¿Ángel o Nigromancia? (+)

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8:30 p

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8:30 p.m.

La tarde transcurrió con normalidad y la apacible actividad en el gran teatro, había llegado a su fin hace una hora atrás. Actualmente, estos dos apuestos jóvenes se encontraban en un restaurante al aire libre saciando su hambre bajo las estrellas, escuchando la suave balada del local y los sonidos de la naturaleza. Esta tarde, había sido completamente para ellos. Parecía sacada de una película romántica de los años sesenta...

Dónde se muestra el interés mutuo.
Interés empírico.
Interés del que ya casi no se ve en estos días...

Pero ellos, comenzaban a ser el vivo ejemplo, de que
aún, se puede tener algo de esperanza en el amor. Que quizás aún existen quienes valoran este sentimiento.

-Esta ha sido una de las mejores tardes de mi vida. -comenta Felix, observando la hermosa noche y el paisaje que les rodeaba.

Al no escuchar respuesta por parte del contrario, coloca su mirada en él, y se percata de que este ya le observaba con gran admiración. Al instante, sus pecosas mejillas se tornan rosa intenso.

-¿Estás bien? -pregunta Felix, notando la profundidad de su ojeada.

-Lo siento, es que... no puedo dejar de observarte. Creo que... el resplandor del cielo estrellado está haciendo que tus ojos brillen más de lo normal, haciéndote ver aún más atrayente Felix.

-Oh... -sonríe cabizbajo. -¿Eso crees? -le observa.

-Fielmente.

-¿Y mis ojeras? ¿No te son un problema?

Cuánto complejo con sus ojeras....

-¿Por qué lo serían?

-Dañan mi rostro.

-...¿Quieres saber cómo las veo yo? pozos profundos de océano gris, dónde la corriente de sus aguas me atraen con frenesí.

La sonrisa del pecoso se desvanece. Ahora le observa un tanto sorprendido. Pero no, no era en un mal sentido... es que simplemente, se le hacía tan difícil creer, que alguien fuera capaz de encontrar belleza en aquellas manchas en sus ojos. Su corazón ha dado un brinco, y lentamente la tímida sonrisa que hace unos segundos había desaparecido, regresa a su semblante.

-Jamás pensé que alguien fuera capaz de decirme algo como eso... Son defectos muy notorios en mi y...

-Yo solo veo encantos Lee Felix.

-Imposible.

-Oye, con ellos, no logras más que avivar mis deseos. ¿Qué acaso no entiendes que me has fascinado junto a esos detalles? La naturaleza de tu cuerpo y facciones me han conquistado. Deja de verlos como defectos, no lo son. Además, siempre he dicho y pensado que son la prueba misma de tus luchas y de lo valiente y fuerte que has sido.

-Hyunjin... -jadea emocionado por sus palabras.

Entonces, ¿esta era la imagen que tenía para los ojos del pelinegro?
Wow...

Entre versos de terciopelo. (Hyunlix)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora