¿Quién eres? __//YURI OMEGAVERSE//

Capítulo 7

Bombas de emociones

Nube

Si tuviera que pensar en una palabra para describir como se sentía en ese momento sería... sería... no sabía cual sería pero definitivamente algo parecido a fuera de su lugar pero en un mal sentido; se encontraba embobada mirando el marcador, esos números marcados en rojo y que se le inyectaban a través de la retina, había perdido, no es que fuera una novedad, porque hace unos instantes su destinada les estaba dando la tunda de su vida y estaba bastante claro que era Gaia la que tenía el total control del partido, pero aun así no podía evitar sentirse desesperada y frustrada y rabiosa y dolida y con un poco de miedo a la respuesta que tendrá su entrenador; así que antes de poder verla, cogió su mochila, espero un poco a que los aplausos cedieran por parte del público y los vítores entre las compañeras de Godness y se acercó a ver a Gaia para hablar lo más rápido posible.

-Buenas, ehm... quería pedirte perdón, no era mi intención chocarte tan fuerte-se disculpó- espero no te haya hecho daño, ¿Estás bien? -

-Más te vale estar arrepentida, vaya forma de cargar, esto es baloncesto, no futbol americano- saltó Selene.

-Jajaja, tranqui Sele, y si, estoy bien, no te preocupes- la tranquilizó- Buen partido, por cierto.

-Si...gracias... bueno me voy ya, felicidades por la victoria- se despidió intentando sonar lo menos apurada posible.

Gaia se acercó agarrándola por la manga de la chaqueta -Recuerda que mañana es a las cinco en la puerta del centro comercial Alfa, espero "eso" con muchas ganas. – le susurró

Nube se puso la capucha de su equipación y salió del recinto tan rápido como pudo, intentado escabullirse entre la poca gente que había, una vez fuera, le dijo a su madre que prefería irse a casa andando, para poder relajarse y ponerse algo de su música en soledad, la música con lluvia o los mix de x juego relajante ten hours copilation for u to feel better, sin duda eran efectivos.

Tan rápido como su madre le dio permiso, ella salió hacía casa a paso rápido, necesitaba calmar la angustia en su alma, la angustia que le causaba pensar sobre el día siguiente, la quedada. No quería ir, no quería contar su secreto, no quería darle la posibilidad a Gaia de que jugara con ella y con su vida, si alguien se enteraba de ese secreto, si alguien escuchaba el más mínimo rumor, la vida sin duda se le vendría abajo, no podría salir, ni hacer amigos, ni respirar tranquila porque todo el mundo la miraría como lo que es en verdad, un bicho raro con un sueño estúpido que no se puede cumplir porque así lo decía la naturaleza y no existía magia o mago que pudiera cambiarlo, en parte se sentía estúpida al pensar en su deseo, todo a su alrededor le decía que había ganado la lotería en la vida, que tendría éxito solo por su naturaleza, pero ella no la aceptaba, no quería; y mientras le pegaba patadas a una roca en su camino solo podía pensar: "Como odio ser yo".

Gaia

Por otro lado Gaia se sentía gloriosa, rebosante de felicidad. -ahhh la vida así da gusto- soltaba aun tumbada en el suelo.

-Gaia, realmente no se como lo has hecho pero vaya forma de destrozarlas, eres sin duda una de las mejores jugadoras que he visto, deberías intentar ir a un torneo o algún sitio donde puedan reconocer tu verdadero talento- le animó una de sus compañeras de equipo.

-Tía, tienes que contarnos como has conseguido esa fuerza tan descomunal así de la nada, vamos dinos ¿Qué te ha pasado?- preguntó otra interesada.

-Sinceramente no tengo ni idea de como ha pasado, simplemente no podía permitirme perder y como me he dado cuenta de que estaba distrayéndome con otros pensamientos, he dejado que mi deseo de ganar tomara el control, así de simple- les contestaba mientras se ponía en pie.

Siguieron hablando un buen rato mientras se cambiaban para volver a casa, hasta que Sele y ella se despidieron para irse por su cuenta; una vez lejos, Sele cambió la conversación de manera un tanto brusca.

-Bueno, me vas a contar que ha pasado de verdad o vamos a seguir fingiendo que solo ha sido tu deseo de ganar- Le cortó mirándola de reojo - ¿Qué ha pasado de verdad en el campo Gaia?

-Jajajaja....jaja....ja...- trataba de fingir Gaia - por supuesto tu tenias que darte cuenta... ¿Sabes? creo...creo que esta empezando a hacer efecto Sele.

Esta solo la miraba mientras ella hacía una pausa, mirándose las manos mientras las abría y cerraba como comprobando su fuerza, cuando por fin levantó la cabeza dijo de forma asertiva. 

-La medicina está haciendo efecto al fin.- se decía así misma mientras que sentía su alegría hacerle cosquillas en el estomago.

-Se ha tomado su tiempo, eh ¿Cuánto dices que llevabas tomándola?- preguntó con curiosidad.

- Ya van casi ocho meses- sonreía Gaia.

Selene le pasó el brazo por encima del hombro, acercándola a ella para darle un abrazo desde el lado.

-¡AY MI GAIA QUE SE HACE MAYOR!- chilló con un claro tono de ironía- ¿QUE VOY A HACER? SE HACEN TAN GRANDES TAN RAPIDO BUAHH BUAHH.

-Jsjs párate tonta- dijo alejándola de ella y cubriéndose la cara con la capucha de su chaqueta- nos está empezando a mirar la gente.

-Jsjs ya no deberías ser tan vergonzosa ¿sabes? pero enserio tía, me alegro muchísimo de que esté empezando a funcionar- le dijo dándole un puñetazo en el hombro.- de nada.

¿De nada? ¿Cómo que de nada?- aspiró medio indignada medio en broma Gaia.

Siii, ya sabes, sin mi esa tonta alfa no se hubiera puesto aun más nerviosa lo que habría desembocando en que tus cositas internas no empezaran de funcionar- Sele se soplaba aire en las uñas con aires de muy digna.- así que eso, de nada.

-Ah, pero serás creída ¡ven aquí!- soltó Gaia mientras saltaba encima de su amiga para pasarle el puño por el pelo de forma amistosa.

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Aviso al avisado

En el próximo capitulo se vienen cositas pero saldrá en los primero días de diciembre ya que me viene otra racha de exámenes muy importantes, pero la espera merecerá la pena en mi opinión!  ;)

Nos vemos!!