Sospechas

377 39 3
                                    


-Adrien, ¿Sabes dónde está mi... -Mi pregunta quedó inconclusa porque me percaté de que cierto rubio ojos verdes no estaba en su habitación.

-¿Dónde te metiste Ad? -Cuestioné para mi misma.

Caminé hacia el gran ventanal que había en su cuarto, segundos después me di cuenta que había un akumatizado y los dos heroes estaban luchando contra él.

Con el ceño fruncido tomé mi celular y le marqué a Adrien, pero me mandó al buzón de voz.

Gracioso... Pero no gracioso de risa, gracioso de raro.

Toqué la puerta de su baño para saber si se encontraba ahí y al no recibir respuesta decidí abrir la puerta de este.

¿Qué? Se pudo haber desmayado o algo así. Uno nunca sabe.

-No está... Okey, esto es raro. -Miré nuevamente hacia la dirección donde se encontraban los héroes hace unos minutos, entré-cerré los ojos y decidí abandonar la habitación de Adrien algo confundida.

Al llegar nuevamente a mi cuarto, me dirigí a mi balcón, mi mente estaba pensando muchas cosas que claramente no podrían ser ciertas.

¿Y si sí?

No. Claro que no.

Al salir a dicho lugar traté de pensar en otras cosas pero como si fueran señales de la vida Chat Noir apareció frente mío.

-Hola prrrincesa, ¿Qué estás haciendo? ¿Pensando en mi?

Teeeecnicamente, sí. Pero obvio no le diré eso.

-Pfff, ¿Yo? Brincos dieras. -Le dije a dicho ojiesmeralda.

-Entonces si no estabas pensando en mí, ¿Qué más podrías estar haciendo? -Dijo en tono burlón.

-Pensando en mi mejor amigo. -Dije sin pensarlo, pero luego vi la cara de asombro de Chat y quise agregar algo más. -O- o sea, es que no lo he visto desde ayer en la noche, hoy entré a su habitación y no estaba.

-S-seguro debe de andar por ahí. -Dijo nerviosamente el de traje negro.

raro...

-Pues no, no me responde ni las llamadas, pareciera que la tierra se lo tragó. -Volví a decir.

-Y-ya verás que no tarda en aparecer. -Dijo Chat. -Me- me tengo que ir, estoy apunto de destransformarme. -Los nervios que tenía dicho chico eran muy notorios.

-Pero si no ha sonado tu anillo. -Le dije confusa y fruncí mi ceño.

-Ehh... ya sonó, solo que no te diste cuenta. Nos vemos luego my lady. -Dejó un beso en mi mano y se fue más rápido que un rayo.

Aquí hay gato encerrado y no tardaré en liberarlo.

Entré nuevamente a mi habitación y me tiré en mi cama, segundos después escuché que alguien tocó la puerta.

-¡Adelante! -Grité desde mi cama, sin levantarme.

-Hola _______. -Escuché la voz de mi rubio favorito.

-¿Dónde estabas? -Dije no muy contenta. -Te busqué toda la mañana. -Bueno, tal vez no toda la mañana, exageré un poquito.

Nuestro hilo invisible (A.A /C.N x lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora