Por el Reino

Epílogo

Christopher sonríe cuando su hijo da dos pasos para acercarse a él y luego cae sentado al suelo riendo.

El castaño deja un pequeño beso en su cabeza—. Mi bebé ya es un niño grande—murmura.

Ivan balbucea y Christopher sabe que puede morir de amor por la ternura que genera su hijo.

—Vamos a buscar a papá Zab—Christopher toma en sus brazos a su pequeño y sale de la habitación para buscar a Zabdiel antes de que la fiesta inicie.

Encuentran al rubio en su oficina revisando una cantidad enorme de papeles.

Christopher camina hasta él y Zabdiel cuando los ve les da una sonrisa.

—Hola amores—saluda y Chao sonríe mientras Ivan extiende sus brazos para ser cargado por su otro papá.

—Mi pequeño príncipe—susurra y deja un beso en la mejilla del bebé—. ¿Que los trae a mi oficina?

—La fiesta ya va a empezar y queremos que estés con nosotros.

Zabdiel sonríe y se levanta de su silla y camina junto a su esposo al gran salón donde van a festejar el primer cumpleaños de Ivan.

El salón está decorado en tonalidades azules y blanco, un pastel de tres pisos está en una mesa el centro del salón.

—Creo que el pastel es un poco grande—murmura Christopher.

—Van a venir todos los reinos amor, todos quieren ser participes de este momento.

Charlie aparece en el salón y toma a su nieto haciéndolo jugar dejando a la pareja sola.

—Zabdi—el rubio mira a su esposo y acaricia su mejilla.

—¿Qué sucede amor?

—Gracias por hacerme feliz y darme una familia.

El rey sonroe y deja un pequeño beso en los labios del contrario—. Yo tendría que agradecerte a ti, a pesar de todo te quedaste y me enamoraste.

Christopher se sonroja—. Yo no hice nada.

Zabdiel ríe—. Estoy bastante seguro de que me hechizaste con esos ojos.

El castaño besa los labios de su esposo y mira los ojos chocolate de Zabdiel—. Te amo Zab.

—Te amo mucho más Tofio.

(...)

Todos los gobernantes de los distintos reinos se encontraban en la fiesta y cada uno trataba de dejar el mejor regalo para el futuro heredero de la corona.

Christopher aún veía con asombro algunos regalos y Zabdiel solo le restaba importancia porque todos querían ser el mejor regalo.

Las miradas se dirigieron hacia la pareja que ingreso a la fiesta, Joel y Erick había contraído matrimonio hace dos meses atrás.

Joel se había sido coronado rey hace 4 meses atrás y luego cambió la ley para poder casarse con Erick y finalmente tener su propia historia de amor.

Como era de esperarse varios reinos le dieron la espalda al saber que Joel había contraído matrimonio con alguien fuera de su linaje.

Zabdiel lo había apoyado en todo momento y algunos otros reinos al ver que el gobernante más poderoso de todos los reinos aceptaba el matrimonio también lo hicieron.

Joel y Erick se acercaron a la preja y la saludaron, el rizado fue el primero en hablar.

—¿Dónde está mi sobrino?

—Con su abuelo—contesta el boricua y señala hacia la izquierda donde Charlie hacia reír a Ivan mientras lo presentaba con algunos de sus amigos.

—Gracias por venir—murmura Christopher y recibe el regalo que Erick le entrega.

—No podría perderme el cumpleaños de mi sobrino favorito.

—Joel es tu único sobrino—le recuerda el boricua.

—Entonces deberían darme más sobrinos—comenta haciendo sonrojar a Christopher y Zabdiel solo niega divertido.

Joel y Zabdiel van por bebidas para sus esposos.

Christopher mira al ojiverde—. ¿Cómo lo llevas?

—Aún me siento extraño cuando alguien me dice señor o rey.

El castaño sonríe—. Vas a acostúmbrate Er, es lo que te mereces.

—Gracias por traerme contigo.

—No fue nada Er—comparten un abrazo.

Ambos habían encontrado a sus almas gemelas.

Sus esposos vuelven y le entregan su bebida, Joel y Erick caminan por el salón dejando a la pareja sola.

—Nunca pensé que Joel sentaría cabeza por el mismo.

—La vida te da sopresas—comenta el castaño y Zabdiel toma su mano.

—Tú eres una de las sorpresas más bonitas que me dio la vida—murmura y Christopher sonríe.

Charlie vuelve con Ivan y el bebé extiende sus brazos hacia Christopher, el castaño lo toma y llena de besos su rostro.

—Te lo dije Chris, tú eras el único que podía darle una familia a mi hijo—comenta y la pareja sonríe.

—Creo que es hora de cantar el feliz cumpleaños—murmura Zabdiel y Christopher asiente llevando a su bebé hacia el pastel.

Ivan estaba bien vestido con un trajecito azul, zapatitos blancos y su pequeña corbata.

Christopher distinguió entre la multitud a Nadia junto a Alexia, ambas aún mantenían una relación de noviazgo porque Alexia no quería casarse todavía y Nadia iba a esperar por ella.

Todos comenzaron a cantar y Zabdiel observa a su pareja y a su bebé y sonrió, finalmente tenía lo que había buscado toda su vida.

Tenía su final feliz junto a su lindo chico de ojos mieles.

Quien diría que su padre sería un buen cupido.

Los aplausos los sacaron de sus pensamientos y también aplaudió cuando Ivan "soplo" las velas de su pastel.

Los sirvientes comenzaron a repartir el pastel e Ivan manchaba sus manos con el mismo y Christopher intentaba limpiarlo.

—Te ayudo amor—tomo un pañuelo y limpia las manos su pequeño hijo—. Listo campeón.

Christopher sonríe y apoya su cabeza en el pecho del mayor—. Te amo Zabdi.

—Te amo mucho más Tofio—contesta y miran a su pequeño hijo mirarlos—. También te amamos mucho a ti.

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Terminamos :(

Espero que les haya gustado la historia :)

Gracias por su apoyo desde el primer capitulo <3

Los amo y nos vemos en Solo por él <3