DLMLU [Minlix]

03

Sus pisadas eran fuertes, la furia se notaba a millas de distancia y necesitaba golpear o morder algo tan fuerte como pudiera para lograr así calmarse.

"Hijo de puta." Pensaba Felix.

Cerró de un portazo la puerta de su habitación y se deslizó por ésta hasta caer sentado en el suelo.

—¿Cómo se atreve a proponer algo así? Joder. Esta mierda no tiene sentido.—

Flashback.

—No, quiero casarme contigo, Felix.—

—¿Disculpa?— Preguntó el nombrado.
—Pero... yo tengo una vida ¿Sabes? tengo un alfa esperándome en casa.— El sabía que no dejaba de embarrar las cosas nombrando a Bangchan, pero necesitaba salir de esa situación tan rápido como pudiera. —Solo recházame, Lee. Podrás encontrar otro omega.—

—No, tú no entiendes.— Suspiró el contrario. —Número uno, mi empresa y la de tu padre son las empresas de fragancias y esencias más grandes de todo Corea del Sur ¿Sabes cómo las ventas subirían? dispararíamos hacia arriba pero la bala jamás caería ¿Sabes a lo que me refiero?— Felix asintió un poco.

—De todos modos, yo...—

—Número dos.— Interrumpió Lee.
—Antes de saber quien eras me dieron tus papeles y una foto. Ni siquiera tuve que leer los papeles para saber que tenías algo. Cuando vi tu foto... supe que tenías que ser tú. No sé lo que tengas, Lee Felix, pero contigo es con quien me voy a casar.

—Minho...— Habló el pecoso en súplica.
—¿Y qué haré con mi alfa? él...— El castaño volvió a interrumpir.

—Sé que tienes un alfa, pero no te ha marcado.— La ceja del pelinegro se enarcó instantáneamente ¿Cómo sabía eso? —Tu aroma no es asentado como el de un omega con el lazo de sangre formado. Además... ¿Están teniendo problemas? su aroma impregnado a tu cuerpo es... agrio. Él se está alejando ¿No es así? su lazo sentimental se está rompiendo.—

—¿Qué? claro que no, él y yo estamos perfectos.—

—No lo sé.—

Felix se sintió atacado ¿problemas con su alfa? eso jamás, su relación era la más bonita de todas... ¿verdad?

—Escúchame, Felix.— Volvió a hablar el mayor. —Me da igual si sigues viéndote con él cuando estemos casados mientras las cámaras no te atrapen. Pero éste es un negocio demasiado grande y... tú tienes algo que capta mi atención. Si no me caso contigo, no podré casarme con otro
lobo.—

¿Qué tenía Felix de especial para que ese alfa lo deseara tanto como esposo? sentía una gran mochila en su espalda, una que quería tirar lejos.

Fin del flashback.

—Ahhh. Me duele la cabeza.― Se quejó Lee, levantándose del suelo finalmente y viendo la hora.