Eras una universitaria, qué buscaba un trabajo para poder solventar los gastos del último año de universidad ya que tus padres pasaban por una mala racha económica
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Horangi te dejó en un hotel de mala muerte mientras seguías inconsciente.
Horangi: Konig va a matarme, Rebeca.
Rebeca: Deja de quejarte, ya lo hiciste de todos modos.
Horangi: ¿Cómo es que caí en esto?
Rebeca: *Ríe* ¿Quieres que te recuerde el porqué?
Horangi: No, cállate ya.
Rebeca: Ahora lárgate y déjame sola, luego yo te busco.
Horangi: Solo no le hagas daño.
Rebeca: Vete de aquí de una vez.
Horangi salió de aquel lugar. En el camino de regreso, iba muy nervioso, sabía perfectamente que se estaba metiendo en un gran lío.
Horangi: ¿Qué hice? Konig me va a matar. Soy un pendejo, siempre por un culo me meto en problemas. ¡Puta madre!
Konig ya estaba esperándote en el restaurante. No había señales de que fueras a llegar, así que llamó al chófer.
Konig: Jaime, ¿dónde está tn?
Jaime: Mmm, señor... No sé cómo decirle esto.
Konig: ¿Qué? ¿Qué pasa?
Jaime: La señora tn no está en casa.
Konig: ¿Cómo que no está? ¿Dónde está? ¿Y las niñeras?
Jaime: Las niñeras están adentro con Noah y Valentina
Konig: ¡Pues pregúntales dónde está TN!
Jaime: Ya lo hice y no le va a gustar lo que le voy a decir.
Konig: Déjate de rodeos, hombre, y dime qué es lo que está pasando.
Jaime: Las niñeras me dijeron que la señora TN se subió a una camioneta con un hombre y se fueron juntos sin decir a dónde.
Konig: ¿Qué? ¡¿Qué diablos estás diciendo? ¿Cómo que se fue con un hombre? ¿Qué hombre?
Jaime: Las niñeras no saben quién era, señor, pero la señora se fue.
Konig estaba empezando a alterarse.
Konig: No, eso no puede ser. TN no me haría esto, ella no. Ella no me engañaría y se iría con otro... ¿Estás seguro de eso, Jaime?
Jaime: Es lo que me dijeron las niñeras, señor. Cuando yo llegué, ella no estaba.
Konig: Quédate ahí, Jaime. Voy para allá.
Konig estaba enfurecido. Realmente, que el chófer le hubiera dicho eso le había afectado mucho. Subió a su camioneta y manejó lo más rápido posible para llegar a casa. El camino se le hacía eterno. Tenía tantas cosas en su cabeza, se estaba imaginando lo peor.
