DLMLU [Minlix]

25

Observaba en silencio las rosas, desde el balcón de su habitación se veían aún más preciosas. Suspiró atontado cuando el sol comenzó a asomarse iluminando el lugar, hacia que las rosas destacarán aún más, sobre todo las blancas.

Se giró viendo la hora en el reloj negro de la pared.

>>5:21a.m.<<

La fiesta de celebración por el "Sí" que Felix había dado se había extendido bastante, terminó a las cuatro y media, hasta terminó de limpiar por decisión propia de ayudar a los empleados pasó una hora, aún le quedaba ducharse.

Al menos algo bueno había salido de ahí además de la formalidad entre su alfa y él. Pudo hablar con sus padres, con su madre fue la charla más importante y le alegraba que todo quedara claro y, de alguna manera, en buenos términos

Flashback.

—Lamento no haber escuchado tu palabra, hijo...— Habló la mujer al apartarse de la multitud, se veía feliz, pero a su vez se dejaba ver algo preocupada por la relación entre ellos.

A pesar de no llevarse bien por los prejuicios de que Felix fuese un omega, era su hijo, a su manera lo amaba.

—No te voy a mentir, mamá. Odié que me obligaran a entregarme a un alfa que ni siquiera conocía.— Habló el rubio bajando su mirada, no tardó en subirla nuevamente. —Y sé que quizá piensas que lo de recién fue actuado porque... estaba realmente negado a querer a Minho hyung.—

Ella asintió, se esperaba que todo fuese un tipo de acuerdo entre ellos para quedar en buenas condiciones frente a la familia.

—Pero no lo fue.—

—¿No... lo fue?— Preguntó sorprendida.

Felix negó dejando salir una pequeña risita alegre.

—Minho me gusta, es... mi destinado, lo descubrimos hace un tiempo.— Suspiró.
—Me cuesta aceptar que estoy... enamorado de él, siento que es muy rápido ¿No?—

Mordisqueó su labio nervioso, necesitaba que alguien le dijera que debía calmarse y pensar las cosas correctamente, pero no fue lo que su madre tenía en mente.

—Para el amor... no existe un tiempo determinado, Lixie.— Su mano acarició la mejilla ruborizada del omega. —Y mucho menos si él es tu alfa, que te enamores, que te dejes llevar, que lo desees, es normal. Porque él es tuyo, y tú eres suyo aunque no lo quieras así. Los efectos sobre ti siempre existirán, es cuestión de tiempo que aceptes por completo que lo amas, tu lobo lo hace y te va a contagiar. No debes sentirte culpable por ello, de eso se trata el amor, amar sin pensar.—

Eso removió algo dentro del chico de solo veintiún años. Entonces era normal sentir un amor descontrolado por su mayor, todo este tiempo se había culpado, pensando que solo utilizaba a Minho para olvidar su corazón roto.