Una sangrienta batalla

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Decidieron ir a Estados unidos, ya que él tenía mayor acceso marítimo hacia Europa. Intentaron mantener esta faceta hasta llegar a suelo francés, donde empezarían su intervención dirigiéndose a la primera línea, a las trincheras francesas, el frente occidental, Verdún.

Llegaron junto a un gran ejército de soldados, lo que hizo que tuvieran que camuflarse, guardando sus armas de momento, también obligándolos a seguir órdenes para poder entrar sin problemas al combate de Vanguardia y mantener la Triple Ente como aliados.

De esta forma fueron separados a distintos grupos. Realnost fue con los tanques, como mecánico de un Mark V junto a un pequeño grupo. Aisling, formaría parte de un grupo de médicos en combate, escoltados por los tanques y varios grupos de trincheras, donde irían Amery y Nightmare.

Apenas fueron distribuidos, fueron enviados con el grupo de Vanguardia que ya estaba en pleno combate.

Por el camino. Amery sentía la guerra, la sentía en su pecho, una presión que hacía que respirara con dificultad, sabía que ese combate estaba siendo feroz y crudo sin siquiera verlo, pero no hacía falta, solo con escuchar las constantes explosiones, los numerosos gritos, los interminables disparos te podías hacer una idea de lo que estaban pasando.

Entraron en combate en media masacre usando las armas de fuego, dispararon sin precisión hacia los enemigos de sus aliados, avanzando a paso lento, pero al pendiente de todo lo que pasaba. Fueron usando sus poderes de forma cautelosa aprovechando la confusión para no alertar a nadie, también manteniendo los roles anteriormente acordados por ellos. Vigilaban el entorno en busca de los relegados, que esperaban que hicieran acto de presencia como se tenía supuesto.

Pero las explosiones, el barro, los disparos, el fuego, los estallidos y gritos enérgicos de guerra encendieron una llama dentro de ellos, un sentimiento, el cual los avivó. Estaban totalmente inertes en la batalla. Disparan para acá, disparaban para allá, se movían, cubrían, ayudaban, arreglaban. Hacían sus trabajos con la mayor determinación posible. No dejaban ceder la posición, no iban a perder esa batalla, pero olvidaron por qué estaban ahí en primer lugar.

Ahora simplemente luchaban, arrebataban vidas sin el mayor propósito, ni siquiera sabían porque estos dos bandos luchaban como para darle sentido a sus acciones, pero no querían perder, al menos los 3 mayores.

Aisling estaba hasta atrás, ayudando a las pocas personas que podía ya que el grupo que se suponía que los escoltaba se había ido al frente, dejándolos a merced. Pero, aun así, ella mantuvo el plan original, protegió a las personas y vigilaba si llegaban los relegados como habían acordado. Fue la única que cumplió su papel... Y fue la única de ellos que salió ilesa de esa batalla.

Nightmare, Amery y Realnost se adelantaron al ver retroceder al enemigo, continuando su ofensiva ferozmente confiados en que ganarían.

Amery avanzaba por el centro junto a Nightmare, las armaduras que tenían no solo servían para los golpes, era capaz de aguantar las balas y eso los beneficiaba en su temeridad. Pero no iban solos, Realnost junto a un grupo de tanques cubrían su andar evitando que los enemigos los bordearan, también acabando con los grandes grupos con su impresionante poder destructivo.

Lograron con gran fulgor conseguir el terreno dispuesto por el enemigo, pero solo hizo que el enemigo tomara medidas. Ahí, sacaron la artillería.

En plena reorganización de tropas en la retaguardia, cuando se podía decir que estaba llegando la calma, Aisling levantó la mirada al cielo y lo que vio la aterró a tal punto que lo único que pensó fue en gritar, intentar avisarles a los otros.

Al escuchar los gritos, los del frente se detuvieron un momento para apreciar el cielo, viendo como decenas de líneas negras cruzaban en aire, curveaban en lo más alto y empezaban a descender, justo en su dirección.

Amery intentó replegarlos todos para evitar que fueran alcanzados, pero ni siquiera pudo hablar, las explosiones suprimieron sus intenciones creando el mayor muro de combustiones que habían visto, mismo que destruyó todo lo que alcanzó, mismo que hizo temblar la tierra. Mismo que hizo que Aisling viera como todos sus "Hermanos" fueran consumidos por el humo.

Los que quedaron detrás del ataque estaban viendo cómo se elevada y disipaba lentamente, expectantes, al parecer el ataque había sido eficiente y había acabado con todos, bueno, casi todos fueron aniquilados.

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