Una boda sin amor. [ZoroxRobin]

Capítulo 19: Promesa.

Capítulo 19: Promesa.

Roronoa Zoro.

Papá había muerto.

Había muerto, y yo lo había admitido, lo había dicho en voz alta por primera vez y eso me había generado una amarga sensación en el estómago que no se quitaba.

¿Realmente había pasado eso? Bueno, esa ni siquiera era la pregunta que debía hacerme en realidad, por que sí, claro que había pasado, la verdadera pregunta era siguiente:

¿Alguna vez había pensando en qué pasaría cuando falleciera alguno de ellos? Claro que no.

Jamás había cruzado por mi mente ese hecho, era algo que ni siquiera había querido imaginar o jamás me había nacido creerlo, por que a pesar de que eran un terror como padres, yo siempre había querido creer que iban a reformarse y terminar siendo buenas personas.

Oh bueno, es que eran buenas personas, lo que sucedía es que eran malos padres.

Sentí unas manos peinar mi cabello con suavidad hacia atrás y levanté la vista para encontrarme con un rostro confundido y una mirada azul que me hizo olvidar un poco todo el nivel de dolor que estaba experimentando.

En su rostro podía ver la confusión de no saber qué hacer o decir, sabía que estaba un poco confundida pero es que demonios, hasta yo estaba confundido.

Jamás habria creído que una muerte me afectara tanto después de la muerte de kuina, por que ella había marcado un antes y un después en mi vida, su fallecimiento había sido esa pequeña grieta en mi vida que había crecido hasta que me destrozó por completo y me dio una gran lección.

Lo que más quieres es lo que más daño te hará.

Tal vez ella jamás quiso hacerme daño, ella no sabia que iba a morir y yo jamás habría podido adivinarlo.

Y justo ahora, después de que papá hubiese querido arreglar todo... Se había ido.

Recordar esta mañana me daba mucha impotencia y rabia, por que yo le había dicho que podía morir y no iba a importarme, por que él había muerto con esa idea.

Había muerto con la idea de que lo odiaba.

****
Robin estaba siendo una salvación para mi en estos momentos, yo me sentía idiota, me sentía estúpido, me sentía un inservible total por que no alcanzaba a hacer nada ni a razonar en lo absoluto.

Ella se había movido para todos los procesos que debíamos seguir, había adoptado mi teléfono como suyo y había hecho todos los movimientos correspondientes respecto a mi padre.

Había ido a reconocer el cuerpo, se había encargado de hacer lo movimientos necesarios en la funeraria, había visto el movimiento del vehículo y había iniciado el movimiento en contra del conductor del vehiculo que había conducido en dirección contraria.

En contra del vehículo que lo había matado.

Desconocía del todo la forma del accidente, no había querido ver los detalles pero al parecer el otro conductor, quien por cierto llevaba un trailer, había invadido su carril al rebasar a otro trailer.

Y se había llevado a mi padre entre las llantas.

Hasta ahí quise saber, no quise saber ni preguntar nada de detalles, quería que en mi mente quedara la idea de que había muerto al instante y que no había sufrido en lo absoluto, no quería imaginarlo sufriendo enmedio de un accidente.

Había durado horas con las vías paralizadas por el accidente y habían volado las noticias, seguramente los medios ya se habían enterado.

Agradecía no tener el teléfono a la mano.