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Las mejillas de Jimin estaban bañadas en lágrimas mientras observaba a Jungkook sonreírle desde el suelo. Asintió muchas veces en respuesta a la pregunta de Jungkook.

— Si quiero!! Si quiero casarme contigo!

Jungkook se levantó del suelo y lo envolvió en un fuerte abrazo dando vueltas con el luego. Los músicos se retiraron para darle privacidad a la pareja.

Tras ponerle el anillo besó sus labios con suavidad hasta que ambos estuvieron rojos.

— Te amo...— murmuró Jungkook.
» Gracias por hacerme tan feliz y por darme hijos hermosos como tú.

— Yo también te amo Jungkookie...

— Dios estoy tan feliz ahora...

Dicho eso lo llenó de besos sacándole risas a Jimin. Luego acarició sus mejillas y le dió una copa para brindar por ellos.

Lo acercó a una mesa donde habían dos rosas, una blanca y una roja.

— Y esto qué es? — preguntó Jimin.

Jungkook le abrazó por su espalda acariciando su cintura.

— esto son dos llaves a dos mundos de placer distintos. — explicó.
» La roja es al que siempre te llevo, ese que tanto te gusta y tanto disfrutas...

— no entiendo para qué me haces escoger kookie...

— Es importante. La blanca, será algo nuevo para tí. Habrá dolor, no seré lindo...pero el placer será más intenso. Pero quiero que lo experimentes...

— Dolor? — preguntó sorprendido.

— Si.

— Qué pasa si escojo la blanca y luego no me gusta lo que harás...

— Si escoges la blanca y no te gusta, si me pides que me detenga lo haré. No te obligaré a nada y jamás volveremos a hablar de ese tema...

Jimin se giró para mirarlo. Los ojos verdes de su acompañante estaban llenos de deseo y lujuria. Podía sentir su calor corporal.

— Prometiste nunca hacerme daño. La rosa blanca, me hará daño?

— Nada que no puedas aguantar y que no resulte placentero para tí. Ya dije que si no te gusta, solo tienes que pedir que me detenga.

Jimin asintió entendiendo y se giró otra vez mirando las rosas. Tras pensarlo mucho tomó la rosa blanca y se la entregó a Jungkook. Este relamió sus labios y de su bolsillo sacó dos píldoras blancas. Acercó una a los labios de Jimin pero este lo miró un tanto indeciso.

— Confías en mi?

Preguntó Jungkook y Jimin asintió, el confiaba en su futuro marido. Sabía que nunca le haría daño...no mucho al menos. Tomó la píldora y bebió algo de vino. Jungkook hizo lo mismo con la suya y luego besó los labios de Jimin mordiendolos con algo de fuerza en el proceso.

Sus miradas volvieron a conectar algo perdidas por los efectos de la píldora y poco después Jungkook tomó su mano hasta llevarlo a una casa que Jimin no había visto antes cuando entró.

Lo condujo por un pasillo hasta una enorme puerta negra. Jeon le dijo que la abriera y él lo hizo obediente. Para su sorpresa se encontró con una habitación roja. De esas que alguna vez leyó en sus libros. Miró a Jungkook entre sorprendido y asustado pero el pelinegro no dijo nada. Simplemente entro y cerró la puerta con llave tras de él.

El rubio recorrió el lugar. En una esquina había una enorme colección de látigos de cuero. Habían cadenas colgantes del techo al parecer para sostener a alguien. Habían demasiadas cosas que él no sabía para que se podían usar. Justo en medio de la habitación había una enorme cama King Size. Jungkook se posicionó tras su cuerpo y lo sostuvo de la cintura.

𑁍ESCLAVOS DEL PLACER𖡼  KOOKMIN • WRITTEN BY T.M.G.RDonde viven las historias. Descúbrelo ahora