♡︎ « 𝚃𝚑𝚊𝚝 𝚋𝚘𝚢 𝚒𝚜 𝚊 𝐌𝐎𝐍𝐒𝐓𝐄𝐑 » ♡︎
Tn tiene una vida un tanto alocada, en su mundo es ella y solo ella, pero eso cambia cuando se encuentra a un hombre herido, decide ayudarlo tanto a curarlo como a cuidar de su bebé, sin saber que tal...
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Después de la pelea que Toji había tenido con TN y después de salirse del departamento de la chica, fue rumbo a buscar el hotel más cercano ya que en realidad no tenia un lugar donde quedarse.
Podria comprar una casa pero siente que no es mucho el tiempo el cual se quedaría ahí.
Megumi llevaba dos días sin dormir bien, los mismos días desde que se fue, su pequeño hijo no dejaba de llorar y pronunciar la palabra "mamá", no quería comer y tampoco quería estar en los brazos de su padre.
Sin embargo, esta noche Toji consiguió hacer dormir al niño, el pobre había caído rendido después de tanto llorar, su carita se encontraba inchada y roja, además de que soltaba pequeños quejidos mientras dormía.
Mientras tanto el pelinegro mayor se acerco a él pequeño balcón que tenía la habitación, sacón un cigarro para prenderlo y comenzar a fumarlo. Tenía mucho tiempo sin probar uno y ahora que podía hacerlo, tenía que salir afuera para no dañar a su hijo.
Mientras estaba recargado mirando desde arriba a los pocos carros que pasaban por la calle, recordó todo lo que había pasado, desde la pelea con Tn había empezó a dudar mucho de ella, pero de un momento a otro recordó...
El día en que su esposa murio...
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☆꧁༒ • 𝑻𝒐𝒋𝒊 𝑭𝒖𝒔𝒉𝒊𝒈𝒖𝒓𝒐 • ༒꧂☆
Recuerdo perfectamente esa noche...
Iba junto a mi esposa en el auto por la carretera, acabábamos de salir de un restaurante ya que festejábamos nuestro 3er aniversario de casados.
Era uno de los momentos más felices de nuestras vidas y más porque ya hace dos meses acababa de nacer nuestro pequeño hijo, un niño muy sano y fuerte al cual llamamos Megumi.
Recuerdo haberme detenido en un semaforo, las calles estaban solas, mientras hablaba con mi esposa una luz se hizo presente por el costado de ella, al parecer era otro auto que venía a lo lejos, esta claro que no le pusimos importancia y seguimos con nuestra charla.
La miraba de reojo... ella era hermosa, era la dueña de mi corazón y mi esposa.
Mientras la admiraba aquella luz se fue acercando aun más al punto de darme cuenta que se dirigia a nosotros, trate de arrancar pero ya era tarde, el otro auto se había estrellado contra nosotros.
Nos volcamos hasta quedar del otro lado de la carretera, habíamos quedado de cabeza, tarde unos minutos en recuperar la conciencia y cuando lo hice volteé a mi lado... Y ahí estaba ella con variós vidrios encajados y sangre por todos lados.
Me solté del cinturón, salí del auto y como pude me dirigí del otro lado para poderla ayudar a salir...
-Tranquila... todo estará bien- le dije mientras la sacaba con mucho cuidado, se empezaron a escuchar pasos detrás de mi
