│RESUMEN
Akagami no Shanks y Dragon el Revolucionario tienen mucho más en común de lo que cualquier otra persona cree.
│ADVERTENCIAS/AVISOS
Sin lector Beta. Todos y cada uno de los fallos ortográficos corren por mi cuenta.
Advertencias: Se mencionan o insinúan temas como relaciones no consentidas entre Alphas y Omegas, acoso, Kurohige y su historia con Shanks en este universo, muerte de personajes y asesinato.
𝑪𝑨𝑷𝑰́𝑻𝑼𝑳𝑶 𝑰𝑰𝑰: 𝑬𝑳 𝑬𝑵𝑪𝑼𝑬𝑵𝑻𝑹𝑶 𝑫𝑬 𝑫𝑶𝑺 𝑫𝑹𝑨𝑮𝑶𝑵𝑬𝑺
Con una sonrisa alegre, mientras se acomoda en una de las sillas de la barra más alejadas de la puerta del establecimiento, el capitán de los Akagami Kaizoku agradece al camarero cuando rellena por segunda vez su copa de sake.
Deliberadamente, Shanks ignora la excitación que puede oler en el otro hombre. No se quejaría si pudiera conocer a alguien con quién pasar un buen rato, aunque sabe que no es precisamente una buena compañía en estos momentos. Pero en caso de que surgiera una distracción, una cosa tiene más que clara: no va a enredarse en la cama con un individuo que le recuerda tanto al Alpha bastardo en la tripulación de Shirohige, manteniendo su fachada de hijo leal que nunca intentaría acostarse con un Omega en contra de su voluntad ni someterlo.
El recordatorio de ese hombre y de cómo Shirohige siempre ignora sus advertencias al respecto, negándose a pensar que uno de sus hijos reclamados pudiera hacer algo tan perverso sin ser él consciente de ello; sólo consigue empeorar su estado de ánimo.
Exhala un suspiro hastiado cuando ve irse al hombre Alpha y sorbe un poco de su copa de sake, tarareando con conformidad cuando saborea la bebida en su paladar. No es el mejor sake que ha probado, pero tampoco es el peor. De hecho, el sabor es sorprendentemente aceptable si se tiene en cuenta los estándares de este mar. Poca competencia puede hacer contra las bebidas que Shakky sirve en su bar, pero el sabor es agradable.
Las voces y carcajadas de su tripulación llegan hasta sus oídos con facilidad.
Desde antes de que se produjera su presentación, marcándolo como un Omega, Shanks entrenó para fortalecer todos sus sentidos. Y una vez que superó el primer celo que vino con presentarse como Omega, sólo puso más esfuerzo en su entrenamiento. No quería depender de su haki y su habilidad con la espada para manejarse en batalla.
Incapaz de evitarlo, Shanks mira a sus nakamas para asegurarse de que están bien.
Aunque sea una fiesta de criminales en un bar alejado de casi toda población humana en la isla, están en terreno desconocido. A pesar de que siempre se ha asegurado de aparentar lo contrario con la reputación que se ha labrado, Akagami no Shanks es ese tipo de persona que permanece en guardia cuando se encuentra en un sitio que no conoce. Mucho más si ha llevado a los suyos a este lugar. Por mucho que sus hombres sean buenos combatientes, su responsabilidad como capitán es protegerlos de las amenazas a como diera lugar.
Afortunadamente para todos los involucrados ▬él mismo incluido porque no necesita provocar una masacre en estas fechas▬, cuando centra su mirada en la tripulación, ninguna señal activa esos instintos de protección permanentemente anclados en su corazón. Herencia de sus cuatro padres, de quienes aprendió con su ejemplo cómo defender lo que es suyo.
Sus nakamas parecen felices. Algunos entablan conversaciones, otros organizan competiciones con los clientes o entre ellos, y unos pocos están tranquilamente bebiendo su bebida mientras observan el caos. Se ve que todos ellos están disfrutando de la fiesta. Incluso Benn, a quien de vez en cuando escucha murmurar maldiciones contra la tripulación, está feliz. Su olor lo delata.
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El Mayor Tesoro De Akagami
RandomAunque rara vez se expresa en voz alta, es una verdad conocida por todos que los hijos de los Yonkō siempre son sinónimo de 'migraña' para el Gobierno Mundial. Los Marines no pueden perseguirlos como a otros criminales. A menudo, los hijos heredan l...