Tantos poemas callados, tantos versos enterrados por miedo a amar, por miedo a dañar que a veces me pregunto si mis lagrimas no son la tinta de heridas extintas. Tantas noches solo por miedo a ilusionarme, por miedo a reír y abrazar, tanto dolor por miedo a creer que no tenía derecho a amar.
Ser herido, cadáver y ejecutor. Ser nube, tormenta y calma. Callar sentimientos y gritar mentiras, muerto en vida buscando una mentira que no era mía, buscando una vida que no me correspondía. Que derecho tengo a amar si mis poemas son las lagrimas de mi silencio, si me paso la vida callado.
ESTÁS LEYENDO
El Diario de Gato
PoetryHuye, corre, sumérgete en las profundidades, alza el vuelo como un ave, sobrevive al desierto o perece ante el, muere y renace ante el mismísimo apocalipsis. Ama, odia, crea y destruye, pero no te pares, solo vive, la oscuridad se acerca y viene a p...