Agridulce || Katelena/Bishova

Capítulo 18

— Disculpe, ¿cómo?

— La alumna Belova vino hace unos días a renunciar, le expliqué la situación de que al disolver la pareja, ninguna de las dos podría continuar. Me respondió que tanto ella como usted no continuarían por temas personales de cada una. ¿No estaba enterada?

— N-no. ¡No! Es decir, si. Lo sabía. Solo que habíamos quedado en que yo lo haría. — respondió nerviosa.

— Bien, al parecer su amiga se le adelantó. — encogió los hombros. — Al finalizar esta semana cargaré los datos de los créditos alcanzados de cada una.

— E-está bien. — asintió, y se mantuvo en su lugar.

— ¿Hay algo más que necesite, Bishop? — volvió a preguntar notando que se habia quedado inmóvil.

— No. — salió de su trance. — Gracias, que tenga una linda tarde. — sonrió y giró para marcharse.

— ¡Kate! ¿A dónde vas? — MJ llamó su atención desde su estación. La pelinegra, no muy animada, se acercó a ella.

— Hola. — intentó sonreír pero pareció más una mueca. — Ya no me verás por aquí.

— ¿Por qué? No me digas que finalmente se divorciaron. — bromeó.

— Asi parece. — asintió desviando su mirada. — ¿Y Peter?

— Se retrasó en una clase de química.

— ¿A esta hora?

— Clases de apoyo. La verdad no se si lo hace para ayudar o solo para presumir sus conocimientos. 

— Probablemente ambos. — dijo riendo. — ¿Todo bien entre ustedes? — hizó bailar sus cejas con una sonrisa.

— Bien. — encogió los hombros. 

— ¡Oh, vamos! Tiene que haber algo más.

— No hay nada. — rió. — Pero pasaremos las fiestas juntos, tal vez surja algo. 

— ¡Esa es mi chica! — chocaron sus manos en celebración.

— Y hablando de chicas... ¿Tú que tal? — preguntó curiosa.

— ¿Chicas?¿Yo? ¡Pff! No, para nada. Nadie. Ni una sola persona. 

— Mientes muy mal. — no pudo aguantar la carcajada. — Pero como tu mecanismo de defensa funciona pésimo, significa que no estas lista para hablar de eso. Asi que te respetaré por ahora.

— ¡Yo no tengo mecanismos de defensa!

— Exacto, porque no funcionan. Deberías trabajar en eso. — señaló.

— ¿Sabes? Yo procederé a retirarme, este ya no es mi lugar y no debería seguir interrumpiendote. Suerte con tu... — se giró a leer lo que decía en la pizarra. — ¿Pasta? ¡Yo quería aprender a hacer pasta! Maldita Yelena. —murmuró lo último para si, pero MJ la escuchó igualmente.

— ¿Lo ves? Malos mecanismos de defensa. — volvió a reír. 

— Nos vemos, MJ. — tomó sus cosas.

— Hola, Elizabeth. — Peter se acercó a ambas. 

— Hola, Peter. Adios, Peter. — sonrió y salió. Dejando al chico completamente confundido, y MJ tampoco hizo mucho por explicarle antes de enviarlo a lavarse las manos.

··············

— ¡Wanda! — Kate entró corriendo al comedor en busca de su amiga.