Trouvaille [En Proceso]

17 Venecia jonhson

Por muy increíble que parezca, para mi los días pasaron muy rápido.

Quisiera haber podido detener el tiempo para quedarnos un poco más.

Pero por el contrario ya estábamos a minutos de llegar a nuestra realidad. Al menos a la mia.

—Esperemos que no este nadie en los departamentos, lo dudo mucho la verdad, todos deben estar con sus familias.

—Dudo mucho que Raquel este.

—¿te veras con tu papá?

Note como no le gustaba esa idea, y es que claro. Si me reúno con mi padre, el llevará a Oliver y eso es algo que elisa no le causa mucha gracia.

—Tengo que ir. Estuve días fuera y el no lo sabe, es para la comida, después de eso le pediré que me traigan.

No dijo nada. Mantuvo su vista al frente.

—prometo que no me quedare, solo será para mantenerlo tranquilo.

—Tranquila Venecia, se que tienes que ir, solo...—suspiro—Ten cuidado, ya sabes a lo que refiero, ese imbecil de Oliver no me cae bien.

—lo sé.

—Bien.

Cuando llegamos Elisa me ayudo con mis maletas, se despidió de mi y se fue a cambiar.

Acordamos vernos más tarde después de la comida que tendré con mi papá.

Llegaron a buscarme para llevarme al lugar de la comida, y cuando llegue pues me temo que tuve razón.

Estaba Oliver y su familia junto con mi padre.

El restaurante era muy elegante pero habían pocas personas.

—Bienvenida hija

Mi papá beso mis mejillas.

—venecia cariño, bienvenida.

La mamá de Oliver me saludo y el mismo gesto lo hizo su papá.

Esta situación es demasiado incomoda.

Al momento de saludar a Oliver me las ingenie para no saludarlo con beso ni otra cosa.

Lo quiero, pero lejos de mi.

—¿Que lindo no? Estar todos como una familia, en unos años tendremos unos hermosos nietos.

Dijo el papá de Oliver y seguido mi padre y el rieron como si lo que dijeron fue el chiste más increíble del mundo.

—tienes razón rodrigo, en unos años tendremos una gran familia.

—¿cuantos hijos quieres Venecia?

Que imprudente esta señora.

—Venecia, caroline te pregunto una cosa. Responde.

Me dijo mi papá aun riendo pero sabia que estaba siendo serio conmigo.

—Yo no lo sé, no pienso en eso.

—Aún—dijo Oliver —pero ten en cuenta que yo quiero un niño.

—Si, necesitamos un varón en la familia para que se ocupe de los negocios.

Comento mi papá y bueno, así pasaron mucho rato hablando de cuantos fetos caben en mi vientre.

No pienso tener hijos, y menos con el idiota de Oliver.

Mi celular sonó y rápidamente lo saque para ver el mensaje.

***¿Ya terminaste florecita?***

Sonrei al ver el mensaje.