Omega cordis mei

Sigma

La primera cita es primordial, Jeon Jungkook se vistió con ropa ajustada que casi no usaba, los zapatos dolorosos que combinan bien con esas ocasiones y se peinó distinto, con el cabello un poco ondulado.

Su alfa favorito llegó por él, le recordó que debía usar un abrigo. Kim Taehyung después lo miró. Oh, si supiera que todos los días se enamora más de él, pero vió los zapatos dolorosos del omega de su corazón, ahorita no le dolía, pero si seguían así le iban a lastimar. Él tenía la intención de llevar al menor a los arcades y después ir a comer. La misión cambió al percibir esos monstruosos zapatos.

El omega pelinegro se hallaba conflictuado, no sabía qué decir ni que preguntar. Con Arai Ayaka no se sentía así de intranquilo, su entusiasmo con Taehyung era notorio. Su alfa favorito se ve bien, es demasiado atractivo, no había notado los pequeños detalles: lo mira siempre, le pregunta si no hace demasiado frío, hasta le dió un dulce. Tal vez, algún día descubriría que compraba dulces desde que lo conoció, con el único propósito de ofrecerlos a él.

Llegaron a una zapatería cercana, el alfa le ánimo a entrar. Jungkook sin duda estaba desconcertado.

—¿Qué hacemos aquí?

—Pronto te dolerán los pies —señaló hacía los pies del omega—, Jungkookie, después de hoy tira esos zapatos. Ten piedad de tus pies.

El omega de su corazón se sonrojó, apenado.

—Tú ¿Cómo...?

Taehyung, un poco dudoso, confesó algo tan evidente que solo el omega no percibía. Al menos antes.

—Te dije que siempre he tenido la vista en ti.

Uy, eso lo emociona aún más. ¡Basta! Causas raras emociones en Jungkook.

Eligió otro par más adecuado para él, porque su alfa favorito tenía razón, ya se estaban poniendo rojos y el realmente quería disfrutar la primera cita con la persona que le quiere mucho. Kim pagó los zapatos y se aseguró que Jeon los desechara en algún bote de basura.

—Perdón —habló repentino Taehyung—, me alcanza para comprar unos sandwiches y comer en el parque.

Awww. Kim Taehyung, deja de ser así, has hecho suficiente y eso Jeon Jungkook lo sabe. No importa, de verdad eso es suficiente.

—Hyung, yo compro la comida y vamos a casa, estaremos mejor ahí.

Jungkook es tan dulce, merece una mejor cita que eso. Al final ¿Qué importa? El omega del corazón de Taehyung se acercó al decaído chico, con los ojitos arrugados, chiquitos de inmensa felicidad tomó las mejillas de su Hyung.

—Muchas gracias.

Le dió un pequeñito beso. Ya no en las mejillas, ahora en los labios. Cortito, dulce, con goce y voluntad de Jeon Jungkook, así fue su primer beso.

😭😔😭😔😭😔😭😔
No sé si esto les interese saber, pero perdí en la escuela mi antiguo teléfono y como sospecharán no me lo devolvieron.
Ahorita traigo uno de emergencias pero no me permite descargar ciertas aplicaciones y su memoria se llena fácilmente.
Pero bueno, así es la vida, cuiden sus celulares y manifiesten conmigo que me paguen pronto para poder endeudarme con otro.
Bueno eso es todo.
Hasta luego 👋

Atte: E.M.