Pegasus and the Moon

La inteligencia, el amor, el consuelo y una rosa

Tras un mes y medio de entrenamiento en el Santuario, también Chibi-Usa había logrado activar su "Séptimo sentido"...

Pero ésto trajo graves consecuencias para todas...

Chibi-Usa, después de despertar el "Séptimo Sentido", ya no sabía quién era Mamoru Chiba, pero sabía muy bien quién era su verdadero padre y les dijo que debía regresar en menos de tres meses a Tokyo de Cristal, pues la Neo Reina Serenity daría a luz a su "hermanito" muy pronto.

La noticia tomó por sorpresa a las Sailor Scouts.

En un día que los Caballeros Dorados les dieron para descansar, las chicas bajaron a la ciudad para comprar un regalo para Usagi, quien actualmente yacía dormida en el Templo Privado de Atenea, y no se despertaba por ningún motivo, llevaba dos semanas así después de la muerte de Jedite...

Era como si estuviera bajo el hechizo de la bella durmiente.

Makoto, Ami y Hotaru acompañaron a Rei a hacer una pulsera con la gema de Jedite.

El vendedor les cobró una cantidad bastante precisa, y les dijo que estaría listo en una hora y media aproximadamente, incluso, con un poco de suerte, sólo tardaría una.

Fue entonces que ellas se dirigieron a comprar los obsequios para Usagi.

En el camino se detuvieron en una tienda de ropa y se adentraron a ella por la llamativa y bonita ropa que exponían en el escaparate.

Ami vio un sombrero particularmente bonito de paja, decorado con flores blancas, Hotaru encontró un par de zapatos negros que le llamaron la atención, Rei vio un vestido rojo de estampado floral que estaba más que dispuesta a comprar, pero Makoto no vio nada que le llamara la atención ahí.

Pensaba en lo que Rei había dicho, sobre que Jedite estaba hechizado ¿Podría Nephrite también estar hechizado...?

Pues era momento de averiguarlo, porque unas malignas empezaron a atacar a las personas, robándoles la energía y tratando de obtener información sobre los caballeros o las Sailor Scouts.

Las chicas se escondieron y se prepararon para transformarse, pero Makoto las detuvo.

—Ustedes protejan a los civiles, yo me encargo de esto—Dijo.

Nephrite apareció en medio de la confusión, mientras las Sailors llevaban a las personas a un lugar seguro.

Makoto sabía que era el momento, y decidió averiguar si él estaba bajo un hechizo o... o si las atacaba por su propia voluntad.

—¡Ataque de hojas de roble de Júpiter!—Gritó enseguida, apenas se transformó.

El viento que ocasionó destruyó a las malignas y movió el cabello de Nephrite... entonces lo vio: la gema en su frente estaba opaca, como si se tratara de una piedra común, había perdido aquel brillo rojizo, igual que sus ojos, que se veían tan negros como las sombras...

Makoto se quedó de pie un momento, mirando a Nephrite con una mirada llena de compasión y ternura y rogó a quien la escuchara —Nephrite, por favor... eres más fuerte que cualquier hechizo en el mundo... debes reaccionar—.

Shiryu bajó del Santuario a ayudar en cuanto sintió que habían problemas.

Estaba con Seiya, quien le contaba acerca de los recuerdos de Tenma que habían empezado a aparecer en su mente y a fluir como agua de una presa que poco a poco iba cediendo a la fuerte corriente que chocaba contra la misma.

—Entonces... ¿Ahora recuerdas cómo la conociste?—Le preguntó Shiryu a su amigo, quien asintió en respuesta, cruzado de brazos antes de cerrar los ojos para repetir esa memoria —Sí, también recuerdo que realmente fue Hades quien le borró sus recuerdos, la usó de carnada para atraerme al Inframundo...—.