Todo en la vida de Veneer siempre había estado bien, tenía una madre que lo quería mucho y aunque no veía mucho a su padre o su hermanastra aún los quería.
Era una relación complicada pero su madre siempre quiso que se llevarán bien, no lo entendía del todo bien porque se supone que debería odiarlo pero ella no lo hacía, como no lo hacía él tampoco.
Al final la idea de tener una hermana menor le hacía feliz, aún era pequeña y realmente no lo dejaban cuidarlo, solo podía mirarla dormir en su cuna, ambos eran muy parecidos de algún modo.
Mientras crecían la relación con su hermana empezó a ser más complicada. Ella era muy mimada y a pesar de que él hacía lo mejor ella nunca estaba conforme y siempre le gritaba.
Veneer empezó a notar las mentiras de su hermana lo que provocó que su relación se volviera mucho más tensa y complicada, Veneer no apoyaba esto y siempre peleaban, llegó un punto donde ya no quiso ir a la casa de su padre y por un tiempo las cosas habían estado bien.
Conocía a Ritz de toda la vida, sus abuelos conocían a su madre y todo. El día que su madre murió fue el día de su cumpleaños, realmente nunca hacían algo muy grande pero Veneer había visto los cumpleaños de su hermana y no podía evitar querer tener un cumpleaños así. Su madre quiso hacerlo y simplemente fue una sorpresa.
Estaba con su madre en el auto cantando canciones porque su madre era una cantante en un bar local y le enseñaba a Veneer a cantar.
Todo fue demasiado rápido, se escuchó un golpe y Veneer sintió que todo se movía más lento, fue complicado para asimilarlo, su madre lo protegió con su cuerpo y de pronto todo se volvió oscuro.
Cuando despertó estaba desorientado, veía luces rojas y le dolía su cuerpo, vio a su madre al lado pero vio mucha sangre, todo fue confuso y cuando volvió a despertar estaba en el hospital.
Ritz estaba a su lado llorando y tomando su mano. No podía moverse ya que gran parte de su cuerpo estaba vendado.
Miró a su amigo cansado, cuando se enteró de la noticia se devastó, tuvo que mudarse a la casa de su padre obligatoriamente dejando atrás la casa de su madre y donde creció, se deprimió mucho y la recuperación fue más complicada.
Veneer dejó de percibir el aroma de los demás, dijeron que sería temporal pero nunca pudo hacerlo de nuevo, confirmaron que era un trauma por lo que fue medicado por un año.
Lo extraño del asunto y que Ritz supo más tarde es que Velvet sabía lo del incidente, detalles que nadie más debía saber. Pero incluso si ella tuviera algo que ver su padre la protegería.
El primer año fue difícil para Veneer, como no podía sentir el aroma de nadie con frecuencia era atacado por alfas, eran golpes y agresiones físicas.
La primera vez que pasó Ritz estuvo para ayudarlo, la segunda vez casi lo violan un grupo de alfas de no ser porque había policías cerca y oyeron los gritos.
Ritz se prometió que no lo dejaría solo nunca en lugares potencialmente peligrosos. Como Veneer es incapaz de controlar su aroma toma con frecuencia pastillas para controlar su aroma y hacer que básicamente no lo tenga, como un beta.
Velvet ha provocado muchos de estos incidentes, mando muchas veces a alfas a por su hermano y aunque Veneer intentó decirle a su padre este lo acusó de mentiroso. Nadie en la casa lo tomó en cuenta, a veces no le dan de comer y viene a comer a la casa de Ritz con frecuencia.
No había mucho que hacer pero básicamente esa es la situación de Veneer con su familia.
Cuando Floyd escuchó todo esto se quedó perplejo. Miró a Veneer dormir en la cama mientras Ritz curaba algunos golpes.
— Lo siento.
— Oye está bien, no lo sabías, lo siento por golpearte. Además solo fueron golpes esta vez, solo… él no puede quedarse solo.
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Solo hasta ese momento se dio cuenta de lo cerrado que era Veneer. No le gustaba hablar de su familia ni nada de ellos.
No le dijo que ya sabía algunas cosas, no es que quiera que se pelee con Ritz, incluso si no le cae del todo bien.
Al final fue difícil hablarle de eso, el único que podría sacarle algo sería Ramón.
Preguntaba cosas inocentemente y Veneer respondíarespondía. Sabía que lo conocía de muy poco pero no podía evitar preocuparse por él. ya que solo lleva meses viviendo con él, pero hasta ahora él ha sido muy considerado con todo lo que su hermano menor y él han necesitado. Veneer no era una mala persona, de hecho era muy dulce. Era un buen amigo.
De esa forma sentía que si lo podía ayudar haría lo posible por él. El problema era que Veneer simplemente no decía nada cuando tenía problemas. RidRitz decía que no había necesidad de obligarlo porque Veneer siempre había sido así. Al menos no dejaría que le pasara nada de ahora en adelante.
— Cuando sea grande yo no dejaré que te lastimes. — Ramon dijo, era muy lindo escucharlo, en todo esto Ramon lo había visto golpeado y le contaron una versión alterada ya que era un niño.
— ¿Enserio? Gracias Ramon, eso me hace sentir mucho mejor. — Ramon se alegro de que Veneer se estuviera poniendo mejor.
— ¡Te hice un libro de recorte! ¡Mira! Este eres tu, aqui esta mi hermano y este soy yo. — Veneer sonrió al ver el lindo gesto de Ramon, no pudo evitar mirar a Floyd.
— Ten cuidado Floyd o si no me robare a tu hermano. — Floyd se rió al escuchar a Veneer decir eso, sin duda su hermano era muy lindo.
En todo ese tiempo Ramon le escribió a su abuela, Floyd también lo hizo y relataron todo lo que había pasado, también le contaron sobre Veneer. Prometieron ir a visitarla más adelante cuando estuvieran más estables.
Notas de Autor.
"Perdón por no publicar, tenia un proyecto de exposición jaja en fin."
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《Melodía del Amor》
FanfictionFloyd decide llevarse a su hermano menor con él y muchas cosas cambian a raíz de eso. Ramón tiene una mejor infancia y crece con su hermano, quizás también lo ayude a conquistar a él chico de cabello verde del cual está enamorado su hermano y es su...