Contrato de Amor

Cap 25 - La gira-

Estuvimos tras bastidores con los chicos hasta que llegó, su representante, aplaudiendo con fuerza.
Mg: Cinco minutos chicos. ¿Listos para
empezar?
Lo seguía un hombre con un auricular y un portapapeles o una
computadora de alguna clase. Había visto bastantes personas alrededor equipadas de esa manera. Exactamente cuántos eran los involucrados en traer a BTS a la ciudad, no tenía idea.
Cassie y yo veíamos el concierto desde un lado del escenario junto a una
enorme colección de amplificadores. Santo jodido infierno, el rugido de la multitud y la energía que llenaba el enorme espacio era increíble. No era particularmente profunda o espiritual, pero allí de pie, mirando a tantas miles de personas, era algo impresionante. Poseía una energía definida.
Los chicos habian  agotado las entradas del escenario para conciertos más
grande en un tiempo récord. Su gira incluía nueve ciudades en Estados Unidos, luego Asia. Estarían tocando en varios festivales en Europa la
próxima primavera y verano, además de hacer más conciertos. De alguna manera
durante todo esto, también pasarían tiempo en el estudio de grabación.
La música era asombrosa así de cerca y personalmente. Me divertí muchísimo hasta que me di cuenta de una mujer en primera fila que tenía el nombre de mi novio escrito en sus tetas en grandes letras rojas. Era difícil no darse
cuenta cuando seguía insistiendo en exhibirlas.
C: Trágatelo y sonríe
Dijo Cass, con sus dientes expuestos.
Tn: Que la jodan.
Devolví mi atención a mi novio.
Balanceaba su cabeza, cabello salvaje y sudor volaba de él. Mi corazón latía
con fuerza. Ni siquiera hay que describir lo que le hizo a mi pubis.
Después de una hora y media más o menos, Los padres de Yoongi se unieron a nosotras. Ambos usaban tapones para los oídos y mostraban sonrisas. Las miradas de orgullo que le dieron a su hijo hicieron que mis ojos se empañaran ligeramente.
Su madre debe haberse dado cuenta, porque deslizó su brazo para envolver mi cintura, inclinándose hacia mí. Puse mi brazo alrededor de su hombro mientras la banda tocaba otra canción, y luego otra. Poco a poco me dio más de su peso. No pesaba mucho, pero cuando empezó a tambalearse sobre sus pies le di a al papá de Yoongi una mirada nerviosa.
Él puso una mano bajo su codo, inclinándose delante de ella con una sonrisa sutil. Ella se repuso, restándole importancia con una mano, irguiéndose más.
Entonces sus rodillas se doblaron y dejaron de funcionar. Tanto el papá de Yoongi como yo la agarramos, evitando que cayera al suelo. Por desgracia, todo sucedió entre canciones. RMestaba tranquilo hablándole al público, gritando al frente del escenario. Y a pesar de todas las luces brillantes, Yoongi vio a su madre tambalearse, permaneció de pie, mirándonos. La ansiedad ocupaba su
rostro. Sin más preámbulos, el papá de Yoongi subió a su esposa en sus brazos y se la llevó. Levanté una mano hacia Yoongi y asentí con la esperanza de que recibiera el mensaje de que los seguiría y haría lo que pudiera. Debió entender, porque asintió y se sentó de nuevo.
C: Vamos
Corrimos tras los padres de Mal,
escondiéndonos y serpenteando alrededor de la gente y el equipo. Lena nos recibió afuera de la habitación en la que habíamos estado antes, tras bastidores. Junto a ella se encontraba de pie un manager infeliz, pero luego dudé de si alguna vez lo vería feliz.
M: Dime si quieres que llame a un médico
Psg: Gracias.
El papá de Yoongi acostó a su esposa en un sofá y sostenía un vaso de jugo en sus labios. Un pájaro habría bebido más que ella. Su piel era pálida y muy fina, sus ojos aturdidos.
Msg: No es necesario el escándalo. Oh, Anne, no tenías por qué venir.
Disfrutabas del espectáculo.
Tn: Deben estar casi terminado. Y Yoongi querría que viniera a ver cómo estás,
estoy segura.
Msg: Bueno, lo has comprobado. Estoy bien. Ahora vuelve.
Mierda. Sabía todo sobre estar bien. Cuidar de mi mamá fue un ejemplo
temprano, yo era la reina del jodido bien.
Tn: Sé que estás enferma, Yoongi me lo dijo.
El aire salió de ella en un siseo.
Msg: Le dije que no quería que todos supieran e hicieran un lío. Es la vida, cariño, todos tenemos que irnos en algún momento.
Tn: Me dijo que tenías un mes o dos ¿Hay algo que tienes que decirle a tu hijo?
Msg: Ahora podría ser menos que eso. Vimos al médico en Spokane antes de
venir aquí. Pero no hay diferencia. No voy a pasar mis últimos días en un hospital.
Algo se atoró en mi garganta.
Tn: ¿Tus últimos días?
Msg: Semanas. Creen que una o dos en el mejor de los casos. Volveremos a casa mañana por la tarde. Me gustaría estar allí…
Tn: Tienes que decirle.
Tenía hojas de afeitar en mi garganta, alambre de púas, clavos, variados equipos y dispositivos afilados. Era tremendamente incómodo.
Msg: Supongo que tienes razón. Le diré cuando salga del escenario. No podemos pedirle a Tn que se lo oculte.
Psg: No.
Esto no estaba sucediendo. Mierda.
Con cuidado, el papá de Yoongi y yo ayudamos a que ella se sentara derecha. Luego se fue a esperar a su hijo. Me hice cargo de los deberes del jugo. Al menos el vaso me dio algo que hacer.
Msg: Me alegra que te tenga. Sé que lo he dicho antes. Pero mi partida lo golpeará duro. Él actúa todo fuerte y resistente, pero tiene un punto débil, mi hijo lo tiene. Va a necesitarte.
Tomó mi mano libre en la suya. La mía sudaba, la suya no.
Tn: Me gusta mucho tu hijo
Dije. Porque tenía que decir algo. Así que, por supuesto que era totalmente inadecuado de acuerdo a lo común cuando se trata de sentimientos.
Msg: Ya lo sé, cariño. He visto la forma en que lo miras.
Tn: ¿Los ojos locos?
Msg: Sí. Los ojos locos.
Afuera, la multitud rugió y la estampida de pies casi sacudió el edificio. Es
curioso, allí atrás, la música era una especie de leve zumbido en su mayoría.
Insignificante. O tal vez fue el golpeteo de preocupación en mi cráneo. Podía sentir que se acercaba un dolor de cabeza. Toda esta situación iba más allá de intensa, el peso de la misma, paralizante. De ninguna manera podría mejorarlo o arreglarlo.
La gente comenzó a circular en la habitación. Una larga mesa llena de
bebidas y alimentos fue establecida. Al parecer la fiesta posterior planeaba hacerse aquí. En algún lugar por ahí,
El papá de Yoongi probablemente hablaba con el, en estos momentos.
Msg: Todo va a estar bien.
Es curioso, la forma en que se aferraba a mi palabra favorita. Tal vez existía algo en la creencia de encontrar una pareja que reflejara a tus padres. Lo cual era increíblemente espeluznante y malo. Realmente no quería pensar en ello después de todo. Yoongi no se parecía en nada a mi padre.
Entonces él irrumpió. Mal, no mi papá. Su mano derecha envuelta en una
camiseta, la sangre goteaba de sus dedos.
Tn: ¿Qué diablos pasó?  ¿Yoon?
Su aroma fue una patada en el estómago, igual que siempre. Pero ¿Qué demonios sucedía?
Sg: Hola, calabacita. No es gran cosa.
No me miró a los ojos. También evitó
la mirada preocupada de su madre.
Jimin regresó con las manos llenas de hielo convirtio un mantel de lino en una bolsa de hielo.
Jm: Ten.
Sg: Gracias.
Lentamente, desenrolló la camiseta ensangrentada. Debajo, sus nudillos tenían heridas abiertas y en carne viva. Apretó la mandíbula mientras sostenía el hielo en su mano.
El directivo idiota, se abrió paso a codazos en nuestro círculo
M: Amigo. ¿Escuché que hubo un incidente arriba?
Sg: Ah, sí, ¿te importaría ir a arreglarlo? Accidentalmente, le hice  un agujero en la pared. Sólo una de esas cosas, ¿no? Jk puso una mano en el
hombro del hombre, llevándoselo lejos.
Dudaba jodidamente de que fuera un accidente, dada la precisión.
M: Tenemos que conseguir que alguien vea su mano
Siguieron hablando, pero me desconecté. Llevé mi mano al rostro de Yoongi,
deseando que me mirara.
Tn: Oye.
Sus ojos iban a darme pesadillas, la miseria en ellos. Se inclinó hacia
adelante, capturando mi boca con la suya, besándome de lleno, frenéticamente. Su lengua invadió mi boca, exigiendo todo. Y se lo di. Por supuesto que lo hice.
Por fin se calmó, apoyando su frente en la mía.
Sg: Todo está tan jodido.
Tn: Lo sé.
Sg: Sólo tiene una semana o dos como máximo.
No existía nada que pudiera decir
Cerró los ojos con fuerza. El sudor de su rostro humedeciendo mi piel.
Andaba desnudo de la cintura para arriba y la habitación estaba fría, el aire
acondicionado trabajando horas extras por alguna razón.
Tn: Vamos a hidratarte
Dije, agradecida de poder hacer algo por él
Tn: Voy a encontrar otra camiseta para que te pongas. ¿De acuerdo? Aquí vas a enfriarte rápido.
Sg: Vale.
C: Quédate con él
Dijo Cassie, su mano en mi hombro. Yo iré.
Sg: Cassie 
Yoongi colocó sus brazos sobre mi cabeza en un torpe abrazo, todavía sosteniendo el hielo en su mano
C:  Una bebida fuerte.
Su frente se arrugó.
Sg: Whisky escocés o algo así. Por favor.
Con un suspiro, se dio vuelta, dirigiéndose entre la multitud cada vez
mayor. El peor maldito momento para una fiesta.
Sg: Hola, mamá —Dijo Mal, manteniéndome apretada contra él—.
Sg: Me alegro de que pudieran venir. Tuve un pequeño accidente con mi mano.
Msg: ¿Estás bien?
Sg: Oh, sí. No se preocupen.
Cass debió de correr, porque regresó con una camiseta de la Gira para él, una botella de vodka Smirnoff y otra de gatorade.
C: No tenían whisky.
Sg: Esto funcionará.
Me entregó la bolsa empapada de hielo mientras se ponía la camiseta. Tenía un gran cráneo de caramelo en la parte de adelante
Sg: Gracias, Cassie
Psg: Hijo
Sg: Papá, todo bien. Esta es la forma en la que nosotros la pasamos después del espectáculo. ¡Sabes eso!
Yoon se bebió la mitad de la botella de
Gatorade verde. Luego me la pasó para agarrar y beber grandes tragos de vodka.
Ah, mierda. Esto iba a ser como ver un accidente de coche.
Tn: Bebé gatito. Simplemente detente y respira por un minuto.
Sg: Me llamaste bebé.
Tn: Sí.
Sg: Me llamaste mi gatito el otro día.
Tn: Tú eres el que quería un estúpido apodo romántico.
—Sí. Mi Tn.
Frotó su mejilla en la mía como si me estuviera marcando. La emoción era demasiada, completamente abrumadora.
Tn: Gatito
Sg: No frunzas el ceño, no hay necesidad de preocuparse. Hazme un favor y
ve a hablar con mamá, ¿sí? Mantenla feliz. No puedo, ah… no puedo hablar con ella ahora mismo. Todavía no.
Colocó la botella en sus labios, echó la cabeza hacia atrás y bebió, mientras
yo tragaba saliva. La bebida lo auto-medicaba con respecto a esta situación. Pero estaría mintiendo si dijera que de todas formas no me asustaba. Sus ojos se veían muy abiertos y exhaló.
Sg: Esto está mejor. Esto está jodidamente mejor.
Tn: Creo que van a conseguir que alguien venga a revisar tu mano.
Traté de aclarar mi garganta adolorida. Tn: Deja que revisen tu mano, Mal.
Sg: Calabacita…
Tn: Suficiente de esta mierda.  ¿Quieres que no me preocupe? Deja que examinen tu mano. Ese es el trato.
Su mirada me evaluó muy lentamente.
Sg: Me encanta cuando te pones dura
conmigo. Está bien. Si te hace feliz, dejaré que la vean.
Tn: Gracias.