Arrepentimientos

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¿Qué es la justicia?

¿Para quién hacemos justicia?

Son dos preguntas que Chizome Akaguro se preguntó la noche que algo dentro de él se rompió, cuando entendió que no había remedio para esta sociedad y si querías justicia, debías de obtenerla con tus propias manos. Y así lo hizo, esa sensación oh tan deliciosa al probar la sangre de aquellos que morían por su filo, no sólo la sangre era exquisita sino que la satisfacción de matar a un indigno de llamarse héroe, fue todo lo que se sentía correcto para él.

Y eso lo embriagó.

Un héroe que se encargaba de asesinar por bien de recibir un cheque con cuantiosos números, es un farsante. Héroes que claman que bajo su guardia nadie morirá pero al primer instante decide salvar aquellos con mayor influencia, hipócritas. Esta sociedad los envenó por dentro y ya no tienen salvación, aquellos que cometen un error, no cambiarán. Porque el ser humano esta condenado a repetir el mismo error.

La ira y la demencia de Chizome Akaguro fue tal que al blandir su espada y degollar un cuerpo, sintió paz. Sentía que estaba cumpliendo con su propósito en esta vida.

一¡No eres un mártir, Stain!

Una niña que cayó del cielo montada sobre un Nomu para rescatar a un civil, Midoriya Izuku. La niña que amenazó con un cuchillo noches atrás, observó la escena de un crimen y Stain se encargó de hacer sufrir al héroe farsante. ¿Por qué no mató a la niña en ese momento? No le dió importancia ya que su misión era otra, era más importante darle caza a los impostores y ahora, otra impostora aparece ¿¡Cuántos más se pondrán en el camino del Asesino de Héroes!?

Stain blandió su cuchillo y trató de cortar a la niña, pero fue sorprendido por su rapidez para esquivar ¿Era también una velocista? No, era algo más. La peliverde pegó un salto alto, lejos del alcance de Stain pero luego sintió una puñetazo en su pómulo que lo hizo retroceder. La chica enseguida corrió hacia los otros farsantes para auxiliarlos, el cinturón rojo de la peliverde tenía equipamiento de primeros auxilios, se dirigió al niño velocista exclamando con ira contenida.

一¿¡No te dijimos acaso que podías hablar con nosotras si algo pasaba!? 一Stain se detuvo, esta niña... ¿No iba a seguir atacando? Es evidente que es fuerte, pero priorizo la vida de los heridos. Hacía tiempo que no veía a alguien así, el último héroe que sí era digno era...

All Might.

Entonces la sociedad no estaba condenada, sí hay alguien que vale la pena.

一Midoriya... ¿Q-Qué haces aquí? 一tartamudeó el chico de lentes, le costaba hablar debido al shock.

一¿Que qué hago aquí? ¡Vine a salvarte, tonto!

一No tienes porqué hacerlo, no pongas tu vida en riesgo... no cuando yo mismo me lo busqué 一sollozó el farsante.

Stain se complació de escuchar eso, finalmente la maldad que yace en ese niño está lo suficientemente débil y no se opone al castigo que le espera; le facilitará el trabajo. Blandió su cuchillo una vez más con el objetivo de matar a ese tal Ingenium.

一No desperdicies más tu tiempo hablando con ese impostor 一habló Stain con sus ojos rojos carmesí mirándolos fijamente, la mirada de un asesino que no siente ni la más pizca de misericordia por aquellos que no son merecedores de una capa.一 Midoriya Izuku, tal vez tu vales la pena después de todo.

La niña se vió visiblemente perturbada, algo en los ojos de Stain le provocaron miedo. Se dió cuenta al fin que a quien tiene delante no es un villano de cuarta, aficionado. Tenían frente a ellos a un asesino en serie, un auténtico villano. Midoriya pasó saliva y se levantó.

My Heroine Academia IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora