One-shots | Ellie Williams x Lectora.

♡⁠˖⁠꒰⁠ Preocupación ꒱

Las patrullas eran algo a lo que jamás le tomaste mucha importancia, incluso conociendo los riesgos de algún día salir a patrullar y no regresar, aquello no te asustaba mientras tuviera a Ellie a tu lado.

Llevaban tiempo saliendo, casi dos años. Siempre solían estar juntas, siempre encontraban alguna manera de ir a patrullar juntas, Ellie se sentía más segura si ella te acompañaba, la idea de dejarte en manos de otra persona no le gustaba, sabía los riesgos que podías correr estando con alguien más. Ellie era muy sobreprotectora contigo, incluso podría cargarte en sus brazos para que no tengas que pasar por un pequeño charco de agua para no mojar tus zapatos, no podía evitar preocuparse y querer cuidarte tanto.

Jamás salías a patrullar sin ella, sin embargo ella si podía ir sin ti, se sentía mucho mejor si te quedabas en Jackson mientras estuviera fuera. Algunas dos veces tuviste que salir sin ella y cuando llegaste, ella ya estaba ahí, esperando y casi llorando de saber que estabas bien, te enrollaba en un gran y largo abrazo y después examinaba todo tu cuerpo para saber si te habías herido. Un día conseguiste un raspón y un pequeño corte en tu brazo, Ellie casi se desmayaba.

—☆

–¿Qué? —preguntó Ellie, casi sonando amenaza.

–Escucha, Ellie... Lo siento, no puedo hacer otra cosa, sabes cómo es María —Tommy se disculpó, un tanto espantado por la reacción de Ellie y por el regaño de María si Ellie seguía oponiéndose.

–No. No, no, no, ella no va a ir con otra persona que no sea yo —se opuso, totalmente seria.

–Ellie, relájate —tomaste su hombro y diste unas palmaditas-. Está bien, ya lo hice dos veces antes y volví bien, no sucedió nada.

–¡Exactamente por eso no quiero que salga, Tommy! —te apuntó—. Salió únicamente dos veces a patrullar sin mí, ¿sabes cómo fue que volvió?

–Ellie, un raspón y un corte no fueron absolutamente nada —Tommy aseguró con una sonrisa, lo que hizo a Ellie bufar con molestía—. No quieras arruinar mi relación con María por ésto, sabes como es ella. —sonrió nuevamente para ocultar el miedo que le tenía a su esposa.

–Dile a María que no va a salir sin mí —demandó, sin querer cambiar de opinión.

–Deja eso, Ellie —intentaste calmarla—. Estaré bien.

–Ellie, si sigues siendo tan sobreprotectora con ella, ¿cómo esperas que algún día pueda defenderse o cuidarse sola?

–No tendrá que hacerlo, no estará sola, siempre estaré para cuidarla.

–¿Y si por pura casualidad no estás algún día? —Tommy se cruzó de brazos.

Ellie se quedó en silencio por unos segundo, la viste buscar ayuda con sus ojitos verdes, intentando comunicarte que te negarás también, buscando tu ayuda para hacer cambiar la idea de Tommy y de María. Pero era cierto, Ellie estaba haciéndote débil, te hacía tan vulnerable, a veces te sentías como una delicada princesa en problemas esperando a su caballero para rescatarla y esa idea no te gustaba del todo. Querías experimentar lo que era el verdadero miedo y la adrenalina de algún momento, sentirte capaz de poder salir sin ayuda de nadie y ser una gran mujer fuerte para regresar sana y, Ellie te estaba quitando todo eso.

–¿Algún problema, Ellie? —interrumpió María, mirándola directamente para después ver a Tommy. Lo viste removerse en sus bracitos cruzados.