N U E V E

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Liam


— Cómo volváis a decirme algo sobre hombres lobo o cualquier otra criatura sobrenatural, juro que le diré al director que me estáis acosando —nos amenaza algo histérica para luego darse la vuelta—. Estúpidos frikis.

Scott no vuelve a decir nada y luego me mira con una ceja levantada, creo que sé perfectamente lo que está pensando.

—Esto me recuerda un poco a alguien.

—Cállate —le digo con una mirada desafiante mientras me cruzo de brazos—. Pero no la vamos a secuestrar.

—No, eso no volverá a pasar... Tenemos que hablar con ella como sea.

—Lo sé, esta semana hay luna llena —informo con preocupación.

— ¡Eh! ¿Habéis conseguido hablar con ella? —escuchamos decir a Stiles mientras viene hacia nosotros por detrás.

—No podemos hablar de esto aquí —comenta Scott.

—Siempre estarán los vestuarios de lacrosse —dice Stiles poniendo su manos en la cintura.

Vamos hasta la taquilla de Emily, ella se encuentra ordenando libros y poniendo algo a modo de decoración. En unos segundos, nos acercamos y la rodeamos causando su expresión de extrañeza para luego pasar a la de enfado y no me gusta nada cuando se pone así.

— ¿Si acepto ir con vosotros, me dejareis en paz con el tema para siempre? —dice finalmente mirándonos alternativamente.

Los tres afirmamos con la cabeza numerables veces, entonces ella cierra su taquilla de golpe y espera a que comencemos a andar.

Entramos a los vestuarios asegurándonos de que ni el resto de jugadores ni el entrenador se encuentran por la zona, no deberían pues se supone que están en clases. Dejamos entrar a Emily y ésta se sorprende del lugar donde hemos decidido hablar. Se sienta en uno de los bancos mientras que nosotros estamos de pie justo delante.

— ¿Y bien?

—Emily, tienes que escucharnos —le aconsejo.

—Te van a ocurrir cosas nuevas y extrañas en los próximos días, y nosotros somos los únicos que podemos ayudarte —comienza a decir Scott.

— ¿Cosas nuevas? ¿De qué me estáis hablando?

—Creo que alguien debe enseñárselo —comenta Scott mirándome.

Cierro los ojos y los abro con el fin de que el color amarillento de hombre lobo aparezca en ellos a la vez que mis colmillos. Los enseño con delicadeza, sin armar un escándalo, pero lo suficiente para que mi hermana los vea con claridad.

Ella abre los ojos con sorpresa y horror al mismo tiempo, echándose un poco hacia atrás. Por este tipo de expresiones hacia mí, es por las que tengo miedo de que mis padres llegaran a verme así alguna vez. Sería un monstruo y jamás querrían volverme a mirar a los ojos. Algo parecido a lo del incidente del entrenador pero a mayor escala.

— ¿De dónde son esas lentillas? ¿Y esos dientes? Son muy reales.

—Esto va a ser más difícil de lo que pensaba —digo frotando mi cabeza.

—No, no pienso creerme nada de lo que me digáis —se cruza de brazos.

Scott y Stiles se quedan asombrados ante su incredulidad, yo para ser sincero esperaba que no se lo tomara enserio. Emily es la persona más testaruda que he conocido.

TEEN WOLF: FURIA | I ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora