Only For Me

¡Detente de una vez!

Nobara buscó por todas partes, incluso obligó a Toge a acompañarla, pero ya tenía el regalo perfecto.

Había esperado tanto para esto, y por fin había llegado el día, hoy era el cumpleaños de Maki.

Se sentía desafortunada ya que uno de sus amigos no iba a estar, no le entendió muy bien a donde iría ni cuando iba a regresar, pero no pensaba desanimarse tanto por eso, aún le quedaba uno.

Se dirigió al lugar de encuentro, que era una pizzería, prefirieron hacer la reunión en la tarde.

Esperaba que fuera el mejor día, pero cuando llegó se llevó una sorpresa enorme.

— Que hace el ahí — señaló con el índice.

— Nobara llegaste — Maki se acerco — eres la única que faltaba.

— Porque está el hermano de Itadori aquí.

Estaban alejadas de la mesa.

— Con Fushiguro hablamos y quedamos en que venga.

— Pero porque.

— Ya se lo que piensas, pero puede haber cambiado por eso ahora está con Fushiguro no crees, confío en el.

— No me lo creo.

— No pasa nada, ven siéntate.

Se acercó a la mesa, si, solo faltaba ella, que tan temprano llegaron.

— La comida ya va a llegar.

Se sentó a lado de la Zenin.

No sé esperaba nada bueno con él presente, pero resultó bien, comieron tranquilos mientras todos hablaban.

Salieron riéndose y se encontraron con una cabina fotográfica.

— Hay que tomarnos fotos — Maki agarró a Yuta y lo llevo para adentro.

Después de tomarse unas fotos, los demás entraron.

— Sukuna, ¿No vas a entrar?

—No.

— Vamos todos — Maki lo jaló para que entre.

Con todos juntos, se tomaron varias fotos con diferentes poses.

Se repartieron las fotos, para que cada uno tenga una foto igual y una diferente.

— A dónde quieres ir Maki — habló Yuta.

— Oh, no lo sé.

— Se hizo de noche rápido — Toge miro el cielo ya oscuro.

Caminaron sin rumbo.

— ¿Podremos entrar ahí? — Nobara señaló un club nocturno.

— No creo — respondió Megumi.

— A menos que piensen que somos aptos.

— Pero como.

— Alguien que se vea como de esos sitios.

Todos estuvieron de acuerdo.

— Esperen, porque me están mirando a mi — Sukuna retrocedió.

— Eres perfecto — Toge lo agarró.

Y si, entraron de lo más rápido con Ryomen adelante.

El lugar estaba lleno, la música alta, con varias luces de diferentes colores.

— ¡No hay que separarnos mucho!

—Si.

Sukuna agarro la mano de Megumi, así no se separaría de el.