual que tu, actuaban como si nunca hubieran visto a una mujer, bueno....tenia lógica..
Tu retrocediste asustada queriendo irte de ahí, pero chocaste con otro chico, este se veía más Joven, se alejo de ti al igual que todos, parecía que te tenían miedo.
Tu respiración se volvió más agitada a medida que los hombres seguían retrocediendo. Comenzaron a murmurar.
"¡En verdad es una chica!"
"¿No es un demonio disfrazado de una?"
"¿Acaso no murieron?"
"¡Es hermosa..!"
"Los mitos y leyendas sobre ellas eran verdad"
Tu sentías que estabas a punto de desmayarte, como pudiste miraste a todos lados buscando a Kyojuro en su forma zorro, pero no lo encontraste.
- (Maldita sea, ¿donde estas cuando te necesito?) - Te preguntaste apretando la mandíbula.
Miraste tus manos las cuales temblaban al igual que tus pies, estabas helada del miedo de lo que te podrían hacer, ni siquiera podías correr ya que había un montón de hombres rodeándote.
- (Carajo, carajo...Dios salvame de es- - No acabaste de hablar ya que un hombre te empujó con fuerza al suelo. - ¡GHHH! -
Caiste al suelo manchandote toda tu capucha y rostro de tierra y rasguños, te quejaste de dolor mientras lágrimas caían por tus ojos.
Con la fuerza que te quedaba trataste de levantarte pero de nuevo ese hombre te tiro al suelo haciendo que sueltes otro grito, después te agarro del cabello y te levanto.
- ¡No le hagas daño! ¿¡Y si es una mujer de verdad? ¡Es una deidad! - Un hombre hablo algo alterado al ver tu estado deporable.
- Si fuera una mujer, no hubiera dejado inconsciente a ese tipo! ¡Las mujeres no tienen fuerza, eso dicen los malditos libros! - Rechisto apretando tu cabello con fuerza, más lágrimas salieron de tus ahora débiles y cristalizados ojos. - ¡Además, estaba viajando con el zorro ese! ¿¡Y si es una bruja?!?! -
Ante eso todos se quedaron callados, posiblemente lo que decía aquel señor era real, pues ellos creían más en los libros, los cuales decían que las mujeres no tenían fuerza, eran inocentes, bellas, y sobretodo, "sumisas" que patético.
No pudiste evitar temblar más, trataste de soltarte pero aquel hombre te estampó más contra al suelo.
- ¿¡Que hacemos con ella?! - Les pregunto a todos mientras tomaba una de tus manos y la apretaba haciendote quejarte más.
- ¡¿Que importa que sea una bruja?! ¡Tenemos que aprovechar la oportunidad y reproducirnos con ella para que cree vida nueva! - Agregó uno de los hombres viendote con malicia.
Tu te sentiste bastante asqueada mientras aún tratabas de soltarte con desesperación, te temblaba todo el cuerpo y estabas aterrada, no querías que te usaran para la reproducción.
- ¡¡AYUDAME, KYOJURO POR FAVOR! - Empezaste a gritar desesperada, el hombre río burlon.
- ¡Querida, aquí no hay ninguna mujer que te ayude! - Te cambio de posición, ahora estabas debajo de el. - Nos servirás para crear vida! Así que más te vale que no te resistas si no- -
Aquel señor no acabo de hablar y de repente todas las personas Gritaron del miedo, tu no entendías hasta que de repente viste sangre salpicar al lado tuyo y sentiste como algo cayó encima de ti, notaste que era el cuerpo del hombre sin cabeza.
Ante eso rapidamente gritaste del horror y te lo apartaste con asco, miraste a todos los hombres y estos ati te veían con miedo.
- Seguro ella lo mato! - Hablo con miedo uno.
- ¡Si es una bruja, tenemos que matarla! - Agregó otro con una hacha.
Y así fue que empezaron a caminar hacia ti con furia, tu retrocediste más hasta que chocaste con la pared, todo tu cuerpo estaba cubierto de sangre al igual que tu capucha.
Ya no tenias a ningún lado donde correr, la desesperación y miedo te gobernó, no querías morir, querías volver a tu mundo, volver a abrazar a tu madre...
- ¡No, no soy ninguna bruja! Por favor! - Rogaste con tus manos tapándote como un escudo a pesar de saber que eso no funcionaria.
Sin hacerte caso siguieron caminando, hasta que, de repente, Kyojuro hizo su aparición, aterrizo justo frente a ti en 4 patas protegiéndote, miró a todos con una mirada amenazante, tu lo miraste y notaste que ahora tenía 9 colas de zorro, las cuales te cubrían a ti.
- Aléjense de ella...- Gruñó entre dientes mientras los miraba a todos con aquellos ojos que demostraban su hambre. - Y así los dejaré vivos...a algunos. -
Obviamente mentia, no dejaria escapar este festín que se presentaba frente a sus ojos.
Al ver a aquel demonio, todos los hombres presentes Gritaron del horror y la mayoría comenzó a correr, pero algunos empezaron a atacarlo con hachas, arcos, etc.
- Genial, esta noche comeré, y mucho..... - El demonio híbrido sonrió mostrando sus dientes.
Después, en un parpadeo desapareció y ahora estaba peleando con aquellos hombres, los cuales la mayoría estaban muertos ya.
Tu te quedaste helada, completamente aterrada ante aquella escena, tanto que sin darte cuenta, comenzaste a correr huyendo de ahí.
Solo querías volver a tu mundo....
- (Vamos T/N..Tienes que encontrar una salida...) - Pensaste sin dejar de correr.
Tomaste el gorro de tu capucha entre tus manos y te la pusiste de nuevo en la cabeza al igual que la venda, ahora también parecías hombre entre todos los cuales corrían. Se te facilitaría escapar.
Pronto, sentiste que alguien te golpeó accidentalmente tirandote al suelo, soltaste un grito de dolor antes de intentar levantarte pero fuiste pisoteada por varios hombres al no verte, todos estaban concentrados en escapar.
Ese dolor no lo pudiste aguantar, y, aún queriendo salir de ahí, tu vista se comenzó a nublar y ahora no podías moverte, solo ver mientras aún sentías las pisadas de los demás sobre ti.
- ¡Nezuk, un chico está ahí! ¡Tenemos que ayudarlo! - Eso escuchaste antes de caer inconsciente
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El bosque de los demonios | Pilares, Lunas superiores
FanfictionEntras a un trabajo en una librería, pero, apenas en el primer día ves un libro algo extraño, pues no tiene autor, este se titula "el bosque de los demonios" no le tomas mucha importancia hasta que te comienzan a pasar cosas extrañas, y, de un día a...