El Dragokin [Ramcisco]

×Capitulo LV×

— ¿Cómo era?

De pupilas carmesí, pestañas, cejas y cabello blanco casi plateado.
Algo que nunca he vuelto a ver... —sonrió mientras se sonrojaba.

— Alto... Dijiste que me ibas a contar sobre mi padre... —empezó pensar con cuidado los detalles.

Sí. Tú padre era ese humano~

— ¿QUÉ? —soltó un grito tan fuerte que asustó a los animales de alrededor.

Esa noticia le había movido el mundo. Pero también le había hecho ver muchas cosas que nunca antes había pensado.

— No puedo creer que... ¡Pero tú!... —apretó su cabeza tratando de comprender— ¡Tú me dijiste que estar con humanos solo trae desgracias o una cosa así, noe acuerdo las palabras exactas pero lo recuerdo! —pidió explicaciones el joven Dragokin.

Tienes razón. Lo dije, pero no es del todo mentira, ¿sabes cuán destructivo es un dragón por instinto? No por nada se nos llama bestias mágicas aún si nos vemos como humanos al ser Dragokin.
Además, no me has dejado continuar con mi historia. —dijo calmada transmitiendo seguridad al joven Dragokin que aceptó con la cabeza dejando a la mayor seguir su historia.

[....→_→☆AÑOS ATRÁS☆←_←....]

Amethyst: Ay... Me duele todo... —soltó un quejido sintiéndose mal ante cada cosa que iba pasándole.

— ¿Estás bien? —el pequeño "Demonio" extendió su ayuda a la pequeña Dragón que estaba cubierta de lodo— Parece que la has pasado muy mal. —se agachó enfrente de la reptil tratando de ayudar a quitarle el lodo de la cara pero esta retrocedió— ¿También te doy miedo? No te preocupes. No soy un verdadero demonio. —sonrió ladeando su rostro mientras mechones de su cabello cubrían u de sus ojos que brillaban ante el sol.

Amethyst: Y-o no me asusto de humanos... —habló esperando que el humano huyera.

— ¡Hablas el mismo idioma que yo! ¡Qué bien! —pero contra todo pronóstico de la pequeña Dragón, este humano parecía faltarle un tornillo.

Amethyst: ¿Qué te pasa?... Soy un dragón, ¿sabes?

— Yo soy una de las encarnaciones de las almas del primer humano. Me llamo Lumine. —extendió su mano saludando.