Por el Reino

《14》

Zabdiel practicaba esgrima con Joel, el rizado había notado el gran cambio que se había producido entre su amigo y Christopher.

—¿Vas a decirme que sucede?

—No—el rubio se sentó en una silla y bebió agua.

—Zab, estuviste gruñón toda esta semana y nadie quiere estar cerca tuyo.

El rey suspiró y miro a su amigo—. Christopher.

—¿Qué sucede con tu esposo?

—Estoy muy enamorado de él.

Joel sonrió—. Lo noté, ese niño te tiene en la palma de su mano.

—No quiere tener hijos—el rizado escupió su agua y Zabdiel hizo una mueca—. Joel, eso es asqueroso.

—Zab, Christopher aún es muy pequeño para tener hijos.

—Lo sé y lo entiendo, eso no es lo que me molesta.

—¿Entonces?

—Lo vi besándose con otro.

Joel abrió la boca sorprendido, eso no lo esperaba. Christopher parecía demasiado enamorado de su mejor amigo.

—¿Otro principe?

—No lo creo—bebió de su agua—. Primero le pregunto sobre formar una familia y después lo encuentro con otro.

Joel se mantuvo en silencio.

—¿Cómo te sentirías si el amor de tu vida no quiere formar una familia?

Joel iba a responder pero observo como una cabellera castaña ingresaba a la sala.

—¿Soy el amor de tu vida?

El rubio volteo y sus ojos se encontraron con los dulces ojos mieles de su esposo, había extrañado verlos.

Habia evitado a Christopher toda una semana.

—Yo creo que voy a darles un tiempo solas—el rizado tomo sus cosas y salio de la habitación.

Encontró a los amigos de Christopher tratando de escuchar la conversación y río cuando se alejaron rápidamente.

—Yo haría lo mismo, no los culpo—le guiño un ojo a Erick y se fue.

El ojiverde rodo los ojos, tonto príncipe y sus torpes intentos de conquista.

(...)

—No quiero hablar Christopher.

—¿No vas a contestarme? ¿Vas a seguir evitándome?—se acerco hasta el rubio, quedando enfrentados.

—Christopher, no quiero gritarte—suspiro y tomo al castaño del brazo y lo corrió suavemente.

—¿Que te molesta?

—Que mi esposo tiene un amante y fui tan estupido como para no notarlo.

—¡Mark no es mi amante! Solo salimos una vez.

—¿Y él vino a buscarte para huir?

—¿Huir?

—Joel me dijo hace un tiempo que querías huir—el castaño se quedo en silencio—. ¿Vas a huir con él?

—¡No! Mis papás nunca quisieron un heredero, ellos solamente me usaban para su beneficio.

—¿Qué?

—Mark confundio las cosas, yo solamente quería ser su amigo—suspiró—. Antes de la llegada de Erick y Alexia, estaba solo.

—Chris...