—Tal vez deberías ir a casa —dijo Joshua.
—¿Qué? ¿Por qué? —Vernon lo miró ¿Pasaba algo?
—Porque estás demasiado nervioso —Puso sus manos en los hombros de Vernon—. Todo está bien.
—¿Cómo lo sabes?
—Porque ya hubiese pasado algo.
Vernon miró a Joshua, estaba impasible, entonces tenía que ser cierto ¿No? Pero no podía evitar sentir que lo estaban siguiendo, observando.
—¿Estás seguro? —preguntó Vernon.
—No —respondió Josh en un suspiro—. Pero no puedo dejar que me atormente, tengo que trabajar.
Vernon quería responder, seguía con dudas, pero llegaron más personas y comenzaron a trabajar.
Cuando Joshua se fue, Vernon se puso aún más nervioso, si pasaba algo él podía ayudarlo, pero se fue sin más, como siempre.
Los minutos pasaban y Boo no aparecía, Vernon se estaba preocupando, en exceso, tenía que calmarse. Comenzó a ordenar apenas se fue el último cliente y mientras estaba barriendo llegó Seungkwan con rostro afligido.
—Pasó algo —No era pregunta.
—No —suspiró, sentándose en la silla más cercana—. Tal vez.
—¿Qué? —Vernon se acercó.
—Jeonghan me avisó que le respondieron, que revisarán mi caso —Se apoyó en el respaldo—. Que puede ser que alguien venga en cualquier momento.
Eso era lo que Vernon más temía.
—¿Pero no hay nada que se pueda hacer? —Se sentó frente a Boo—. ¿Cómo puedo afirmar que no diré nada?
—No lo sé.
Ambos se quedaron en silencio, sin saber qué decir. Vernon estaba con ganas de salir corriendo, pero llevando a Kwan con él ¿Cómo podía ser que en tan poco tiempo le llegara a importar tanto? ¿Por qué? Odiaba estos momentos así, la presión.
Vernon se levantó y fue a preparar café, Boo lo miró incrédulo.
—¿En serio? ¿Café? —Le preguntó Seungkwan, intentó no hacerle caso, sentándose frente a él nuevamente y entregándole su café.
—Me relaja hacer café —Más o menos—. Deberías tomar.
Boo miró el vaso y luego de suspirar lo tomó y bebió un sorbo.
—¿Ayuda? —preguntó Vernon.
—Algo —Seungkwan volvió a tomar un poco más de café—. Gracias.
Vernon tenía dudas, demasiadas, había mucho por lo que preocuparse, pero su mente solo iba a un lugar, anoche ¿En verdad lo había besado?
Apoyó la frente contra la mesa, a ver si el frío de la madera lo despejaba, tenía que pensar en cosas más importantes, aunque eso sí lo era ¿Por qué?
—¿Estás bien? —Boo levantó su silla y la puso a un lado, para quedar cerca de Vernon, quien puso su cabeza de lado, para mirarlo.
—Claro —dijo con una sonrisa.
—No mientas —Tocó su nariz con un dedo y se acercó, apoyando su mentón en la mesa, quedando su rostro a escasos centímetros, otra vez el corazón de Vernon se detuvo un segundo—. Creo que debo disculparme.
—¿Por qué? —Vernon quería protestar, pero no quería alejarse de Boo, quería tenerlo así, cerca.
—Por todo —Boo se incorporó y Vernon hizo lo mismo, apoyando su espalda en el respaldo de la silla, creando un espacio entre ellos, un vacío.
—No hay nada malo.
—¿Nada?
—Bueno, casi nada —Vernon se encogió de hombros, no podía decirle a Boo lo aterrado que estaba.
—Hansol —Seungkwan dijo y Vernon sintió algo, pero esta vez fue más frío, intentó recordar la última vez que lo escuchó decir su nombre—. ¿Vernon? ¿Me estás escuchando?
—Fuerte y claro —Boo frunció el ceño, cruzándose de brazos.
—No sé qué pienses, pero con todo lo que está pasando, pensé que estarías enojado conmigo.
—¿Por qué?
—Por mi culpa estás corriendo riesgo, no sé qué te pueda pasar si —Hizo una pausa—. No quiero que te pase nada malo.
—Todo irá bien —Vernon recordó las palabras de Joshua.
—Ojalá fuera así.
—Lo puede ser —Quería ser optimista, en este caso debía ser el optimista, porque Boo parecía cada vez más abatido.
—No lo creo, no sabes cómo son ellos, nosotros...
—Tú eres bueno —Vernon trató de tomar su mano para animarlo, pero Boo se alejó.
—No lo soy, si lo fuera, no te habría metido en esto —Se puso de pie—. Si no fuera egoísta, no estarías en peligro.
—¿Egoísta? —Vernon se quedó mirándolo—. No eres egoísta —¿Cómo había llegado a eso?—. Parece que estás más preocupado por mí que por ti, además yo fui quien adivinó.
Boo puso los ojos en blanco.
—No lo entenderías —comenzó a dar vueltas por la cafetería.
—Ayúdame a entender —Vernon se levantó, no le estaba gustando a donde esta yendo esta conversación.
—No, no lo entenderías, nunca —Boo se alejó.
—¿Por qué no? —Vernon se puso frente a él, para no dejar que lo evadiera—. Dímelo.
—Porque —Boo bajó la vista, estaba agitado, luego levantó la cabeza, mirándolo fijamente y su rostro se suavizó al tiempo que se acercaba para besarlo.
Vernon lo vio venir, pudo haberlo detenido, pero no lo hizo, no estaba seguro de nada en este punto, solo que quería ese beso.
Boo puso sus manos en sus mejillas y lo besó suavemente, tal cual lo había hecho aquella noche, esto lo confirmaba, pero a Vernon lo dejaba con mil dudas.
Seungkwan se separó y lo soltó, dejándolo en una especie de trance.
—Porque me gustas —respondió a la pregunta anterior, a las dudas de Vernon que reflejaba su rostro, a todo.
Hansol no supo que responder, Boo se quedó congelado unos segundos hasta que parpadeó rápidamente y al ver lo que hizo se fue sin mirar atrás, dejando a Vernon ahí, como una estatua, sin saber qué hacer.
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Bitter & Sweet (Verkwan)
FanfictionVernon trabaja en una cafetería desde hace poco más de un año, ya que por ciertos motivos tuvo que dejar de estudiar en la universidad. Ahora su vida se compone de pedidos de café, olor a café y beber café, obviamente. Una noche aparece un chico nue...