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The Sound Of Agapantos.

Agapantos: compuesto por los vocablos griegos agape (amor) y anthos (flor), por lo que simbolizan el amor

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Agapantos: compuesto por los vocablos griegos agape (amor) y anthos (flor), por lo que simbolizan el amor.

Despertó.

No obstante, sólo encontró oscuridad, aun no despegaba sus párpados y lo único que sentía era el suelo duro en su espalda. En realidad, no era molesto. Puede que fuera la razón para no abrir los ojos. Se encontraba lo bastante a gusto en aquella compacta superficie como para hacer otra cosa.

O quizá no quería abrirlos por otra razón.

Tan asustada incluso al pensarlo.

El perfume de los agapantos aterrizó en su olfato. Bebió la ternura de su bálsamo con leves aspiraciones casi inconscientes y del mismo modo intentó, sin abrir los ojos, atrapar una de las flores. Su mano izquierda cayó sobre un pétalo, suave y poroso como la tierra en la que se fecunda la planta. Desconfiada acarició su textura, imaginando el color lila y cerúleo característico de la bella flor. Mientras lo hacía sintió una lágrima bajando desde el rabillo de su ojo hasta su oreja.

¿Por qué? ¿Por qué estaba tan temerosa de abrir los ojos?

No solo el olor de los agapantos inhaló, sino también el de otras hierbas y flores las cuales no sabía su nombre. Sin embargo, no había otra flor que le produjera tanta agitación como esa.

A lo lejos, el silbido rítmico de los pájaros la acunaba. Definitivamente no quería despertar, porque aunque por sus sentidos previera el cálido y sabroso paisaje, bien adentro suyo sabía que no era correcto y posiblemente alucinaba. En cambio, si sólo permanecía con sus ojos cerrados, ciega al panorama, hallaría una calma inmutable y eterna.

¿Por qué? Volvió a preguntarse con una voz insonora, amortiguada en las cuatro paredes de su cráneo. ¿Por qué estoy aquí? ¿Por qué no puedo moverme?

Piensa, piensa e intenta hacer algo.

¿Por qué los agapantos, por qué no otra flor?

Mikasa...

"Mikasa, tenemos que hacer algo".

¿Cuánto tiempo llevas así, en este estado?

¿Por qué este dolor de cabeza?

"¡Mikasa!"

"¡Mikasa!"

"Necesitamos tu ayuda, la vida de millones está en nuestras manos".

"¡Mikasa!"

"¡Mikasa, tenemos que matar a Eren!"

El efluvio de los agapantos cesó. En su lugar, un recio perfume metálico subyugó al tierno de las flores. Sintió que los pétalos se desprendían de sus pedúnculos. Morían, morían, morían.

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