Only For Me

Tu lo sabías

Los estudiantes hablaban entre sí, les habían dado la última hora, antes del receso, libre.

— Fushiguro, quería hablar contigo desde la mañana — la castaña se veía muy feliz.

— Hablar de que — respondió seco como siempre.

— Del fin de semana de que más — lo dijo como si fuera algo obvio — como te fue con Itadori, le envié mensajes pero no me contestó.

— Bueno...

— Te lo dijo verdad.

— ¿Decirme? — sabía a qué se refería, pero como ella lo sabía.

— Por favor Megumi, por la cara que pusiste es un si — brinco en su sitio — por fin, bueno en ese caso que no te de pena, ¡Felicid—

— ¡Tu lo sabías! — la corto tajante.

— Oh yo— no lo gusto la cara que puso su amigo en ese momento.

— Debí de haberlo sabido antes, para evitar todo eso.

— Como que evitar, acaso tú...— no era posible que saliera mal ella era la mejor cupido.

Pero la cara de Fushiguro le confirmaba.

— !No! no no, porque.

— Baja la voz, quieres que todo el salón te escuche — la regaño.

Volteo a todos los lados, no parecía nadie interesado en su conversión, es más algunos compañeros ya se salían.

Nobara le dijo que le contara todo, Megumi se negó, después de mucha insistencia le contó pero de forma muy  resumida.

— Crees que es por eso que faltó hoy y no contesta los mensajes — Kugisaki se desplomó.

Como pudo pasar eso, acaso no era buena cupido, aunque claro jamás averiguo sobre los sentimientos de Fushiguro.

— No lo sé.

— Ahora cómo vamos a saber de él, espero que mañana venga — debía de darle ánimos.

— Le puedo preguntar a Sukuna.

— Para que, para que te ignore como la otra vez.

Okay, tener que recodar eso no le agrado para nada, pero le hablo por mensaje así que con eso podría avanzar no. La juzgó en silencio.

— Como sea me voy, debo de hablar con Maki-sempai, por cierto no te conté lo que pasó el fin de semana.

— Porque no fuiste ese día.

— Ya tenía planes, pero te cuento más tarde que me estan esperando.

Vio a la castaña salir a toda prisa.

Fushiguro también se dirigió a la salida, grande fue su sorpresa encontrar a Sukuna en la puerta.

— Hola Megumi.

— Hola — que sorpresa.

— Em yo — aclaró su garganta — yo te venía a pedir disculpas por haberte ignorado estos días.

— ¡Oh!

— En verdad me comporte como un idiota.

— Está bien supongo que tenías tus razones.

— Aunque así fuera, no era la manera, no tengo excusas, de verdad perdón.

Fushiguro evitó sonreír, aunque de verdad quería hacerlo.

— Acepto tus disculpas, te perdono.

— Gracias — sonrió de lado — ahora que ya estamos bien ¿Quieres volver a la rutina? Ya sabes, encontrarnos en los recesos o salidas.