Capítulo 1

202 15 4
                                    



Fic escrito en 2010

Basado en la canción de LaFee Wer bin ich?

Categoría: Slash

Generos: Angustia, Misterio, Romántico, Songfic

Advertencias: Chan, Lemon







Después de dos horas haciendo que miles de chicas gritaran a sus pies, pude respirar al fin aliviado. Me había encerrado en el baño donde di rienda suelta a mis lágrimas. No podía más con este ritmo de vida, me sentía realmente cansado, la garganta me escocía y el estomago protestaba. Apenas me había dado tiempo a comer algo tras la sesión de fotos, las dos entrevistas y luego la prueba de sonido.

No sabía cómo lo podía soportar Tom, a veces incluso me llegaba a pensar que se estaba metiendo algo...y quería preguntarle el qué...

—Bill, ¿terminas?

La voz imperiosa de Georg me hizo maldecir por lo bajo. Me di prisa y me lavé la cara arrastrando mis lágrimas. Me sequé a una toalla y tras respirar hondo un par de veces abrí la puerta y cedí el baño a mi nervioso compañero.

— ¡Quita de en medio, que me lo hago!—gritó Georg empujándome.

Me golpeé contra la pared y gemí por lo bajo. Me puse derecho de nuevo y cogiendo con fuerza mi bolsa de mano suspiré y eché a andar a la sala en donde me esperaba Tom. Aún teníamos que esperar unos minutos más en el backstage hasta que nos dieran permiso para salir. De solo pensar en las chicas que me esperaban emocionadas....gritando y llorando...

— ¿Estás bien?

Alcé la mirada y me encontré con la dulce sonrisa de Tom. Suspiré y me dejé caer en el sofá a su lado. Sonreí cuando me pasó un brazo por los hombros y me atrajo a su cuerpo.

— ¿Cansado?—preguntó Tom sin dejar de abrazarme.

—La cabeza....me está matando—murmuré con los ojos cerrados

—Nos vamos directos a casa, yo tampoco estoy para fiestas—dijo Tom achuchándome.

—No lo hagas por mí, habrán muchas chicas esperándote, no debes dejarlas plantadas—negué de inmediato.

No quería que Tom se perdiera la fiesta por mí, y yo... ¿para qué iba a ir? Nada más llegar buscaba un oscuro rincón y allí bebía en soledad....agua, porque el alcohol no me gustaba.

Antes de poder replicarle, David entró para darnos luz verde. Tom se levantó llevándome en sus brazos. Me puso en pie y tras guiñarme un ojo me soltó y se dirigió a David.

—David, Bill y yo nos vamos al apartamento—dijo con firmeza.

—No, solo me voy yo, tú...—empecé a decir en voz baja.

—No lo podéis decir en serio—saltó David tratando de no perder los nervios—Os esperan, a los dos. Si estáis cansados os sentáis en el reservado y allí atendéis a las chicas.

—Ya he dicho que no hace falta que...—traté de nuevo a hablar.

—Bill se siente mal, no le puedes obligar—me interrumpió Tom esa vez.

¿Quién soy yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora