resúmen: tocandote por 10 minutos
nota: 10 minutos pasaron bien rápidos y por alguna razón mikasa es sobrina de erwin aquí, I do not know why pero supongo que así lo quiso la escritora.
...
—por favor princesa. Levi estaría aquí con mikasa en treinta, —gimió Erwin mientras continuabas arrastrando tu coño cubierto de bragas hacia arriba y hacia abajo por su polla vestida.
—Solo necesito diez. —susurraste. estabas más que necesitada y tu novio estaba siendo terco. demasiado asustado de que ustedes dos se interesaran tanto que él se olvidara por completo de su esperada compañía.
Aunque no ibas a parar sin luchar. rebotando arriba y abajo sobre su bulto antes de conectar tus labios con los suyos en un beso descuidado. sus grandes manos sostuvieron tu cintura ligeramente mientras dominaba tu boca y desaceleraba el ritmo del beso. Te alejaste de él con un resoplido, moviendo tus labios al lugar que le gustaba en su cuello.
—No podrás resistirte a mí para siempre, cariño.
cuando sintió que tus labios comenzaban a chupar su oreja, se rompió. Agarrando tus nalgas con fuerza mientras te aplastas contra él con más fuerza.
—Diez minutos.
asentiste antes de que te dieran la vuelta rápidamente. piernas abiertas de espaldas a su pecho. Erwin deslizó sus manos hasta tu coño antes de rasgarte las bragas por la mitad. Antes de que pudieras protestar, fuiste interrumpida por su mano alrededor de tu garganta.
—Te compraré tres más, —susurra antes de frotar ligeramente tu clítoris con sus dedos índice y medio. tu excitación hizo que sus movimientos fueran fluidos mientras movías tus caderas para que él pudiera comenzar a moverse hacia tu entrada.
tu entusiasmo te valió un fuerte apretón en tu garganta antes de que su mano se deslizara hasta tu barbilla, moviendo tu cara hacia la suya.
—Quédate quieta o me detendre. —sus ojos azules miraron fijamente a los tuyos, dándote una advertencia antes de hundir abruptamente sus dedos profundamente en ti.
—O-oh Dios mío. —tus gemidos llenaron la sala de estar mientras tu coño empapaba sus dedos. tus ojos se pusieron en blanco cuando los labios rosados de Erwin comenzaron a bailar a lo largo de tu cuello. lamiendo y chupando la delicada piel mientras te apretabas alrededor de él.
—Eres tan apretada princesa.
Abriste la boca para hablar pero no salieron palabras. Te estaba follando tan bien con sus dedos y te encantó. Miraste hacia donde ustedes dos estaban conectados. Fluidos envolviendo sus dedos mientras los deslizaba hasta tu clítoris. Erwin observó cómo tu cara se contraía en diferentes expresiones de placer mientras sus dedos masajeaban tu botón, esparciendo tu esencia por todo tu coño mientras cantabas para él.
—E-erwin, eres ta-tan bueno.
Antes de que pudieras parpadear, él estaba de nuevo dentro de ti, cavando profundamente mientras rápidamente te follaba con sus gruesos dedos.
—¡Ohhh, ahí mismo cariño! —gritaste mientras Erwin continuaba su ataque contra tu estrecha entrada.
—¿Aquí mismo querida? —Tu orgasmo estuvo tan cerca que casi puedes saborearlo mientras gemías un "mhmm" para tu esposo.
Los sonidos que salían de tu coño eran descuidados y húmedos. Los jugos salpicaron todos tus muslos. La espiral de tu estómago estaba a punto de romperse. Te estabas acercando mucho. Estabas muy cerca. Hasta que todo desapareció. Estabas completamente vacía. Tus ojos se abrieron de golpe, inmediatamente confundidos cuando miraste a Erwin. Una sonrisa apareció en su rostro mientras te daba un ligero beso en la frente.
—Se acabaron tus diez minutos amor —te chupaste los dientes mientras él te alejaba de su pecho. mirándote mientras se lamía los dedos. justo antes de que pudieras maldecirlo, el timbre sonó. Llegaron temprano.
Rápidamente te tambaleaste hacia tu habitación para ponerte unos pantalones mientras Erwin abría la puerta.
—tío erwin. —chilló mikasa mientras abrazaba las piernas del hombre alto. Una suave sonrisa floreció en su rostro y vio a su sobrina agarrarlo con las manos.
—Tienes algo en el labio. —La voz de Levi estaba molesta.
Erwin se limpió el costado de la boca con el pulgar antes de chuparlo rápidamente. Una mirada confusa creció en el rostro de su amigo mientras observaba a Erwin rascarse nerviosamente la nuca.
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créditos, difl0v3rss
