Eras una universitaria, qué buscaba un trabajo para poder solventar los gastos del último año de universidad ya que tus padres pasaban por una mala racha económica
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Tú y Konig tuvieron que regresar de aquel viaje, pues las responsabilidades y obligaciones de la oficina los estaban esperando. Iban en su camioneta camino a casa de Konig Ahí la señora rubí ya los estaba esperando, pues ella llegó de su viaje antes de lo previsto
-En camino a casa-
Konig: Tenemos mucho trabajo por hacer llegando *te hablaba mientras te agarraba la mano*
Tn: Asi es tengo que checar todas las facturas de esta semana, hubo mucho movimiento
Konig: Yo tengo una reunión con horangi
Tn: Quién es horangi bebé?
Konig: Horangi, el esposo de ana, la antigua jefa de tu mamá
Tn: Ahh si ya lo recordé, el señor que tiene los ojos rasgados, muy agradable que es
Konig: Bueno, el es socio y amigo mío, e invirtió en alguno de mis negocios y tengo que hablar algunas cosas con el
Tn: Yo llegaré directo a la oficina
Konig: Tomate el día libre amor, ve a casa y descansa
Tn: de verdad? Pero el trabajo?
Konig: el trabajo puede esperar, lo haces el lunes saliendo de la universidad, rubí estará en casa así que no podré estar mucho tiempo en la oficina, tal vez quiera que la lleve a cenar o quiera salir a algún lugar
Tn: oh en ese caso, me iré a casa llegando
Konig: Por cierto voy a transferirte lo del sueldo de esta semana y el bono por acompañarme ala junta
*te llega la transferencia a tu celular*
Tn: Konig esto es mucho, prácticamente no hice nada más que abrirte las piernas, *dijiste apenada*
Konig: jajaja ay muñeca, lleva a tu mamá a cenar o algo, o llévala de compras
Tn: Gracias Konig
Konig: Te veré el lunes entonces por la tarde, te portas bien!!
Tn: tu pórtate bien!
Konig: Yo estaré en casa con mi esposa, ella es mi candado para no hacer nada malo, no te preocupes *sonrie*
Tu semblante cambio al recordar que la señora rubí estaría en casa por un momento habías olvidado que regreso de su viaje, pero que era ese sentimiento que tenías en el pecho? No te agradaba que la Sra rubí estuviera de regreso en su casa, ridículamente te sentías celosa de la esposa de Konig, lo cual era raro, ya que desde un principio sabías de su compromiso. Konig se dio cuenta de tu cambio de actitud
Konig: Qué pasa bebé? *pregunto preocupado acariciando tu mejilla*
Tn: No... Nada... Esque te voy a extrañar
Konig: extrañarme? Jaja te veré el lunes exagerada
