Despierto luego de unas horas.
Dormir con una barriga de ocho meses es muy incómodo.
─ Jade, Khadija está abajo ─ la voz de una de las empleadas que me habla en árabe llega a mis oídos.
─ Dile que ya bajo ─ le respondo y busco mis sandalias debajo de la cama.
En cuanto las encuentro, me las coloco con dificultad y salgo de mi cuarto rumbo a la primera planta de la casa de mi tío.
Ahora se me dificulta un poco bajar escaleras por el embarazo.
Mientras bajo, la imagen de Said llega a mis ojos. Tiene un traje color negro y una corbata roja a juego con una camisa blanca que resalta mucho su piel blanca y sus enigmáticos ojos verdes.
Said ha venido con mi hija.
Su mirada va hacia mi vientre y desvía luego la mirada. Es la primera vez que lo veo, luego de que nos enteramos que estaba embarazada. Este podría ser su hijo, pero todo mi alrededor piensa que es de mi esposo.
Solo yo tengo mis sospechas...
Aunque este hijo también podría ser de Lucas.
Mi hija corre a mi lado cuando termino de bajar las escaleras. Ella acaricia mi vientre y me abraza. Khadija, ha entendido con el paso de los meses que nunca será desplazada por el bebé que llevo en mi vientre. Yo los amo a ambos.
─ Te ves tan bonita, ommi – dice mi hija.
Ahora con mi avanzado embarazo me es muy difícil darle todos los mimos que quisiera a mi princesa.
─Tu cada día estas más hermosa, mi vida ─ le digo agarrándole los cachetes. Khadija ya es todo una señorita y sus formas femeninas se han acentuado mucho durante este tiempo.
─ Hola, Jade – saluda Said. Sus intensos ojos verdes me miran heridos.
Siempre fui la caja de pandora en la vida de este hombre.
─ Hola, Said ─ contesto a su saludo ─ ¿Cómo has estado?
Las palabras salen atropelladas de mis labios.
─ Bien – dice, aunque el tono de su voz miente. – Veo que tu bebé pronto nacerá.
Herí a Said tantas veces y él no se lo merecía. Ahora una punzada de dolor llega a mí cuando veo sus bellos ojos verdes tristes y apagados.
Mi bebé empieza a patear y mi hija lo nota.
─ Está moviéndose, ommi ─ me dice mi princesa y pone su mano en mi vientre.
No es la primera vez que Khadija toca mi vientre, pero cada vez que lo hace, tiene el mismo tono de emoción.
Aunque dolía menos cuando mi vientre era más pequeño, ahora las patadas muchas veces son dolorosas. Siento un poco de dolor y hago una mueca mientras trato de sentarme.
─ ¿Estás bien, Jade? – Said me habla preocupado, camina hacia mí y me ayuda a sentarme poniendo un cojín detrás de mi espalda.
─ Gracias – musito.
La mano de Said va hacia mi vientre y siento un escalofrió recorrerme el cuerpo entero.
─ Tranquilo – pronuncia con voz calmada mi ex esposo y siento como el bebé empieza a calmarse y a dejar de patearme.
El dolor que sentía disminuye.
─ Lo siento – murmura Said, quitando la mano de mi vientre.
─ Ya se ha tranquilizado ─ comunico y alzo la mirada encontrándome con esos hermosos ojos verdes heridos por mi culpa.
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Una última oportunidad
FanfictionLuego del tan ansiado final feliz que siempre persiguió, Jade se casó con Lucas, su primer y único amor. El matrimonio parecía de cuento de hadas los primeros meses, pero.. ¿Qué pasa cuando el amor no se alimenta? ¿Qué pasa cuando la pasión se agota...